El València CF prevé llevar al juzgado la caducidad del plan del nuevo estadio a la espera de un acuerdo con el Ayuntamiento

El pleno del Consell tiene previsto dar cuenta este viernes de la desestimación del recurso de reposición presentado por el club el pasado 1 de septiembre contra la caducidad anticipada de la Actuación Territorial Estratégica (ATE) del nuevo estadio.

Tal y como vanzó elDiario.es, este recurso agota la vía administrativa y, al ser rechazado, a la entidad deportiva tan solo le queda la vía judicial mediante un contencioso administrativo, como ya hizo cuando recurrió judicialmente la denegación de la prórroga para cumplir con el plan urbanístico.

Consultadas fuentes oficiales del Valencia CF dejaron entrever que sí que harán efectivo el recurso judicial para salvaguardar los intereses del club al menos hasta que haya un acuerdo definitivo con el Ayuntamiento sobre el convenio del nuevo estadio.

En concreto, fuentes de la entidad deportiva han asegurado que “el club va a seguir sin dejar que caiga por la vía legal” para defender los intereses de la sociedad “hasta que pueda haber un acuerdo” ya que de lo contrario el consejo podría incurrir en “administración desleal”. Así, han insistido en que lo deseable es acordar el nuevo convenio con el Ayuntamiento, pero hasta que eso se produzca “se debe mantener viva la vía legal”.

Tal y como avanzó eldiario.es, la resolución de la caducidad anticipada de la ATE adoptada por el pleno del Consell establece el mantenimiento de las ventajas urbanísticas que otorgaba el convenio (40.000 metros cuadrados de suelo terciario en el viejo Mestalla y otros 40.000 en el nuevo) siempre y cuando se alcanzara un acuerdo con el Ayuntamiento de València en cuanto a las características del coliseo, los plazos y las garantías.

Ene estos momentos, el Ayuntamiento está en proceso de redacción de un convenio que establezca el nuevo marco jurídico y las condiciones que el club deberá asumir con respecto al nuevo estadio si quiere reactivar las obras y mantener los beneficios urbanísticos.

Entre esas condiciones figura que el aforo del estadio debe llegar a 70.000 espectadores, aunque finalmente podría haber acuerdo cercano a la última propuesta del club que contemplaba 66.000 ampliables a 70.000, siempre y cuando se garantice un aforo neto de al menos 60.000 para poder acoger las semifinales del Mundial de Fútbol de 2030.