La crisis de Vox en Valencia deja al PP sin rival electoral a su derecha

Cristina Seguí, la líder de Vox en Valencia y uno de los rostros más populares del partido conservador, ha presentado su dimisión como presidenta local del partido 11 días después de haber ganado las primarias del comité ejecutivo provincial.

La espantada de Seguí, que había conseguido cierto reconocimiento popular –más de 15.000 seguidores en twitter, por ejemplo- gracias su trabajo, la radicalidad de sus mensajes y su presencia mediática, descabeza al único partido que competía con el PP por electorado inequívocamente de derechas.

El PP, por tanto, tiene vía libre en ese caladero de votos. UPyD también está en crisis en la Comunitat Valenciana, aunque las últimas encuestas señalan que la formación de Rosa Díez va a la baja y nunca han dado a Vox posibilidades de obtener representación en las Corts Valencianes.

Seguí ha anunciado en un comunicado su dimisión de “forma irrevocable” así como su abandono de la “militancia/afiliación al que hasta ahora ha sido mi partido” porque el “ritmo” de Vox es “excesivamente lento para lo que España necesita”. Además, “apoyos (…) que siempre he admirado giraban la cabeza en momentos clave”.

Contra Podemos y los independistas catalanes

En su despedida, Seguí ha cargado ímplicitamente contra Podemos y los impulsores de la consulta sobre la independencia en Catalunya. El “populismo totalitario crece de la mano del separatismo al que pocos han tenido la decencia y valentía de enfrentarse”.

“Frente a este envite los partidos tradicionales no son solución, sino parte del problema por haber creado, mantenido y alimentado la corrupción del sistema”. Seguí, por el momento, renuncia a combatir estas supuestas amenazas. Al menos desde Vox.