Sandra Gómez afronta sus segundas elecciones como candidata a la alcaldía de València por el PSPV. En 2019, tras un primer mandato junto a Compromís y València en Comú, obtuvo un 19% de los votos y siete concejales, dos más que en 2015. Ahora afronta una nueva cita electoral con optimismo y “en una tendencia muy ascendente” después de una campaña intensa en la que ha destacado especialmente en los diferentes debates. A pocos días de la cita electoral, repasa los principales temas de actualidad, así como las propuestas de los socialistas para la ciudad de València de cara a los próximos cuatro años.
¿Qué valoración hace sobre los insultos racistas que sufrió Vinicius el pasado domingo en Mestalla?
En primer lugar, estoy muy indignada y dolida con los impresentables racistas que han generado tanto daño a la imagen reputacional de nuestra ciudad. Celebro que el Valencia CF haya tomado la decisión de expulsar de por vida a esta gentuza que no representa lo que somos como ciudad ni lo que es la afición de Mestalla. A la par, estoy indignada con el hecho de que se haya intentado generalizar que toda la afición de Mestalla o toda mi ciudad es racista. Nada más lejos de la realidad. Esta es la ciudad que va a celebrar los Gay Games, esta es la ciudad que echó al bus de 'Hazte Oír', esta es la ciudad que se llena cada 8 de marzo, es una ciudad abierta, plural, respetuosa, diversa. El pueblo valenciano no tiene nada que ver con el racismo. Eso es absolutamente falso. Dicho esto, tolerancia cero, pero con todos los jugadores. Cuando llamaron “negro de mierda” a Diakhaby, el único debate fue si se lo había inventado o no. El racismo afecta a todos los jugadores con independencia de qué equipo sean.
¿Cómo se puede luchar contra ese grupo ultra que profirió insultos cuando llegó el autobús del Real Madrid?
Efectivamente, ahí es donde el club debe ser más tajante. Si tenemos claro que hay un grupo que no representa al valencianismo y que no representa lo que es un club de familias, un estadio centenario, un club respetuoso como el Valencia CF, lo que tienen que estar es, como ha dicho el club, expulsados de por vida.
¿Pero si están en la calle, como sucedió el otro día, la Policía no debería actuar?
Por supuesto, eso es un delito de odio, es totalmente punible. No hay duda.
Hablando del Valencia CF, ¿qué harán si el club no suscribe el convenio para finalizar el nuevo estadio?
El Ayuntamiento les trasladó un convenio y ellos deben decidir si lo firman o no. Lo importante es que solo podrán disponer de los beneficios urbanísticos si destinan los recursos a acabar el polideportivo de Benicalap y el nuevo estadio, que era algo que con la antigua Actuación Territorial Estratégica (ATE) no sucedía, una ATE que por cierto firmó la que hoy es candidata a la alcaldía del PP. Sinceramente creo que el club está esperando a que pasen las elecciones para ver si tiene un interlocutor o interlocutora más cómoda con la que poder negociar.
¿Se plantearían acabar el estadio y repercutirle el coste al Valencia CF, es decir, la famosa ejecución subsidiaria?
Nosotros no descartamos ninguna opción, ahora bien, lo que tiene que hacer el Valencia CF que es lo lógico y razonable es firmar y cumplir.
Con el centenario se ha vuelto a abrir el debate sobre la posibilidad de quedarse en Mestalla y descartar el traslado, ¿lo ve viable?
Yo hoy en día veo prácticamente irreversible la operación. Si se hubiese planteado hoy seguramente nadie estaría hablando de un nuevo estadio, pero la decisión que se tomó entonces la veo hoy urbanísticamente irreversible. Una decisión, por cierto, que tomó el PP, no hay que olvidarlo.
En cuanto a los apartamentos turísticos, proponen una moratoria para toda la ciudad. ¿Pero qué pasará con los que están funcionando de forma irregular?
Efectivamente, queremos aplicar una moratoria para que ninguna vivienda más se pueda usar como apartamento turístico. Además, con la tasa turística que hemos propuesto el departamento de inspección tributaria nos puede ayudar a controlar mucho mejor los apartamentos ilegales, que en ningún caso podrán regularizarse. Cuando se detecte alguno que funciona sin los debidos permisos, sanción y cierre como ya se ha hecho en centenares de casos, que se han sancionado con expediente de restauración de la legalidad. Además, hemos ganado 12 recursos que nos han presentado asociaciones de apartamentos turísticos.
¿Cómo pretenden aplicar la tasa turística si gobiernan?
