El Ayuntamiento de València ya dispone del proyecto de ejecución del nuevo estadio de la avenida de las Cortes Valencianas. El club ha confirmado mediante un comunicado la presentación de toda la documentación dentro del plazo estipulado que finalizaba este sábado 12 de octubre a las 12.00 horas.
A falta de conocer los detalles sobre los acabados de aspectos como la fachada o si la cubierta cubrirá el 100% de la grada, el proyecto debe adecuarse a las últimas exigencias incluidas en las fichas urbanísticas aprobadas el pasado mes de julio en el pleno, como condición para que el club recupere los beneficios urbanísticos que perdió con la caducidad anticipada de la actuación territorial estratégica en agosto de 2022, esto es, 40.000 metros de terciario de la avenida de las Cortes Valencianas (comprometidos con Atitlan), así como 75.900 metros cuadrados de residencial y otros 14.000 de terciario en la parcela de la avenida de Aragón.
En concreto, el estadio debe tener una capacidad de 70.000 espectadores, debe estar preparado técnicamente para instalar una pista de atletismo desmontable y tiene que incluir una cubierta fotovoltaica con el objeto de favorecer la generación de energías renovables. Además, se creará un espacio urbano común bajo la marca paraguas del Valencia CF que aglutine espacios simbólicos y funcionales para los aficionados, turistas y público en general a través de espacios de encuentro e hitos y elementos simbólicos, reservando espacios emblemáticos para los aficionados, para algún monumentos, para el museo del club y otros espacios museísticos, la sede social y sus oficinas.
Ahora, tal y como recoge el punto tercero del acuerdo plenario, el Ayuntamiento debe encargar una auditoría externa sobre el proyecto de ejecución presentado que confirme los costes de la obra que queda por ejecutar y que cumple con todos los requisitos exigidos para que en su momento el club pueda rentabilizar los mencionados derechos urbanísticos. De esta forma, ante cualquier incumplimiento con los plazos de la obra (30 meses desde su inicio antes del 12 de enero), el Valencia CF deberá presentar una garantía bancaria con la cuantía de las obras que queden por ejecutarse en base a la mencionada auditoría. De lo contrario, podría perder los aprovechamientos. Igualmente, el club deberá presentar garantía financiera por el importe de los trabajos que queden por ejecutar si quiere vender los aprovechamientos urbanísticos antes de finalizar las obras.
En concreto, el tercer punto del acuerdo dice textualmente: “Que se elabore una auditoría externa, aprobada en la Comisión de Urbanismo de febrero de 2024, del coste del estadio con los requisitos de las fichas urbanísticas aprobadas con las exigencias del convenio, y el coste resultante sea el utilizado para el depósito de la fianza, para preservar que no se materialicen los derechos urbanísticos sin asegurar el cumplimiento de las obligaciones, como requisito previo a la aprobación del programa de actuación integrada para el desarrollo de la unidad de ejecución de la fase 2 de la zona A 'antiguo Mestalla'. Todo ello derivado de la necesidad de garantizar que no se produce un nuevo incumplimiento en línea con el que ha acreditado el TSJCV, evitando que las obras vuelvan a quedar paralizadas una vez iniciado el trámite o que estas produzcan como resultado un estadio de menor calidad y condiciones del requerido”.
El Valencia CF, con todo, podrá iniciar las obras antes del 12 de enero, tal y como está estipulado, sin necesidad de que esté acabada la auditoría, cuyo proceso administrativo de licitación, adjudicación y elaboración irá más allá de los tres meses que quedan para arrancar las obras.
Por otra parte, lo que no está claro aún es la fórmula de financiación del proyecto que, según ha trascendido, costará al menos 20 millones más de lo previsto por el aumento del precio de los materiales de obra, es decir, unos 190 millones en total. El club dispone de los 80 millones del crédito de CVC gestionado por La Liga, por lo que necesitará al menos entre 100 y 120 más para finalizar los trabajos, más otros 10 millones aproximadamente como mínimo que debe abonar al Ayuntamiento correspondiente al pabellón deportivo de Benicalap, una cuantía que debe pagar antes de recibir la licencia de obras para desarrollar los dos edificios de comercial, hotelero y de oficinas ubicado junto al nuevo estadio. El club ya ha solicitado este permiso de obras y ha pedido al Ayuntamiento que le cuantifique el coste del pabellón.
La entidad del máximo accionista Perter Lim, a quien como desveló en exclusiva elDiario.es investiga la Fiscalía Anticorrupción por presunto blanqueo, está cerca de alcanzar un acuerdo con el banco americano Goldman Sachs con el objetivo de lograr una línea de financiación que podría alcanzar los 250 millones de euros. Sin embargo la operación que debe servir en gran medida para costear las obras aún no está cerrada. Y es que, el Valencia CF está obligado a finalizar el nuevo estadio sin contar con los recursos que pudiera obtener con la venta de la parcela del viejo Mestalla, incluso sin la totalidad de los 35 millones por los que ha vendido los 40.000 metros cuadrados de edificabilidad terciaria de Cortes Valencianas a Atitlan. Y en su defecto, debería aportar garantía financiera por el importe de las obras que queden por ejecutar, para lo que necesitaría igualmente acreditar liquidez.
La asociación Libertad Valencia CF, por su parte, informó este jueves de la admisión a trámite por parte de los juzgados del recurso contencioso interpuesto contra el acuerdo plenario de finales de julio que supuso la aprobación de las fichas urbanísticas.
Comunicado del Valencia CF
El Valencia CF ha informado de la presentación este viernes del proyecto de ejecución del nuevo estadio. En un comunicado, el club ha detallado que “la entrega documental consta de más de 1.500 planos y 4.500 páginas de documentos que desarrollan y detallan el planteamiento del Proyecto Básico que se presentó al consistorio el pasado 31 de enero de 2024”.
En el proyecto de ejecución se especifican “elementos tan importantes como las estructuras de hormigón, la estructura metálica, la cubierta, las fachadas, las instalaciones (gas, fontanería, saneamiento, electricidad, ventilación y climatización, telecomunicaciones, protección contra incendios, ascensores…) y la arquitectura interior del estadio (suelos, techos, paredes, cerrajería, carpintería interior, pinturas, impermeabilizaciones, urbanización y paisajismo)”.
La presentación de toda esta documentación por parte del club “supone un hito importante en el cumplimiento de las etapas para hacer realidad el nuevo estadio y es el paso previo a la reanudación de las obras”, ha afirmado la entidad.