Tras los últimos tira y afloja entre el PSPV y Compromís de cara a la elección del próximo presidente de la Generalitat, los socialistas han dado por terminadas las negociaciones. Según la dirección, están “muy molestos” por la actitud de Compromís, que insiste en que Mónica Oltra debe ser la presidenta y además niega su apoyo en varios municipios a los candidatos del PSOE (Torrent o Gandia) pese a su apoyo para que Joan Ribó sea el nuevo alcalde de Valencia.
A pesar de que en la tarde-noche de este lunes, ambas formaciones junto a Podemos cerraron un acuerdo programático sobre los cinco grandes ejes planteados, la tensión se ha desbordado. En cualquier caso, la decisión socialista no es definitiva, sino provisional. Hasta “que se normalicen las relaciones”, aseguran.
De entrada, no acudirán a la próxima reunión de la mesa negociadora -prevista para el miércoles- sino hay un gesto por parte de Compromís. La coalición, al menos hasta el momento, ha defendido que Oltra debe presidir el nuevo gobierno valenciano ya que sus votos (19 diputados) y los de Podemos (13), que representarían un sólo bloque ideológico, superarían claramente a los del PSPV-PSOE (23).
Se ha acabado la época “en el que salía el PSOE y entraba el PP” del gobierno y al revés, dijo el lunes por la noche Pasqual Mollà, uno de los negociadores de Compromís. Los socialistas creen innegociable que su líder, Ximo Puig, debe ser el presidente al representar a la lista más votada de la izquierda.
Compromís: “Los tiempos han cambiado”
Mollà ha asegurado hoy a EFE que los socialistas “se equivocan” si pretenden hacer “una especie de prueba de fuerza” como anunciar que rompen las relaciones con la coalición. El PSPV debe entender qu e “las cosas han cambiado, y que el diálogo abierto y transparente, sin tapujos, y la paciencia” forman parte de los nuevos tiempos que se han abierto tras las elecciones, por lo que no comparte sus “salidas de tono”.
El representante de Compromís, a quien formalmente no le consta que el PSPV-PSOE haya roto las relaciones con ellos al sentirse “insultados” con la postura de la coalición, afirma que no hay que ofenderse “por la democracia”, que consiste en “tener planteamientos distintos”.
La alternativa del PSOE: Ciudadanos
La ruptura de las negociaciones coincide con los últimos coqueteos de los socialistas con Ciudadanos, que como ha reconocido el propio Ximo Puig este martes, les habría ofrecido la alcaldía de Valencia además de la presidencia de Les Corts Valencianes y la jefatura del Consell a cambio de que retiraran su apoyo a la candidatura del nacionalista Joan Ribó como alcalde de Valencia.
No obstante, para que Ximo Puig sea investido president de la Generalitat no basta con el voto favorable de Ciudadanos, sino que también sería necesaria la abstención del Partido Popular, que recordemos ganó las elecciones el pasado 24 de mayo aunque renunció a formar gobierno ante la imposibilidad de conseguir suficientes apoyos.
Además, este próximo jueves, 11 de junio, se constituyen Les Corts Valencianes y tampoco hay acuerdo acerca de la constitución de la Mesa. La presidencia del parlamento autonómico condicionaría el nuevo gobierno en el caso de que entrara a formar parte del mismo Compromís, ya que Oltra anunció que su partido optaba porque no fuera la misma formación la que acaparara las presidencias de la cámara y del gobierno autonómico.