Tras el vendaval inacabado de la operación 'Taula' que conllevó registros, detenciones e imputaciones en el seno del grupo municipal popular, el ayuntamiento de Valencia celebraba este jueves el primer pleno aún en plena vorágine judicial. Pese a que la temperatura del debate no ha sido tan alta como se preveía, la moción de urgencia presentada por Ciudadanos para crear una comisión de investigación a alimentado el debate. Y más con la ausencia del exportavoz del PP en el Ayuntamiento e imputado en el caso, Alfonso Novo, que hasta el final quería acudir al pleno.
“Se tiene que esclarecer lo sucedido con el dinero del Ayuntamiento de Valencia. No vamos a suplantar a los jueces. Vamos a depurar las responsabilidades políticas de todos los casos de corrupción que dañan la imagen de Valencia”, ha defendido el portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento, Fernando Giner, tras presentar la moción. Un texto que ha sido apoyado por todos los grupos. Aunque los tres partidos que integran el gobierno han aportado una versión alternativa en la que se hacía referencia al PP y se establecía los trámites correctos para crear una comisión rechazada este miércoles por el alcalde de Valencia, Joan Ribó (Compromís).
“Hace tiempo que los que estábamos en la oposición reclamábamos comisiones de investigación sobre Nóos y Emarsa. Y siempre se nos negó. Por primera vez pondremos en marcha una comisión que depure las responsabilidades políticas de prácticas que parece que no solo se producían en el norte, como el 3%, y que tanto nos avergüenzan”, ha criticado el portavoz socialista Joan Calabuig en representación del tripartito conformado por Compromís, València en Comú y PSPV-PSOE.
El PP también ha respaldado la moción. Aunque lo ha hecho para “dar la cara y en pro de la transparencia”, en palabras de la sustituta de Novo en la portavocía del grupo popular, María Àngels Ramón-Llin. “No estamos de acuerdo con se cree una comisión cuando el proceso judicial aún está en sus inicios. Y cuando la justicia es quien tiene que aclarar lo sucedido”, ha censurado, para reivindicar: “Como militante del PP voy con la cabeza bien alta, pero también nos avergüenza como al que más lo que está aconteciendo”. Pese a que Giner ha defendido que en la comisión quería que “se investigue a todos y no solo al PP”, se ha aprobado la moción retocada por unanimidad entre todos los partidos que integran el consistorio.
Reconocimiento de las aportaciones; negación de dinero negro
Antes de acceder al pleno municipal, Ramón Llin ha reconocido a preguntas de los periodistas las donaciones hechas por los concejales al partido en campaña electoral por un valor de 1.000 euros al mes de sus sueldos, algo que ha calificado de “práctica habitual” e “intrascendente”. Pero, en cambio, ha desmentido que esas aportaciones se les devolvieran en dinero negro, tal como había informado El Mundo. “A mi no me han devuelto ningún sobre, ni tengo constancia de ello”, ha indicado sin poner la mano en el fuego por todos sus compañeros.
La nuevo portavoz municipal del PP -que ha ejercido como tal al indicar en la moción por la comisión que se votaba a favor, pese al reparo de algunos ediles de su grupo- ha anunciado medidas con respecto a la situación de la secretaria del grupo popular en el Consistorio, Carmen García Fuster. El PP ha acordado con Ribó la destitución de su cargo como secretaria del grupo así como su desvinculación del mismo. Este jueves han presentado un escrito para hacer efectiva esta decisión.
Además, la líder del PPCV, Isabel Bonig, ha anunciado que los populares se querellarán contra los condenados por corrupción de su partido por daños y prejuicios. Hay que recordar que entre los detenidos se encuentran, la exconcejal María José Alcón -puesta en libertad la misma noche del martes- ; y entre los imputados el portavoz municipal, Alfonso Novo, y el asesor Luis Salom. Por su parte, Ribó ha advertido que, ante las informaciones aparecidas en prensa de financiación irregular del PP, éstos no ganaron las elecciones “de forma legal”.