Un nuevo seísmo de magnitud 1,8 en la escala de Richter se registró el lunes en el Golfo de Valencia, concretamente en el entorno de la plataforma Castor, según el Instituto Geográfico Nacional. La actividad de la plataforma está parada tras registrarse terremotos en la zona en 2013.
El presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, aseguró el pasado miércoles que los trabajos de la plataforma Castor frente a las costas de Vinaròs (Castellón) no se reanudarán mientras los informes, que debe emitir el Ministerio de Fomento, garanticen que no se repetirán los movimientos sísmicos que afectaron a la costa castellonense.
Después, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, subrayó que si no hay un informe de los expertos que diga “categóricamente” que reanudar la actividad en el almacén de gas no tendrá ningún riesgo para la población, no se inyectará más gas.
Con paralización, petición de indemnización
Mientras, la sociedad promotora del almacenamiento subterráneo, Escal, tiene el derecho a revertir la infraestructura a las autoridades españolas hasta junio de 2033 al valor pendiente de amortizar, según recuerda el socio canadiense de ACS en el proyecto, Dundee Energy.
En su presentación de resultados anuales, Dundee se ratifica en los principios suscritos con el Gobierno español en 2008 y avalados en octubre del año pasado por el Tribunal Supremo, según los cuales los promotores de Castor tienen derecho a recibir una indemnización por el valor residual del activo, incluso en caso de negligencia o dolo por parte de la empresa.
Esta garantía había sido denunciada por el actual Ejecutivo al considerar que va en contra del “devenir normal” de este tipo de autorizaciones. De hecho, Castor es el único de los tres grandes almacenamientos de gas de España con esta claúsula.