La portada de mañana
Acceder
Puigdemont estira la cuerda pero no rompe con Sánchez
El impacto del cambio de régimen en Siria respaldado por EEUU, Israel y Turquía
OPINIÓN | 'Pesimismo y capitalismo', por Enric González

La Sindicatura de Comptes detecta empresarios que pactaban precios para quedarse contratos menores de Turismo

Aunque no se ha producido un enriquecimiento ilícito, la Sindicatura de Comptes ha advertido a la entidad Turisme Comunitat Valenciana (TCV), dependiente de Presidencia de la Generalitat Valenciana, de que ha detectado pactos entre empresarios para repartirse contratos menores de cursos de formación de cocina y restauración.

El informe de fiscalización de la Sindicatura ha analizado una muestra de los contratos menores adjudicados por la entidad (contratos de obras por un valor inferior a 40.000 euros y contratos de suministro o de servicios por menos de 15.000 euros) y concluye que entre los responsables de las empresas privadas “se ha producido una práctica repetida por la cual un empresario que había ofertado en un primer contrato un precio anormalmente alto, en otro contrato ofertaba el mejor precio y resultaba adjudicatario”. “Inversamente”, abunda el informe, “otro empresario que había ofertado un precio anormalmente alto en este último contrato, sin embargo en el primer contrato ofrecía la mejor oferta y resultaba adjudicatario”. El organismo fiscalizador incluso ha observado esta práctica “en ofertas presentadas el mismo día”.

El supuesto reparto de contratos menores demuestra, a juicio de la Sindicatura de Comptes, que “no se ha producido una verdadera competencia entre las ofertas económicas”. No ha habido enriquecimiento ilícito —de hecho, los contratos son por cuantías pequeñas— ni han sido irregulares, “pero se trata de hechos y circunstancias que no deberían producirse en la gestión contractual de Turisme Comunitat Valenciana con la finalidad de garantizar una competencia adecuada”, según aconseja el informe.

En el apartado de recomendaciones, la Sindicatura de Comptes insta a TCV a pedir un escrito de los miembros de las mesas de contratación y a los firmantes de los informes de valoración de las propuestas técnicas en el que conste que no incurren en conflicto de interés alguno que pudiera comprometer su imparcialidad y su independencia. También recomienda evitar, como criterio de adjudicación de la oferta económica, las fórmulas matemáticas que puedan llegar a crear distorsiones en el cálculo de las puntuaciones. Además, el órgano fiscalizador de la Generalitat Valenciana también sugiere que se tramiten como un contrato único los contratos menores que tengan un objeto de naturaleza similar y recurrente año tras año, algo que TCV ha puesto en práctica este 2020, según destaca la Sindicatura.

El informe reprocha a TCV que en sus cuentas anuales correspondientes al ejercicio 2019 no ha incluido en el apartado de hechos posteriores al cierre ninguna alusión a la posible incidencia de la crisis sanitaria por la pandemia de la COVID-19 en la gestión económica de la entidad pública. No es la única observación a las cuentas anuales: el organismo fiscalizador que dirige Vicent Cucarella considera que TCV también debió incluir en el apartado otra información la denuncia que interpuso ante la Policía el 2 de diciembre del 2019 el director general de Turisme por un supuesto intento de estafa al estilo del que sufrió la Empresa Municipal de Transporte (EMT) de València.

Los servicios de gestión económica de TCV detectaron el intento de fraude por parte de una supuesta empresa que simulaba ser la adjudicataria de un contrato y que pretendía cobrar ilícitamente los abonos. El informe de la Sindicatura reprocha a Turisme que no informara en sus cuentas del importe que pudo haber sido estafado (658.284,74 euros) ni de “las consecuencias legales que pudieran haberse derivado” del fraude.