Lo que queremos es gravar especialmente los apartamentos turísticos y los cruceros. Son dos actividades que generan impacto en la ciudad, pero aportan poco en cuanto a empelo, gasto o tributos, y qué menos que paguen una tasa. También se aplicaría al resto de alojamientos, pero en menos proporción.
¿A nivel tributario, qué otras novedades proponen?
Lo que apostamos es por ayudar a las familias que más necesitan a aliviar la carga económica. Frente al PP, que intenta engañar a la mayoría de los ciudadanos aplicando el timo fiscal, que consiste en que, para que te ahorres 20 euros en un recibo del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), una gran superficie se ahorre 20.000 o 30.000 euros. Nosotros apostamos por bonificar de forma completa a aquellas familias que tengan más carga. Por ejemplo, yo como alcaldesa me comprometo a aplicar la bonificación de familias numerosas a las que tienen dos hijos y a las monoparentales, también con una situación de dependencia. Les bonificaremos el IBI para que tengan menos cargas económicas. Las bonificaciones van del 60% al 80%.
¿Creen que se podrá resolver en el siguiente mandato el cobro del IBI a las actividades económicas de la Iglesia?
Yo espero que sí, estamos pendientes de la resolución de un litigio. Que quede claro que no se trata de cobrarlos a los espacios de culto, sino a los espacios que generan una actividad económica, como la explotación de un aparcamiento o un hospital privado.
¿En materia de vivienda, cuántas están en obras en estos momentos y cómo generarán nuevos inmuebles más allá de la construcción?
Ahora mismo en València se están construyendo 2.000 viviendas protegidas. Mientras el PP nos dejó poco más de 200 en 24 años, ahora hemos impulsado 2.000. De ellas, 1.100 las está ejecutando el Gobierno en el parque de artillería y de ingenieros. Aumsa (Actuaciones Urbanas municipales) está construyendo otras 400 en Moreras, el centro histórico y avenida de los Naranjos. Además, está el proyecto que ha recuperado la Generalitat en La Torre. Y hay viviendas dispersas que se están rehabilitando o se han rehabilitado ya por parte de la compañera Isabel Lozano. Ahora proponemos construir otras 2.000 en solares que ya son municipales con los fondos que han puesto a disposición el ICO y el IVF.
¿En cuanto a los alquileres, cómo aplicarán la nueva ley de vivienda?
Declarando toda València como zona tensionada para garantizar que los hogares de nuestras familias van a seguir siendo sus hogares. El PP ha hecho mucha demagogia diciendo que vamos a intervenir en los precios y no es así. Lo que vamos a hacer es estabilizar. No hay derecho que por renovar el contrato de alquiler de tu casa te pidan el doble y te obliguen a marcharte, y eso es lo que queremos proteger aplicando una subida correspondiente al IPC. Aquí hay dos bandos, o estás al lado de las familias o estás al lado de los que especulan o de los fondos de inversión. El PP está de lado de los fondos, que cada uno elija.
En cuanto al Programa de Actuación Integrada (PAI) de Benimaclet, sigue habiendo un conflicto con la asociación vecinal y además ahora está la sentencia que da la razón a Metrovacesa. ¿Cómo se va a solucionar?
Nosotros hemos sido el partido que, frente a la confrontación, ha buscado una solución que es hacer un Plan Especial de Benimaclet, porque veíamos que había un grupo de vecinos que quería redefinir la nueva parte de Benimaclet, y nosotros entendíamos que, efectivamente, no podían generarse dos barrios, el nuevo y el viejo, y que con un Plan Especial que englobara todo Benimaclet el PAI podría resolver muchas carencias. Ahora bien, en lo que no estamos de acuerdo es en que eso sea un solar y un descampado a la libre ocupación. Eso es derecho y propiedad de todos los vecinos y vecinas, porque ahí va un gran parque y no entiendo por qué se tiene que renunciar a él. Y ese es espacio público para una escoleta municipal, un centro de salud, un colegio, un campo de fútbol, y no entiendo por qué deben renunciar a ello.
Pero ellos, según dicen, no renuncian a eso, lo que piden es menos edificabilidad y una transición amable con la huerta.
Aquí lo que hay es una advertencia. Tenemos una sentencia que dice que tenemos que admitir a trámite el PAI de Benimaclet. Y eso es una advertencia a los que llevan tres años diciendo que podemos hacer lo que nos dé la gana y que quienes poníamos cautelas parece que no estábamos en el lado bueno de la historia. Perdona, al final nos han dado la razón. Y gracias a que el partido socialista impulsó un Plan Especial, hoy hay un plan B al PAI de Metrovacesa. Si se hubiese desclasificado y se hubiese rechazado el PAI de la promotora hoy estaríamos obligados a admitir y a desarrollar puntualmente el PAI. Por lo tanto a todos los que estaban en contra de ese PAI de Metrovacesa, hoy les tengo que decir que gracias al partido socialista no se va a desarrollar ese PAI tal y como se planteó.
