El Ayuntamiento de València ya se ha puesto manos a la obra para analizar la viabilidad de la revisión de la tasa que abonan las entidades bancarias por el aprovechamiento del espacio público que conlleva el servicio de los cajeros automáticos que dan al exterior de sus oficinas.
El alcalde, Joan Ribó, anunció este lunes que estudiarían una penalización a aquellas entidades que no ofrezcan atención personalizada a las personas mayores que tengan dificultades para utilizar los dispositivos o para realizar operaciones a través de aplicaciones móviles o banca online.
Al respecto, el concejal de Hacienda socialista, Borja Sanjuán, ha explicado a elDiario.es que los servicios técnicos están analizando las posibilidades, ya que ha reconocido que existen dificultadas jurídicas, puesto que la tasa se justifica con un estudio de aprovechamiento económico, con lo que se debe argumentar cualquier posible variación.
El edil ha informado de que actualmente el Ayuntamiento de València recauda 105.000 euros por esta tasa y que los que la tasa más alta alcanza los 787 euros al año.
Con todo, otros ayuntamientos como el de El Vendrell (Tarragona) han anunciado esta misma iniciativa. El Consistorio aprobó el 25 de enero en el pleno una moción que propone imponer una tasa de 10.000 euros a las entidades bancarias que descuiden el trato hacia la gente mayor en lugar de los 848 euros que pagan ahora de media.
Con todo, Sanjuán ha recordado que también estudian otras iniciativas para incentivar la mejora de la atención presencial como incluirlo para sumar puntos en los pliegos de contratación de las entidades bancarias con el Ayuntamiento.
De hecho, el Ayuntamiento de València respaldó el pasado jueves, en el pleno ordinario de enero, las peticiones de las personas mayores para que las entidades bancarias mejoren su relación y atención con ellos. El ejecutivo local, el Govern del Rialto que forman Compromís y PSPV; el PP, y Cs, dos de los tres grupos de las oposición municipal, han respaldado una moción para contar con “bancos amigables”, reclamar mayor información para los mayores y horarios especiales.
La moción, que ha llegado a la sesión plenaria por vía de urgencia, ha sido presentada y defendida por la vicealcaldesa y portavoz socialista, Sandra Gómez. La también concejala de Desarrollo Urbano consideró que el Ayuntamiento de València tiene “mucho que decir al respecto”, sobre “la necesidad básica de poder gestionar nuestro dinero con facilidad y sencillez”, y estimó conveniente “ponerse en la piel de los mayores y asumir su inseguridad, miedos e incertidumbres”.
La responsable municipal ya anunció que desde la Concejalía de Hacienda que dirige el socialista Borja Sanjuán se trabaja para que los pliegos que se licitan para que entidades financieras trabajen en la gestión tributaria de los impuestos municipales establezcan en su puntuación, como algo “importante” y para “valorar” en la adjudicación, que “haya un horario de atención presencial”.