Desde hace poco más de un año, las tertulias de café ya no son lo mismo. Por supuesto, el fútbol, el último chascarrillo del “reality chow” de moda o el chiste que nos ha llegado al guasap siguen presentes, que no se diga que hemos perdido las buenas costumbres. Pero ahora hay algo más.
Sí, lo sé. Usted nos dirá que de política siempre se ha hablado en el bar, aunque con cuidado, ya se sabe. Porque, como la religión, son temas que carga el diablo y de los que nunca hay que hablar con alguien a quien aprecias. Pero no, quizá ahora hay algo diferente. Porque ahora no solo hablamos de politiqueros, o de la última corruptela, o de las encuestas. Ahora hablamos de política, de políticas, de lo público. Del futuro y de nuestro papel en él. Hablamos de política, bien o mal, con más o menos conocimiento de causa. Pero hablamos, en mayúsculas.
Y es que son tiempos curiosos; incluso extraordinarios, si bien se mira. Porque nos hemos hartado. Ya está bien de engaños, de falta de respeto y de gobernantes que entienden la política como una herramienta para enriquecer a los suyos. Y por eso están cambiando las formas y, sobre todo, están cambiando las caras, los y las protagonistas. Y no, no piense que nos referimos a los nuevos rostros mediáticos. Nos referimos a la gente que se mete en política. Mire a su alrededor. Seguro que hay alguna persona que está metida en alguna plataforma ciudadana, incluso esa que nunca pensó que dedicaría energía a la lucha política. Porque hemos decidido tomar las riendas. Así que ahora, le pese a quien le pese, con sus muchas luces y también sus sombras y sus dudas, hay mucho más espacio para usted. Sí, usted que es una persona práctica, como cantaba Serrat, tiene muchas más opciones para participar en política.
En Valencia, desde hace unos meses, estamos preparando un proyecto electoral. Guanyem València pretende ser un espacio en el que hacer las cosas de otro modo. Un partido que es una plataforma ciudadana en la que, aunque le cueste creerlo, usted puede escribir el programa electoral o, si se anima, presentar su candidatura a la Alcaldía. ¿Qué le parece? No es política-ficción, lo estamos haciendo. Porque algo está cambiando en la política de este país, y ese cambio empieza por cada uno y cada una.
En Guanyem Valencia no caben los Alfonsos Grau. No solo por ser corruptos, sino porque nunca habrían podido presentarse sin firmar nuestro código ético. Porque nunca podría haber ocupado el número dos de una lista sin ser votado en unas primarias abiertas a la gente. En este momento crítico se necesita gente honrada. Gente como usted. Para apoyar con su voto una propuesta política decente, pero también para construirla y, por qué no, para liderarla y llevarla a cabo. Esta ciudad necesita gente valiente que dé un paso al frente.
En Guanyem sí cabe usted, que sufre el mal gobierno y la corrupción y sabe que no lo merece. Usted, que ha visto reducido su salario y que no llega a fin de mes. Usted, que a lo mejor ha batallado en su asociación vecinal para que pongan de una vez un colegio público o arreglen las aceras o se ha sumado de vez en cuando a quienes denuncian la situación de la huerta, o del Cabanyal, firmando un manifiesto o acudiendo a algún acto reivindicativo. O usted, que ve como su hija se marcha al extranjero y su hijo se queda en el paro; que está harto de que le tomen el pelo y que la alcaldesa le falte al respeto, bien sea con el maldito caloret, bien burlándose de la Asociación de las Víctimas del Metro o bien defendiendo a un político corrupto como Grau (investigado, encausado e imputado por el caso Noos, que ya ni los trucos de lenguaje peperos le salvan). Por caber, en Guanyem caben hasta otros partidos políticos.
En fin, que las personas que nos hemos venido organizando para preparar este proyecto somos gente normal, como usted. Estamos en un proceso cargado de sentido, apasionante y el objetivo merece mucho la pena. Pero no podemos hacerlo en solitario, necesitamos toda la fuerza y la ilusión que seguro compartimos, la ilusión de convertir Valencia en un lugar más amable, más digno y más solidario. Inscríbase, propóngase, vote, escríbanos, acérquese. Aún le quedan tres días (hasta el 20 de marzo) para inscribirse como candidato y unos cuántos más (hasta el 2 de abril) para apuntarse y poder votar. Y, aunque no lo haga, siempre podrá participar en los espacios de Guanyem, son abiertos y no dejarán de serlo. Porque somos quienes no tenemos nada que esconder, porque somos la gente de la calle que, harta de que la engañen, necesita un cambio. Le necesitamos a usted. ¿Se apunta?