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Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Dos vuelos semanales a Rumanía para el “aeropuerto sin estrés” de Castellón

Los viajeros podrán viajar desde Castellón a Bucarest, y viceversa, los miércoles y los domingos a partir del próximo mes de junio. La aerolínea encargada de operar los vuelos será Blue Air, que ofrecerá 35.000 plazas al año. La compañía aérea prevé que el trayecto sea un éxito, debido a la abundante comunidad rumana que vive en la provincia de Castellón y que está “muy bien basada y asentada desde hace mucho tiempo”, según explicó su director en España, Federico Llopis, en un acto de presentación celebrado el jueves junto a los portavoces de la empresa privada que gestiona el aeropuerto, SNC Lavalin.

En el padrón correspondiente a 2014 publicado por el INE, están registrados 45.710 ciudadanos de esta nacionalidad. Según Llopis, suponen el 10% de la población. El vuelo supondrá una reducción del viaje de los dos días que actualmente dura en un autobús a las tres horas y media de trayecto en avión. “Viajarán mucho, si las tarifas son competitivas”, afirmó. Blue Air se convierte así en la segunda compañía aérea que operará de forma regular en el Aeropuerto de Castellón. Se suma a Ryanair, que viaja a Londres desde el mes de septiembre, y también a Bristol, aunque este último destino tiene conexión sólo en verano.

De herramienta turística a sustituto del autobús

No obstante, la aspiración de Blue Air no se limita a los pasajeros rumanos que pretendan viajar entre su país de origen y su lugar de residencia. Además, intentará captar a turistas de ambos destinos y a pasajeros que emprendan viajes de negocios. La prensa presente en el acto señaló la contradicción entre el objetivo inicial con el que se justificó la construcción del aeropuerto -que fue concebido como una herramienta para el turismo-, y el hecho de que finalmente sirva para que se desplacen las personas que ya viven en la provincia. La respuesta de Lavalin y de Blue Air fue que se promocionará el destino turístico de Castellón en Rumanía. En concreto, se invitará a varias agencias de viajes y touroperadores a que visiten la provincia, y se hará una rueda de prensa en el aeropuerto de Otopeni, en Bucarest para presentar la nueva línea regular.

Federico Llopis explicó que los vuelos a Bucarest desde Castellón están planificados en días alternos a los que saldrán desde el aeropuerto de Valencia, que se mantendrán. El presidente y director general del aeropuerto, Alain Russel, afirmó que esto no supondrá un problema porque “no se trata de competir, sino de complementar” al aeródromo de la ciudad del Turia. La cercanía entre ambas instalaciones -están a una hora de distancia- fue una de las mayores críticas que recibió el proyecto del aeródromo castellonense.

Un aeropuerto “acogedor”

La instalación se inauguró en 2011, poco antes de las elecciones autonómicas, por su principal promotor, Carlos Fabra, entonces presidente de la Diputación de Castellón y del PP provincial y ahora en prisión por corrupción. Desde entonces, pasaron más de cuatro años hasta que, en septiembre, salió el primer vuelo regular de sus pistas. En este tiempo, la Generalitat adjudicó la concesión a SNC Lavalin en 2014. Esta empresa asume la gestión durante veinte años en los que recibirá 25 millones de euros de la administración autonómica, según informó Europa Press. La Generalitat comenzará a recibir ingresos cuando se alcance un tráfico de 1,2 millones de pasajeros anuales.

Alain Russel comenzó el acto de presentación del jueves con una presentación de la instalación. Afirmó que es un “aeropuerto sin estrés” porque es “cómodo y no hay mucha gente”. Además, es “fácil de llegar”. No por todo ello, continuó, deja de ser “low cost” porque, por ejemplo, “el aparcamiento es gratuito”. “Los viajeros nos han dicho que es bonito y limpio” algo que, según lamentó, “no es común” a todos los aeródromos del mundo. “Es un aeropuerto acogedor”, resumió.