¿Se reunirán con la asociación vecinal si siguen gobernando?
Yo me he reunido muchas veces con ellos y me seguiré reuniendo con ellos.
¿En cuanto al PAI del Grau, tienen noticias del soterramiento de las vías de Serreria?
Es un tema complejo. El PP renunció públicamente al soterramiento y este ha sido el partido que lo ha desatascado, ya está en marcha el canal de acceso y el ministerio publicará en breve el de Serreria. El PAI, que era un pufo por el circuito de la Fórmula 1, lo vamos a convertir en el circuito de las personas. Esa es la diferencia entre el pasado de los pufos y la ciudad del futuro que plantea el partido socialista. En cuanto al estudio informativo del soterramiento, el presupuesto ronda los 100 millones y lo que queda por cerrar es la parte a financiar por cada administración.
¿En cuanto a las peatonalizaciones, por la que han hecho una fuerte apuesta en este mandato, cuáles son los principales proyectos de cara al próximo mandato?
Lo importante es que esta ciudad mire al futuro y no al pasado de los excesos, de los excesos de velocidad, de los excesos de contaminación, del tráfico rodado. Esa es la València que propone el PP cuando se opone frontalmente a generar un paseo cultural en Guillem de Castro, que nos han recurrido el proyecto, o a humanizar la avenida de Pérez Galdós, que sus vecinos y vecinas quieren vivir más tranquilos y, por tanto, que se convierta en una avenida más amable y renaturalizada, con unas pantallas acústicas y de impacto ambiental. Eso es lo que estamos proponiendo. Tenemos también la remodelación de la plaza del Ayuntamiento, en la que acabamos de ganar también un recurso. Si esta ha sido la legislatura de 'València ciudad de plazas', la siguiente será la de los paseos porque también tenemos Guillem de Castro, Ausiàs March, Pérez Galdós y la avenida del Puerto, que son actuaciones de pacificación de las grandes avenidas. Se trata de hacerlas más habitables.
Eso va también ligado a la capitalidad verde europea. ¿Cómo cree que va a influir en la ciudad este hecho?
Efectivamente va en la línea que estamos desarrollando de una ciudad más verde y más resiliente contra el cambio climático, más renaturalizada. Sinceramente, una vuelta al pasado por parte del PP y de Vox puede tirarlo todo por tierra. Sin ir más lejos, el otro día el candidato de Vox hablaba de que renunciaría a los Gay Games. Me preocupa mucho que con un Gobierno del PP y Vox se renunciara o se tirara por tierra la capitalidad verde europea.
¿En cuanto a movilidad, qué ejes proponen si gobiernan y llevan esa concejalía?
Sacar la movilidad del terrenos del conflicto. La movilidad está para hacerle la vida más fácil a la gente y creemos que hay dos fórmulas. La primera, tiene que dejar de ser polémico que València camine como otras ciudades europeas hacia más peatonalizaciones y entornos seguros. Y la segunda, mejorar la gestión del transporte público. Ahí pienso que la Empresa Municipal de Transportes (EMT) tiene mucho margen de mejora, y por eso apostamos por María Pérez, la responsable de la integración tarifaria, de haber desatascado la línea 20, otro pufo que nos dejó el PP, y de haber constituido la Autoridad Metropolitana de Transporte. Además, vamos a hacer una modificación legal para poder habilitar solares municipales como aparcamientos e incluso mediante unas estructuras efímeras hacer parkings en altura para duplicar el número de plazas que quepan en un solar.
Dice que la EMT tiene margen de mejora. ¿En qué sentido?
Nosotros hemos planteado una EMT que sea más rápida, más cómoda y más barata. Hemos planteado 11 líneas de alta frecuencia con un paso cada cinco minutos que conectan sin paradas intermedias la ciudad de punta a punto. Además, proponemos líneas exprés que conecten los pueblos con la ciudad de València. Al mejorar la calidad de servicio y hacerlo más rápido crecerá la demanda y el número de viajeros. Se han dado pasos para ser más baratos y cómodos con las bonificaciones y la nueva tarjeta Suma y ahora lo que planteamos es que sea más rápido.
