Un técnico de la extinta Conselleria de Solidaridad ha asegurado que el presidente de la Fundación Cyes, la ong a través de la cual supuestamente se desviaron casi un 1,8 millones de euros destinados a Nicaragua, le pidió que no solicitara “más papeles” porque su expediente “ya lo tenía hablado y resuelto” con el entonces responsable del departamento, Rafael Blasco.
Blasco, un factótum del PP valenciano, su antigua cúpula, el presidente de Cyes y un empresario, Rafael Tauroni, están siendo juzgados estos días en el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana por los supuestos delitos de malversación de caudales públicos, prevaricación, tráfico de influencias e inductor de falsificación documental.
Según el fiscal, la Generalitat y la acusación popular, son responsables del robo de casi 1,8 millones de euros destinados a desarrollar proyectos solidarios en Nicaragua y que fueron desviados a la compra de inmuebles en Valencia. El político y el resto de acusados defienden su inocencia.
La técnico, sin embargo, ha sido concluyente en su declaración, en la que ha revelado las presiones y tejemanejes para que una entidad sin experiencia –Cyes, no confundir con la constructora del mismo nombre- se adjudicara un proyecto de gran complejidad y elevado presupuesto, “En los requerimientos tuve presente que Cyes no cumplía los requisitos. Recuerdo que me insistían sobre este expediente. Preguntaban por qué no se enviaba a la evaluadora, yo decía que no cumplía el requisito de experiencia previa”, declaró Teresa Clemente, que cuando sucedieron los hechos trabajaba en la dirección general de cooperación al desarrollo.
“Cuando me llamó Marcial López –responsable de Cyes- fue para decirme que no le pidiera más papeles porque todo estaba hablado y resuelto con el conseller”. Rafael Blasco, de hecho, se reunió con algunos funcionarios que tramitaban el expediente para pedir su agilización y aprobación “un 31 de julio por la tarde”, “cuando no solemos trabajar”.
“La reunión se celebró en la Conselleria y la palabra la tenía Blasco. Nos preguntó por la Fundación Cyes y nos dijo que teníamos que tramitar el acta. Le dijimos que no podía estar entre las entidades subvencionadas porque no tenía experiencia previa. Insistía e insistía..”, relató Clemente.
“Nos dijo que teníamos que confiar en él porque nos había mantenido en el puesto pese a que le habían dicho que éramos un mal equipo. Él nos dijo que las normas las interpretaba él, no nosotros. Incluso llegó a decir que él sabía que existía documentación que acreditaba la experiencia previa de Cyes. Le decíamos que no y se enfadaba. Nos llegó a decir que si nunca habíamos hecho algo así y que iba a revisar todos nuestros expedientes”, continuó la testigo, que semanas más tarde fue despedida.
Rafael Blasco, que ya abandonó el PSOE en medio de un juicio por corrupción del que fue absuelto, también acaba de ser dado de baja irrevocable en el PP.