La alcaldesa de València, María José Catalá, ha rechazado este martes derribar el antiguo hotel Sidi Saler, ubicado en la playa de El Saler y en el entorno del parque natural de la Albufera, y ha asegurado que buscará “con la propiedad” del inmueble y con “los vecinos” de la zona “un proyecto” para este edificio que “se ajuste al entorno”.
El compromiso llama la atención después de que el propio Ayuntamiento, en resoluciones firmadas por los técnicos municipales, hayan denegado a la propiedad del inmueble, los fondos Coral Homes y Divarian, las licencias solicitadas para poner en marcha de nuevo la instalación.
El motivo es que el inmueble se encuentra fuera de ordenación sustantiva por lo que solo se le puede otorgar permisos de obras para realizar tareas de mantenimiento y conservación del edificio, que pos su estado de abandono requeriría de importantes obras de reforma y consolidación. Además, el hotel chocaría con el Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN) del Parque Natural de la Albufera y su ubicación sobre dominio público marítimo-terrestre.
Los dueños del hotel, sin embargo, alegan que el edificio se encuentra fuera de ordenación en diferido, una calificación que sí le permitiría llevar a cabo intervenciones de reforma en el edificio.
Ante esta situación, en octubre del pasado año los propietarios interpusieron un recurso contencioso administrativo en el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) y al mismo tiempo pidieron al Ministerio de Transición Ecológica una prórroga de la concesión otorgada en su momento, cuya vigencia depende de que logren obtener las licencias para poner en marcha el hotel.
Fuentes del Miteco han informado a este diario que “los titulares de la concesión han enviado más información relativa a los recursos judiciales en marcha contra las decisiones del Ayuntamiento”, por lo que “una vez analizados se tomará una decisión por parte del ministerio”.
Catalá: “la demolición no es la solución”
La primera edil ha considerado que esta construcción “puede albergar un buen proyecto” y ha apuntado que “demoler esa infraestructura, como se hizo en su día con el polideportivo El Saler, no es la solución.
La responsable municipal ha comentado que la intención del anterior ejecutivo local, formado por Compromís y PSPV, de “iniciar un expediente de derribo” fue una cuestión que “se verbalizó” pero que no se materializó. “Nunca se hizo. Por tanto, no hay iniciado ningún expediente en este ayuntamiento de derribo del Sidi Saler”, ha precisado.
Catalá ha afirmado que esa circunstancia deja al actual gobierno municipal que preside y que integra el PP “el margen oportuno” para “hablar con los vecinos y para buscar una solución al Sidi Saler”.
“He dicho en muchísimas ocasiones que esa infraestructura puede albergar un buen proyecto y que demoler esa infraestructura, como se hizo en su día con el polideportivo El Saler, no es la solución. Es decir, los escombros no son la solución”, ha subrayado.
De este modo, la alcaldesa se ha mostrado a favor de “buscar un proyecto con la propiedad y con los vecinos que se ajuste al entorno y que responda a las expectativas de los vecinos de El Saler”.
Preguntada por si eso supone la compra del edificio por parte del consistorio, María José Catalá ha respondido que “supone hablar con la propiedad, ver cuál es su planteamiento y si el proyecto que tiene en mente es compatible con el entorno” y con la idea del nuevo equipo de gobierno de València.