¿Cómo ve la situación en la que se encuentra la ampliación del Puerto de València?
Está pendiente de la resolución judicial sobre la entidad competente para decidir una declaración de impacto ambiental (DIA), por lo que en primer lugar lo importante es tener certeza jurídica. La ampliación del Puerto no se puede convertir en nueva zona de actividades logísticas (ZAL), que ha sido un empastre y un pufo que nos dejó el PP, por lo que hay que hacer las cosas bien. Eso pasa por ver quién es competente para decidir sobre la DIA, algo que está pendiente de resolución judicial, y ver si hace falta una nueva declaración. Dicho esto, quiero dejar muy claro que estamos muy a favor de una ampliación que nos va a permitir mejorar la competitividad de nuestro Puerto. La ampliación debe ser absolutamente respetuosa y neutra con nuestro patrimonio natural, pero es cierto que es una infraestructura que también es importante para que empresas como Volkswagen se hayan situado aquí.
¿Qué modelo de gestión propone para la Marina de València?
El nuevo presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), Joan Calabuig, es una persona que conoce perfectamente la ciudad y tiene una sensibilidad para entender que ahí lo ideal es que haya un consorcio entre la Generalitat, el Ayuntamiento y el Puerto que gestione los espacios públicos de la Marina. Hay unos espacios que tenemos que gestionar como ciudad y la lámina de agua la debe gestionar la Generalitat Valenciana.
¿Exigirán para la ciudad la titularidad de los terrenos que siguen siendo del Puerto?
Yo no estoy especialmente obsesionada con eso, lo que quiero que haya es un organismo jurídico capitaneado por la ciudad y dirigido por la ciudad que gestione todos esos espacios.
Haga un poco de autocrítica, ¿Qué aspectos de estos últimos cuatro años considera mejorables?
Creo que hay que dar una respuesta más rápida para la necesidad de vivienda y, por ejemplo, creo que debemos mejorar el servicio que presta la EMT. En este sentido, me gustaría plantear un pacto local por la corresponsabilidad que ayude a generar mayor conciliación entre la vida laboral y la profesional. En primer lugar, universalizando la educación de cero a tres años, en segundo lugar haciendo que los cuidados de las personas mayores sean públicos con más centros de día, y en tercer lugar mejorando los horarios, para lo que planteamos un plan de ayudas de 1,5 millones de euros de forma que las empresas vayan pasando de la jornada partida a la continua. Por último, proponemos la racionalización de los horarios de las grandes superficies. Somos el único país de Europa en el que cierran a las 22.00 horas, no lo comparto. Debemos equipararnos a Italia, donde cierran a las 20.00 horas y es el que más tarde cierra. Para ello debemos alcanzar un gran acuerdo con los agentes sociales y la Generalitat. Además, tengo la intención de impulsar una ordenanza para abolir la prostitución que persiga a los proxenetas, a los puteros y facilite el cierre de locales.
¿Considera una anomalía que una concejala, en este caso la portavoz del PP de València, María José Catalá, pida compatibilizar su dedicación exclusiva con su puesto de docente en una universidad como la VIU sin hacer público su sueldo por esta función?
Ahora se elige qué alcalde o alcaldesa queremos. Para mí un alcalde o alcaldesa tiene que ser transparente, honesta y estar por el servicio público. Y no se cumplen estos requisitos con todo lo que sabemos de la Universidad Internacional de València (VIU). En primer lugar porque la candidata del PP, cuando era consellera de Educación, vendió una universidad pública, por lo tanto desmanteló un servicio público. En segundo lugar, la malvendió por cuatro millones después de una inversión púbica de 34 millones, por lo que no es de fiar. En tercer lugar, dejó que las personas que dirigían la VIU se pegaran la vida padre, que es el caso del candidato de Vox, que se gastó 15.000 euros en viajes y comilonas como rector cuando Catalá era la consellera y presidía el patronato de la Fundación VIU. En cuarto lugar, una vez vendida, se coloca para trabajar allí y no quiere decir cuánto cobra. Por lo tanto, tampoco es transparente.
¿Qué sensaciones tiene de cara a las elecciones?
Creo que somos la única fuerza que crece y que suma, que está en tendencia ascendente. Si siempre ha sido útil votar al PSPV, ahora lo es más que nunca porque de nosotros va a depender que haya un gobierno progresista y, sinceramente, esta campaña nos está sentando muy bien. Siento que este partido está más fuerte que nunca y que estamos en una tendencia muy ascendente. Por lo tanto, pido el voto para el partido socialista porque es la única garantía de que haya un gobierno progresista.