La alcaldesa de València del PP, María José Catalá, afirmó este lunes que mantendrá las retribuciones y dedicaciones exclusivas aprobadas por el Ayuntamiento en 2019, así como el número de asesores por grupo establecidos para la anterior legislatura.
Catalá cobrará de esta forma 88.800 euros, el mismo sueldo que tuvo Joan Ribó, de Compromís, en los últimos cuatro años. El salario de alcaldía, ha ido sufriendo variaciones. En el último mandato de Rita Barberá, su asignación ascendía a 103.200 euros; al acceder Ribó a la alcaldía en 2015, se lo bajó a 82.600 euros, mientras en 2019 aprobó una subida del 2,5% marcada por los Presupuestos Generales del Estado para todos los funcionarios, y que por tanto también se aplicó a los concejales y al alcalde, que pasó a percibir los mencionados 88.800 euros.
La alcaldesa trasladó este jueves la propuesta a los portavoces de los diferentes grupos municipales. En cuanto al cupo de asesores, se mantendrán 1,4 por concejal en los grupos de la oposición y 1,7 por edil para los grupos de Gobierno, de forma que a Compromís le corresponderían 13, al PSPV 10, a Vox 6 y al PP 22, más tres que le corresponderían a Catalá por parte de alcaldía. Sus sueldos, al igual que en los últimos cuatro años serán de 64.000 euros para los rasos y de 73.900 para los secretarios de cada grupo municipal.
“Yo creo que es un acuerdo que no puede criticar nadie, ya que lo ha adoptado la izquierda de esta ciudad, y a mí me parece razonable, mi intención es mantenerlo”, dijo Catalá.
En cuanto a las retribuciones y dedicaciones exclusivas, aseguró que también se mantendrá el acuerdo del año 2019 por el cual “todas las retribuciones exclusivas se van al gobierno y las retribuciones parciales a la oposición”. De los 25 concejales con dedicación exclusiva que por ley debe tener el Ayuntamiento, 13 corresponderán al PP (todos sus ediles), seis a Compromís, cuatro al PSPV y dos a Vox, mientras que de los ocho restantes con dedicación parcial y un 75% del sueldo quedarán tres para Compromís, tres para el PSPV y dos para Vox.
En cuanto a sus sueldos, a falta de aprobación oficial, los concejales del Gobierno municipal cobrarán 79.991 euros, los de la oposición con dedicación exclusiva 71.563 euros y los que tengan dedicación parcial 60.828 euros.
En este punto, la llamada ley Montoro establece que, en el caso de València, de los 33 concejales que conforman el consistorio de la capital, 25 tienen derecho a la dedicación exclusiva mientras que el resto, ocho regidores, deben acogerse a la dedicación parcial cuyo sueldo supone un 75% del que percibe un edil a tiempo completo. Es decisión del alcalde cómo repartir estas ocho plazas que permiten realizar otras actividades remuneradas y que suponen un salario público menor.
En el pasado mandato, los concejales de la oposición con dedicación exclusiva tenían un sueldo de 71.500 euros y los que tenían la dedicación parcial de 66.600. Ribó optó por asignar las ocho dedicaciones parciales a la oposición, aunque para compensar la merma de ingresos, calculó ese 75% sobre el sueldo del alcalde fijado en 88.800 euros. Esta maniobra, pese a estar validada por los servicios jurídicos municipales, fue considerada irregular por la Agencia Antifraude al entender que el 75% del sueldo de los ediles con dedicación parcial se debe calcular sobre el salario de los concejales con dedicación exclusiva, no del alcalde.