“Es preferible dejar la silla vacía un año a dejar la silla vacía para siempre”, ha asegurado este domingo el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, en un mensaje institucional para defender las restricciones que se aplicarán esta Navidad frente a la pandemia de COVID-19. Puig ha pedido “máxima prudencia” a la sociedad.
Tras un recuerdo a los 2.700 víctimas que el coronavirus se ha cobrado hasta ahora en la Comunidad Valenciana, Puig ha indicado: “La solidaridad, en esta Navidad, puede ejercerse de una manera muy sencilla: limitándonos a hacer aquello que marca la normativa, por el bien de toda la sociedad”.
El presidente valenciano ha insistido en que “el virus está matando, el virus está causando graves problemas de salud, el virus está repuntando de una manera preocupante en los últimos días”. Y ha añadido: “Olvidarlo sería un error imperdonable”.
Los datos que se registran en Estados Unidos, donde se contaron cifras máximas “de 100.000 personas hospitalizadas en un día, 20.000 pacientes ingresados en UCI y muchas vidas perdidas” tras la celebración familiar del Día de Acción de Gracias, han servido a Puig para asegurar que “por doloroso que sea”, resulta necesario aceptar que esta “será una Navidad diferente”.
“¿Cómo no va a serlo?”, se ha preguntado el presidente valenciano, que ha recordado: “A nadie le gusta renunciar a las comidas familiares y a los encuentros de amigos en torno a la mesa, como siempre hemos hecho y seguiremos haciendo, pero menos todavía nos gustaría llorar la muerte de un ser querido; menos todavía nos gustaría ingresar en la UCI dentro de 10 días por asumir ahora unos riesgos innecesarios”.
“Se trata de un esfuerzo, sí, pero es un esfuerzo menor que el confinamiento domiciliario que cumplimos en primavera”, ha indicado Puig. “Es un esfuerzo menor que los 100 días que estuvimos sin pasar de provincia y mucho menor que el enorme y admirable esfuerzo que llevan haciendo centenares de miles de trabajadores y trabajadoras en los hospitales o a las residencias desde marzo”.
Puig ha finalizado su discurso recordando que la Comunitat Valenciana está preparada para recibir y administrar hasta 600.000 dosis “tan pronto lleguen las vacunas en los próximos días”. “Ya estamos al final del túnel; que ese horizonte de esperanza nos dé fuerza”, ha concluido.