“La Comunidad Valenciana ha puesto fecha a la reforma del sistema de financiación; en 2017 tendremos nuevo modelo”. A ello se ha comprometido el Gobierno central con las comunidades autónomas en la Conferencia de Presidentes, según ha trasladado el president de la Generalitat, Ximo Puig, durante la sesión de control en les Corts.
Si bien, el jefe del Consell ha admitido que es solo el principio del camino y que todavía queda mucho por hacer. Y es que esta reforma no es la única reivindicación del Ejecutivo valenciano ante el central. En la reunión con sus homólogos, Puig volvió a poner sobre la mesa la condonación de la deuda de la Generalitat con el Estado y mecanismos de compensación por los años con el actual sistema de financiación, cifrados en 14.300 millones de euros.
En materia social, se exige al Gobierno de Rajoy que asuma la financiación de los servicios y la atención a las personas dependientes como establece la Ley de Dependencia, un acuerdo estatal contra la violencia de género -impulsado desde la Comunidad Valenciana- y terminar con la “competencia desleal” de las diferentes comunidades en materia fiscal; el 'dumping' hacia el centro de la península.
En la reforma del modelo de financiación el president ha encontrado el respaldo del resto de grupos parlamentarios. En otros asuntos, como la violencia de género, Podemos ha considerado insuficiente el acuerdo: “queremos políticas claras, presupuesto y coordinación para ejecutarlas”, ha criticado Antonio Montiel, síndic de la formación. Además, ha añadido que la 'tarjeta social' -“una llave de acceso al Registro de Prestaciones Sociales Públicas”, según el borrador- supone crear un registro de pobres, “como el padrón de la Beneficencia”. En materia de empleo -cuyos datos se han actualizado hoy- se ha encontrado con las críticas de Ciudadanos, cuyo líder le ha reprochado que “con grandes anuncios no se crea empleo”.
El PP propone al president cinco pactos
Bonig ha ofrecido cinco pactos al presidente, el primero de ellos en materia de empleo y captación de inversiones, dado que éstas “se van porque no hay ni orden ni control”. El segundo pacto versaría sobre educación, área en la que ha acusado a Puig de permitir que Vicent Marzà “aplique su línea totalitaria y sectaria contra la libertad de educación”, mientras que el tercero gira en torno a la financiación de los ayuntamientos, que esperan un acuerdo de las principales fuerzas políticas, ha dicho.
Además, ha propuesto otro pacto por el agua y se ha preguntado por qué no quiere el apoyo de los 'populares' en este tema. “¿Por qué no quiere nuestro apoyo, es que no soy tan guapa como la señora Oltra, qué le hemos hecho?”, ha ironizado. El último acuerdo, ha proseguido Bonig, se ciñe a política fiscal y le ha pedido que cuando se reforme la financiación suprima los impuestos de sucesiones y donaciones, y en tanto esto se produce los bonifique al 99%
Rescatar el acuerdo por las infraestructuras de 2015
Por su parte, el Grupo Compromís ha trasladado al resto de parlamentarios una propuesta para firmar de nuevo el acuerdo firmado en octubre de 2015 en el que se insta al Gobierno central a que las inversiones en infraestructuras sean equiparables al peso poblacional de la Comunidad.
El acuerdo fue suscrito en dicha ocasión por todos los grupos parlamentarios y ahora se pretende llevarlo de nuevo al Congreso, aprovechando el cambio de actitud del Gobierno, que parece más abierto a las reivindicaciones de las autonomías.