Cómo limpiar y desinfectar bien tu lavadora por dentro con productos que ya tienes en casa

Hacer la colada es una de los quehaceres más comunes del hogar. Separar la ropa entre colores, elegir un programa y aplicar el jabón adecuado se ha vuelto una tarea común en el cuidado diario de la casa. Así, la lavadora es uno de los electrodomésticos más utilizados y por ello, uno de los más propensos a acumular suciedad.

A lo largo de la semana, seleccionar la ropa sucia e introducirla en el tambor para su lavado es algo habitual. Sin embargo, la suciedad de las prendas no desaparece, sino que en muchas ocasiones puede acumularse en algunas zonas de la lavadora, provocando la aparición de moho y malos olores.

Por ello, es necesario llevar a cabo un mantenimiento regular del electrodoméstico. De esta manera, no solo evitaremos posibles daños a los tejidos y acumulación de malos olores en las prendas, sino que también lograremos prolongar la vida útil del electrodoméstico.

Así, con unos simples pasos y sin mayores complicaciones, existe una manera para limpiar y desinfectar bien tu lavadora por dentro con productos que ya tienes en casa.

Prepara los materiales

Antes de comenzar la limpieza, es necesario preparar todos los materiales para evitar sufrir contratiempos. Así, será posible llevar a cabo una limpieza fluida que nos permita ahorrar tiempo y energía. Estos son los materiales necesarios para limpiar y desinfectar la lavadora:

  • Vinagre blanco de limpieza
  • Detergente líquido
  • Paño de microfibra
  • Cepillo de cerdas suaves
  • Guantes de limpieza
  • Lejía
  • Bicarbonato de sodio (opcional)

Limpia el tambor de la lavadora

Para comenzar a desinfectar la lavadora, primero debe de vaciarse todo el tambor. Para ello, cerciórate de que no quede ninguna prenda ni restos como papeles dentro del tambor. Es importante que no quede nada, ya que la combinación de productos podría dañar las prendas que en el cesto de la lavadora.

A continuación, añade una taza de vinagre blanco de limpieza al dispensador del detergente y cierra el cajetín. Tras ello, selecciona un ciclo de lavado medio o largo y a una alta temperatura –deben de ser 30 grados como mínimo–. El vinagre blanco es un potente limpiador natural, por lo que disolverá toda la suciedad presente en el tambor.

De esta manera, si tu lavadora tenía muchos malos olores, será posible notar mejoras al término del programa de lavado con vinagre blanco. Además, no hace falta poner otro programa de aclarado para retirar el sobrante, ya que este se diluye con el agua de la lavadora.

No obstante, si la lavadora sigue teniendo malos olores, es posible añadir media taza de bicarbonato de sodio al tambor nuevamente vacío de la lavadora y ejecutar otro programa de lavado con agua lo más caliente posible. Este compuesto eliminará todos los restos que el vinagre no logró retirar y contribuirá a desodorizar el tambor del electrodoméstico.

Limpia las gomas y juntas de la lavadora

Una de las zonas donde más suciedad y moho se acumula tras cada lavado son las juntas de goma de la lavadora. Por ello, limpiarlas es esencial para evitar que se desgasten con facilidad y para eliminar malos olores del electrodoméstico.

Ponte los guantes de limpieza y prepárate para la limpieza de las juntas. Primero, humedece un paño de microfibra con lejía y frótalo por todos los recovecos de la goma hasta eliminar la suciedad completamente. También es posible utilizar un cepillo con cerdas suaves para llegar a las zonas más complicadas.

A continuación, retira el sobrante de lejía con un trapo seco, asegurándote de retirar todos los excesos. Es importante que no quede ningún resto de este compuesto en las gomas del electrodoméstico. También es recomendable desenchufar la lavadora para llevar a cabo este proceso.

Limpia los compartimentos de detergente y suavizante

Una vez limpiadas las gomas de la lavadora, el siguiente paso será higienizar también los compartimentos de detergente y suavizante. Es importante revisarlos regularmente, ya que son un punto frecuente de acumulación de restos de detergente.

Para ello, retira los compartimentos si la lavadora lo permite y enjuágalos con agua caliente. Déjalo reposar durante unos minutos para que se aflojen todos los restos de detergente y suavizante incrustados en la pieza. Tras ello, utiliza el cepillo de cerdas suaves para frotar de manera superficial toda la zona.

Si la suciedad se mantiene adherida, combina el agua con vinagre blanco de limpieza a partes iguales y repite el proceso, dejándolo actuar siempre durante unos minutos antes de comenzar a frotar. Para finalizar, seca bien la pieza antes de volver a colocarla para evitar la formación de moho.

Limpia el filtro de la lavadora

Por último, tras la limpieza del resto de piezas de la lavadora habrá que revisar el filtro. Este suele estar en la parte inferior del electrodoméstico y en él se acumulan los restos de pelusas procedentes de las prendas durante el lavado.

Para comenzar a limpiar el filtro, coloca una toalla justo por debajo del compartimento, ya que es muy probable que pierda algo de agua al retirarlo de su compartimento. Una vez retirado, limpia el filtro con agua tibia y jabón para eliminar todos los restos de pelusas y residuos.

Además, utiliza el cepillo de cerdas suaves para limpiar la cavidad en la que va ubicado el filtro, ya que también puede haber suciedad acumulada en esa zona. Seca el filtro bien y colócalo de nuevo en su sitio.

Limpia la lavadora por fuera

Una vez estén limpios todos los componentes de la lavadora, es posible aprovechar la ocasión para limpiar el electrodoméstico superficialmente. Mezcla vinagre blanco de limpieza y agua a partes iguales y humedece un paño con la combinación de ingredientes.

La limpieza superficial puede parecer superflua, pero contribuye a la estética del hogar, además de a evitar que la suciedad o el detergente dañen el acabado del electrodoméstico, limitando su vida útil.