Nueve ideas con gancho gastronómico para sorprender en el Día de la Madre

Cada vez es más complicado asombrar a nuestras madres con una invitación en su día porque parece que siempre se trata de comer y que da igual dónde mientras se coma bien. Pero, si reparamos un poco en sus necesidades o en lo que más les gusta personalmente, podemos encontrar alternativas que las saquen de su entorno o de su rutina y les supongan un detalle añadido que les haga más ilusión.

Como un spa con vino y quesos, un paseo previo al tapeo, una merienda en un palacio o un reservado muy especial, etc. En fin, aquí tienes diferentes ideas por toda la península que, si no te pillan a mano, te inspirarán para buscar otras parecidas en tu localidad. 

En Barcelona

Para las que prefieren merendar, el Hall de El Palace Barcelona: poco alcanzará a imaginarse que la vas a llevar a gozar de un Afternoon Tea al más puro estilo inglés, con su té con scones, sándwiches y exquisitos pasteles elaborados por el Pastry Chef del hotel, Miguel Costa.

Podréis departir mientras suena la música de Fer Tejero, con un repertorio clásico pero fresco. Y no dudéis en añadir a la elegante propuesta una copa de cava eco Mirgin Alta Alella o de champagne R de Ruinart Brut. ¡La vas a hacer sentir reina por un día!

Para las que van estresadísimas, AIRE Ancient Baths: estos baños antiguos situados en El Borne barcelonés (o en Vallromanes, en una antigua masía de 1497; en Almería y en Sevilla) son el paraíso soñado para sumergirte con tu madre en una burbujeante y cálida cuba de vino donde os harán un masaje craneal antes de serviros una copita de blanco o tinto con una tabla de quesos, frutos secos y uvas para el aperitivo o para merendar.

A eso le sigue el circuito termal por el fantástico spa y también os llevaréis puesto un masaje corporal en camilla. Puedes tener la seguridad de que no se va a olvidar de la experiencia.

En la Comunidad de Madrid

Para las amantes del marisco, Bálamo: dada su espectacular decoración a cargo del arquitecto Rui Costa, presidida por el jardín vertical interior más grande de Europa y con un parque infantil con cuidadores, es el restaurante ideal para celebrar el Día de la Madre en familia, poniéndoos morados de marisco de cáscara y de concha a precios imbatibles en Madrid, como la mariscada (52€ /dos personas) o la parrillada (58 euros), o bien a la carta. Vale la pena desplazarse hasta Alcorcón y tiene parking gratuito. 

Para las que aprecian el interiorismo, Nexo: pide uno de los reservados de este restaurante de Argüelles. A poder ser, el que incorpora bodega. Delicioso todo, desde la gilda con escerificación, pasando por las alcachofas a la brasa con chips, yema de huevo y gel de naranja.

Así como las gyozas de langostino, demiglacé de jamón, acompañadas de camarones fritos crujientes; hasta el bacalao asado con salsa de ajos fritos, piparras encurtidas y base de patata confitada o el lomo alto argentino Black Angus certificado acompañado de pimientos de piquillo confitados y patatas con mojo picón. Y de postre, texturas de chocolate con bizcocho de calabaza.

En la mitad norte

Para las mamás viajeras, Nómada Street Food: en Zaragoza, llévala a recordar sus escapadas a países lejanos y sus gastronomías, con platos como el pad thai de lagarto ibérco y gambas con verduritas frescas y fideos de arroz o el arroz frito cantonés con verduras, setas shitake y salsa de soja, la fondue de quesos o la crep de pato confitado para pasearse por Francia o el baba ganoush de berenjenas asadas y la burrata exquisita, pasando por los huevos de gallinas camperas, cuscús y carrillera.

Para las winelovers, Bodega Buezo: sita en Mahamud (Burgos), dentro de todas las actividades de enoturismo de esta bodega emblemática de la DO Arlanza, para el día de la matriarca, te sugerimos ir con toda la familia a pasar una jornada en sus impresionantes instalaciones y terruños, visitando los viñedos, realizando un curso de iniciación a la cata para probar sus monovarietales e incluso algunos vinazos directamente de la barrica, almorzando en su precioso restaurante con ventanales a las viñas, para, finalmente, relajaros viendo el atardecer.

Para las que gozan tapeando, ruta de txikiteo por Zumaia (Guipúzcoa): el geoparque de Zumaia es un paisaje mágico para pasear el día de la madre. Sobre todo, si acertáis con la marea baja en la playa de Itzurun, ya que observaréis las capas geológicas que formaron los movimientos de las placas tectónicas.

Luego ya, sin salir del municipio, disfrutad de unos pintxos deliciosos yendo de bar en bar, como se estila en Euskadi, desde el Txikitxa, pasando por la vinoteca Idoia, hasta la Amama Taberna.

En la zona sur peninsular

Para las más gastrolovers, Cañitas Maite: un restaurante sito en Casas-Ibáñez (Albacete), a 10 minutos del río Cabriel y muy próximos a Alcalá del Júcar, declarado como uno de los pueblos más bonitos de España. Sus chefs Javier Sanz y Juan Sahuquillo están dando ya muchísimo que hablar en el sector gastronómico y hacen unas tapas deliciosas.

Por ejemplo, el bombón de queso de Villamalea con trufa, el sándwich de foie o la mejor croqueta del mundo 2021, creación supercremosa. Y unos arroces ciegos perfectos, como el de chuleta madurada y tuétano. También podéis optar por sus menús degustación.

Para las mamis carnívoras, La Castillería, en una pedanía de Vejer de la Frontera (Cádiz) es un oasis donde la selección del maestro Juan Valdés de carnes nacionales es todo un mundo por explorar. Entre piezas de vacuno de ocho meses a 11 años, probad un castrato tierno e infiltrado de grasa, la raza retinta autóctona de La Janda, la rubia gallega bien entreverada y los lomos de ternera avileña, frisona o palurda; así como la simmental de Alemania.

Ahora bien, los entrantes no fallan: las verduras de su huerta, las sabrosas alcachofas con falsa de cordero, los puerros o el tomate de verdad, completan la fabulosa experiencia ideal para almorzar. 

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