La red corrupta del 'caso Azud' abonó casi medio millón de euros a la exalcaldesa popular de Xixona Rosa María Verdú Ramos y a sus familiares a través de una “empresa pantalla”, según revela el auto de la jueza instructora al que ha tenido acceso elDiario.es. La ex primera edil recibió 18 euros por metro cuadrado frente a los 14 que consiguieron el resto de propietarios de los terrenos del Programa de Actuación Integrada (PAI) El Espartal, que incluía la construcción de viviendas y de un campo de golf en terrenos clasificados como no urbanizabas.
El empresario Jaime Febrer envió a su 'conseguidor' José Luis Vera, generosamente remunerado por sus servicios. Para ello, Febrer creó la mercantil Espacios Urbanos de Xixona SL para adquirir los terrenos. Sin embargo, la primera propuesta presentada al Consistorio, tras un acuerdo con la mercantil Valent SA para adquirir 2,8 millones de metros cuadrados y quedarse como agente urbanizador, fue rechazada.
La entonces alcaldesa del PP y el concejal Francisco Domenech Asensi “exigieron” una nueva propuesta que incluyera terrenos propiedad de la firma Invemi SA, cuyos socio eran precisamente familiares directos. Así, en la propuesta definitiva se añadían 2,2 millones de metros cuadrados pagados a familiares de las cargos municipales del PP.
Los terrenos fueron adquiridos por una “empresa pantalla” para que la alcaldesa popular no apareciera “vinculada directamente al PAI”, sostiene la instructora de la causa. Así, la empresa de Febrer adquirió una parcela catastral de Rosa María Verdú a la mercantil Zona Park SL con fondos de su empresa Construcciones Valencia Constitución SL.
La trama “encubrió” la provisión de los fondos mediante la firma de un contrato de préstamo por valor de 495.756 euros de Construcciones Valencia Constitución SL a Zona Park SL. Una vez rubricado el contrato de préstamo, Zona Park SL adquirió los terrenos de la alcaldesa y de sus familiares por el mismo importe exacto (495.756 euros). En una segunda fase, Espacios Urbanos de Xixona SL (la firma creada ad hoc para la operación) adquiere a Zona Park SL la parcela por 619.092 euros.
De tres euros a 18
El pelotazo de la alcaldesa del PP fue notable. Sus terrenos valían unos modestos tres euros por metro cuadrado, al estar en zona no urbanizable, pero la trama se los compró por 18 euros. El resto de vecinos propietarios de los terrenos obtuvo 14 euros.
Otros terrenos fueron adquiridos a una mercantil de familia del concejal Francisco Domenech Asensi, a 15 euros el metro cuadrado. El precio fue más barato que el de la alcaldesa porque se habían presentado varias quejas e incluso denuncias por la actuación de la empresa familiar Invemid SA (de la que el edil era apoderado) en la preparación del PAI El Espartal.
Finalmente, la reducción del precio del metro cuadrado se compensó después mediante contratos privados y costaron 1,2 millones de euros. Tras estas operaciones, en noviembre del 2005, se firmó un convenio de colaboración ente la mercantil de Febrer y el Ayuntamiento de Xixona para la gestión del suelo y la tramitación del concierto previo. Un convenio que firmaron precisamente la alcaldesa y el concejal agraciados con los generosos pagos de los terrenos familiares.
Convenio recurrido
El convenio fue recurrido y declarado nulo, por lo que la trama tuvo que presentar una segunda alternativa. Durante la operación también surgió un “grave problema” por la falta de recursos hídricos, momento en el que José Luis Vera volvió a intervenir. La trama optó por conseguir los recursos hídricos a través de la sociedad estatal Acuamed para que la desaladora de Muxamel-Campello abasteciera de agua al municipio de Xixona.
Vera actuó como intermediario entre la empresa de Febrer y el Ayuntamiento de Xixona. El abogado, históricamente ligado a los socialistas valencianos, “ideó” un convenio con el director de relaciones institucionales de Acuamed, el dirigente del PSPV-PSOE Joan Navarro, también imputado en la causa. De esta manera, el convenio “era un instrumento que podía ser firmado con rapidez por la alcaldesa [del PP] sin necesidad de los informes de intervención y acuerdos del pleno”, indica el auto.
Sin embargo, cuando el PAI estaba a punto de caramelo, las cosas se torcieron seriamente. En 2007, Rosa María Verdú Ramos perdió la vara de mando en el Consistorio, siendo sustituida por el socialista Ferran Verdú. “Por razones de cambio del equipo de gobierno del ayuntamiento a razón de las elecciones municipales, la postura del Consistorio fue totalmente contraria al desarrollo del PAI El Espartal”, concluye la jueza instructora.