Como los equipos bregados en muchas competiciones, el PSOE ha aprovechado el mitin de este domingo en Valencia para apretar los dientes en el último tramo de la campaña. Los socialistas se han puesto las pilas en Valencia, donde el ambiente electoral del partido había sido flojo hasta ahora, y desde la ciudad, en un acto conectado con otros mítines en diversos lugares de España, han llamado a la movilización en los días que quedan para las elecciones del 20 de diciembre.
Ante cerca de 8.000 personas, que llenaban el pabellón de la Font de Sant Lluís, coloquialmente conocido como la Fonteta, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha evocado el uso del recinto, donde juega el Valencia Basket, para decirle a Pedro Sánchez, candidato a presidente del Gobierno: “En toda la temporada no se ha perdido aquí ningún partido. Tampoco este”. Puig ha recordado que hace seis meses se ponía en duda el cambio en las autonómicas y él es ahora presidente. “El cambio no es palabrería, es decir y hacer”, ha añadido, para poner de ejemplos decisiones de su gobierno en esos meses como la devolución de la tarjeta sanitaria a los inmigrantes sin papeles, la gratuidad de libros de texto o la moratoria de desahucios. “Si lo conseguimos hace seis meses, también ahora”, ha señalado Puig, que ha insistido: “No os vamos a fallar”.
Animado como venía el público por el grupo Bajoqueta Rock y los compases de la Unión Musical Socialista, los asistentes han jaleado la breve intervención de la cabeza de cartel por la circunscripción de Valencia, Ana Botella (“La buena, la buena”, han gritado en alusión al nombre coincidente de la exalcaldesa de Madrid), que ha esgrimido la papeleta de voto y ha apelado directamente a la militancia socialista, de la que ha asegurado que responde “en los momentos buenos, en los momentos difíciles y en todos los momentos”.
No es un momento fácil, desde luego, el que vive el PSOE. Y Sánchez es consciente de ello. Por eso, en su intervención, ha hecho el mismo gesto de mostrar la papeleta, y ha proclamado: “Este el voto del cambio; con este voto echaremos al amigo de Bárcenas de la Moncloa”. El candidato a la presidencia, -que ha reiterado su compromiso con la Comunidad Valenciana al prometer que “tendrá la financiación que se merece”-, ha centrado en Rajoy sus críticas, aunque no ha olvidado cargar también contra Ciudadanos y contra Podemos. “A veces hemos errado”, ha asegurado en el único momento de autocrítica que se ha permitido, tras repasar los logros de los sucesivos gobiernos socialistas para reforzar la idea de que sólo habrá cambio si gana el PSOE. “No todo lo hemos hecho bien, pero todo lo que se ha hecho bien lleva el sello del PSOE”.
Los socialistas, pues, se han puesto las pilas en la Fonteta, con una demostración de que el partido conserva mucho de su músculo militante. “Así es la renovación, así es el cambio”, ha asegurado Puig en un momento de su discurso, cuando se ha referido a los alcaldes, jóvenes en su mayor parte, que el PSPV-PSOE ha situado al frente de muchos ayuntamientos tras las elecciones del pasado mes de mayo. El alcalde de la ciudad, Joan Ribó, sin embargo, estaba a esas horas en otro mitin, porque es de Compromís. Lo que da una idea del desafío que los socialistas valencianos afrontan el 20D en estas tierras que fueron en otro tiempo un feudo del PP.