Las gasolineras no podrán instalarse dentro de los núcleos urbanos de Castelló de la Plana. Así se ha aprobado en la Junta de Gobierno Local extraordinaria que tenía como único punto del orden del día de la suspensión de la tramitación y el otorgamiento de licencias de instalación de puntos o unidades de suministro de combustible en núcleos residenciales consolidados. Esta suspensión es aplicable por periodo de dos años hasta que se modifique el Plan de Ordenación pormenorizado.
Desde el equipo de gobierno municipal se señala que de este modo “quedan blindados los núcleos residenciales de la capital para que no se instalen en ellos gasolineras”. La alcaldesa Begoña Carrasco ha manifestado que de esta forma se quiere evitar que se vuelvan a dar situaciones como la que se dio en el barrio de Rafalafena, donde se proyectaba una gasolinera con una capacidad total de 100.000 litros en combustibles. “Es un paso más, después de la aprobación el pasado mes de octubre, de la Declaración Institucional, a propuesta del gobierno y respaldada por todos los grupos, para impedir que se instalen gasolineras próximas a las viviendas”, sentencia Carrasco.
Cabe recordar el malestar y la preocupación generados en el barrio de Rafalafena ante la solicitud de instalar en sus inmediaciones una gasolinera, algo a lo que desde el gobierno municipal se opusieron desde el primer momento.
La alcaldesa Carrasco ha asegurado que “tomamos esta medida de forma preventiva, para poder anticiparnos a futuras solicitudes de este tipo de instalaciones, serán bienvenidas en nuestra ciudad para ubicarse allá donde no haya núcleos poblacionales cercanos. Y mientras, en paralelo estudiaremos el cambio de la normativa”.
Cabe recordar que el pasado 26 de octubre la Junta de Gobierno denegó la autorización de la gasolinera en Rafalafena, basándose en informes técnicos, por no ajustarse los proyectos a los usos previstos por el planeamiento aplicable a esa parcela y por las afecciones negativas al tránsito de la zona. En este sentido se encontró la fórmula legal para que no se instalara una gasolinera en una zona residencial del núcleo urbano consolidado como es Rafalafena.
Al margen de los informe técnicos y jurídicos de compatibilidad desfavorable por no ajustarse a los usos previstos en el planeamiento, la implantación de la estación de servicio se desaconsejaba puesto que provocaría un incremento del tráfico de vehículos y camiones de mercancías peligrosas. Así lo constataba otro informe de la Sección de Movilidad Urbana, que indicaba la incidencia negativa en el tráfico de esa zona residencial densamente poblada y muy transitada, con colegios e instalaciones deportivas, entre otros. Además, el área de Seguridad y Emergencias también se emitió un informe desfavorable a la instalación de la gasolinera.