Los hosteleros aprietan a Catalá para que València sea sede del Mundial de 2030: “No podemos permitir ver pasar el tren”

Los agentes económicos empiezan a movilizarse ante la incertidumbre que rodea a la posible reanudación de las obras del nuevo estadio del Valencia CF y por extensión, a las posibilidades de que la ciudad se convierta en una de las posibles sedes del Mundial de 2030, cuyo impacto en el PIB se ha cifrado desde el Gobierno en 5.120 millones de euros.

Además, las dudas se han incrementado en las últimas horas tras el repentino cambio de guión anunciado por el Ayuntamiento con el objetivo de solucionar el entuerto, ante el que el Valencia CF aún no se ha pronunciado oficialmente. En concreto, el equipo de Gobierno del PP anunció este miércoles que no realizará ninguna negociación sobre el convenio urbanístico que permita finalizar el coliseo hasta que el club retome efectivamente las obras de construcción, paralizadas desde hace casi quince años. Una decisión que se desconoce que repercusiones puede tener de cara a garantizar ante la Federación Española de Fútbol (FEF) que los trabajos estarán terminados en tiempo y forma.

En este sentido, el presidente de la Federación Empresarial de Hostelería de Valencia (FEHV), Manuel Espinar, he comentado en declaraciones a elDiario.es que “la ciudad debe de hacer lo posible por entre las sedes, hay que hacer lo posible porque es una apuesta importante”.

Según Espinar, los hosteleros son conscientes “de las dificultades con el tema del nuevo estadio, es algo que se debe solucionar porque se trata de un evento muy importante, un bombazo, y actualmente València está muy bien posicionada turísticamente, mucho mejor que en el mundial de 1982 que a nivel económico y de visitas fue un fracaso”.

Por este motivo, Espinar ha advertido de que València “no puede permitirse ver pasar ese tren como pasó con la Copa del América que al final se fue a Barcelona” y ha exigido “al Ayuntamiento y a la Generalitat Valenciana que se pongan las pilas” porque “todas las asociaciones empresariales están interesadas en que València sea sede del Mundial, desde los hoteleros, hasta las agencias de viajes, los comercios o los taxistas”.