Jaime, socio y lector de eldiario.es nos escribe el siguiente texto en un correo electrónico: “estas fiestas he leído un reportaje en el que se asegura que muchos adolescentes norteamericanos prefieren que sus padres les regalen bitcoins antes que dólares e incluso que regalos físicos. También se cuenta que existen métodos para convertir los bitcoins directamente a moneda corriente y sacarlos de los cajeros ATM, así que me ha entrado la curiosidad por saber si manejarse con bitcoins es tan sencillo como se dice en el artículo. ¿Es tan fácil como parece comprar o vender bitcoins? Sobre todo quisiera saber si se puede hacer de una forma sencilla y completamente segura, ya que de ser así puede que me anime a comprar una mínima cantidad”.
Comprar y vender bitcoins es hoy en día mucho más sencillo que hace unos años: actualmente la compra de Bitcoin está al alcance de cualquier adulto con una cuenta corriente, un ordenador y una conexión a internet. Pero antes que nada debemos advertir, a Jaime y a cualquier otra persona que esté pensando en comprar criptomonedas, que se trata de valores que no están referenciados ni respaldados por ninguna institución oficial ni centralizada; no hay detrás de ellas ningún banco emisor ni ninguna organismo que las supervise ni las garantice.
Este hecho en si mismo tiene diversas ventajas para quien sea celoso de la intimidad de su dinero y de lo que haga con él, ya que operar con criptodivisas es lo mismo que hacerlo en la práctica con moneda física, donde ni Hacienda ni ninguna otra entidad tiene conocimiento de las compras y ventas que hacemos porque no deja rastro, son operaciones anónimas.
Por otro lado las criptomonedas son también muy interesantes de cara a un futuro donde no exista el dinero físico y probablemente tampoco las divisas corrientes tal como las conocemos, sino que su valor dependerá de una compleja red de equivalencias influenciadas por muchos factores. Además, presentan la ventaja de que no es necesaria una cuenta bancaria para almacenarlas, aunque por el momento sí para adquirirlas.
Ahora bien, debemos ser muy cautelosos con este tipo de monedas virtuales si nuestra intención es lucrativa y especulativa, ya que no se comportan como los clásicos valores de bolsa sino que tienen una elevadísima volatilidad, pudiendo variar su precio en un mismo día en cientos de euros e incluso miles en ocasiones. Es por ello que en unas horas podemos ver crecer nuestra inversión para en las siguientes observar cómo se volatiliza. Y estos mismos comportamientos se reproducen a medio y largo plazo.
Si lo que buscamos es comportarnos como brokers y carecemos de experiencia, este campo es el menos indicado, pues operar a corto plazo con las criptodivisas es muy arriesgado. Pero si, como dice Jaime, la cosa va de comprar una pequeña cantidad como prueba, la operación puede ser interesante para relacionarnos con un mundo que, según los expertos, marcará el futuro de los intercambios comerciales. A continuación explicamos cómo comprar bitcoins, o preferiblemente fracciones de esta moneda, de forma sencilla y segura.
Lo principal antes de comprar bitcoins es conseguir un monedero electrónico, es decir un programa que permitirá no solo almacenar la información de la criptomoneda y certificar que obra en nuestra propiedad, sino también emitir claves encriptadas que indican a los responsables de las transacciones dónde enviar el dinero. Estas claves cifradas, que emite el monedero electrónico, son la garantía de la seguridad del proceso, prácticamente del 100%.
Hay diversos programas de monedero electrónico, muchos de ellos específicos para cada tipo de moneda, pero uno de los más populares en el caso de bitcoin es ElectrumElectrum, ya que apenas pesa y tiene versiones para los distintos sistemas operativos. Si nos descargamos Electrum al ordenador, lo primero que hará el programa es pedirnos que configuremos una dirección de correo y una contraseña, que deberá ser de complejidad elevada.
Cuando hayamos elaborado dicha contraseña, la guardaremos escrita en una hoja de papel que guardaremos en un lugar seguro, sin dejar ningún tipo de rastro digital. El siguiente paso será crear un monedero donde recibir y almacenar, y desde donde enviar, los bitcoins. Para ello el programa emitirá lo que se conoce como una semilla, que es una serie de palabras clave en un orden concreto que tendremos que copiar en otro papel y guardar de nuevo de forma analógica
La semilla nos servirá en caso de que nuestro monedero se corrompa o se pierda; con ella podremos recuperar todos los datos y por lo tanto nuestros bitcoin. Sin ella, los datos se perderán para siempre y con ellos nuestro dinero. Se calcula que ya se han perdido de este modo más de cuatro millones de bitcoin. Así que es fundamental guardarla en sitio seguro. Adicionalmente, se recomienda no dejar el programa del monedero en el ordenador sino guardarlo en un pincho USB que podamos desconectar de la Red. Preferiblemente si además tiene su propia clave de activación, tanto mejor
Existen numerosas plataformas de transacciones en internet que podemos usar. Básicamente se dedican a poner en contacto gente que quiere vender bitcoins con gente que los quiere comprar. Su uso es sencillo, aunque exige que previamente nos demos de alta con correo y contraseña, además de algunos pocos datos más. Una vez dados de alta bastará con pedir a la plataforma la compra de una determinada cantidad, o fracción de bitcoins.
Esta nos pedirá una dirección que en realidad es una clave de alto cifrado. Para conseguirla deberemos activar nuestro monedero en el programa donde lo hemos creado e ir al apartado de “recibir”. Veremos que al indicar la cantidad de moneda digital deseada se crea una larga clave. La copiaremos en el portapapeles y la introduciremos en la plataforma de transacciones. Si queremos mayor seguridad, podemos usar alternativamente un sistema de códigos QR, para lo cual deberemos usar dos soportes distintos y la cámara del ordenador.
Podemos elegir realizar la compra mediante una transferencia bancaria, vía una tarjeta de crédito, e incluso algunos sistema permiten hacerlo en efectivo con determinados cifrados complejos. En los dos primeros casos, al introducir la dirección que nos da el monedero en la plataforma y pulsar “comprar la cantidad deseada”, el sistema nos enviará un correo privado a nuestra dirección especificada.
En él se nos ofrece una cuenta corriente de la plataforma a la cual hay que realizar la transferencia monetaria desde nuestra cuenta del banco, o bien se nos pedirán los datos de nuestra tarjeta, junto a la referencia que hay que especificar para que la plataforma pueda identificar la petición de compra.
Una vez esta recibe el dinero, opera la compra, aunque el envío de los bitcoins al monedero electrónico se puede demorar hasta 24 horas. La plataforma nos avisará de que le ha llegado el dinero y de que ha efectuado el cambio de moneda, que a continuación nos enviará. Es entonces cuando en el monedero deberemos guardar la petición de compra, pidiendo que se nos avise cuando llegue el dinero
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