El ordenador, el cargador del móvil, el portátil, las lámparas, los electrodomésticos, las pantallas, la tablet y un sinfín de objetos que tenemos en casa enganchados con cables a la red eléctrica ocupan mucho espacio en nuestro hogar. Además de ser antiestético, puede resultar peligroso para los niños. Las regletas, los enchufes y los cables enredados acumulan, además, el polvo con más facilidad.
Cuantos menos objetos se encuentren por nuestra casa, mejor: tanto en lo que respecta al orden, la limpieza y, por supuesto, a la estética. Ya lo dijo el famoso arquitecto Mies Van der Rohe, 'menos es más', una idea destinada a la arquitectura, pero que también se ha vuelto muy importante para las artes y el diseño.
Aquí te ofrecemos diez soluciones para que la maraña de cables que pueblan los muebles y el suelo de casa no se vea igual.
Esconder
Hay ocasiones en las que es imposible disimular cables y aparatos, como el router. En ese caso, lo mejor es tapar estos aparatos con elementos decorativos, como puede ser una escultura vistosa o una planta de interior. Las macetas grandes aportan, además, belleza y naturalidad a casa.
Otra opción para esconder los cables que se acumulan en las habitaciones son los estantes y las librerías. Incluso se pueden ocultar estos cordones con libros apilados en el suelo y funcionar como elementos decorativos. Hay quien incluso compra cajas con forma de libros para ocultar en ellas los cables.
La caja de Pandora
Para las mesas y escritorios, qué mejor salida que usar una caja bonita en la que introducir varios cables. Las hay de cartón, madera, plástico o madera de bambú y, al usarlas, las superficies en las que trabajamos en casa se ven muchos ordenadas y limpias. Las hay más pequeñas para la mesita de noche y más grandes para los escritorios.
Algunas de ellas tienen orificios en los laterales para que salgan y entren los cables, mientras que en otras se sitúan en una de las caras del rectángulo. Se trata de una opción muy sencilla para solucionar el problema de acumular cables sobre nuestro espacio de trabajo en el hogar y más en estos días en los que el teletrabajo forma parte de nuestra cotidianidad.
Tecnología
Otra de las solución pasa por adoptar la tecnología wireless o inalámbrica puesto que muchos aparatos que utilizamos en nuestra vida cotidiana en lugar de un cable pueden funcionar con bluetooth, como el teclado del ordenador, el wifi y teléfonos. Se trata de una solución perfecta para que la casa luzca lo más ordenada posible.
Salvacables adhesivos
Los salvacables adhesivos o canaletas son una de las mejores opciones para esconder y disimular los cables que recorren paredes o suelos. La mejor idea es seleccionar el mismo color que la pared o que puedan pintarse como las zonas que los rodean para integrarlas perfectamente en la decoración. Hay diseños que imitan a la madera natural. Sobre los rodapiés pasan inadvertidas.
Muebles con varias funciones
También hay muebles diseñados con sistemas de gestión de cables integrados, como escritorios con compartimentos ocultos o mesas de televisión con espacios destinados a los cables.
Las mesas, sobre todo, ofrecen muchas opciones a la hora de camuflar cables y regletas. También se pueden colocar unas bandejas, que pasen prácticamente desapercibidas si se colocan debajo del tablero.
Enchufes debajo del tablero
Una solución sencilla es situar los enchufes justo por debajo de la línea del tablero de la mesa y así los cables logran pasar más desapercibidos. Algunas mesas de estudio pueden llevar un orificio redondo en el tablero por el que se pueden pasar los cables, y que quedan cubiertas por una tapa de plástico especia.
En el caso de que tu mesa no contenga esta solución, puedes hacer tú mismo el agujero con una taladradora y una sierra de corona para madera. De esta forma, evitas tener los cables desparramados por la mesa.
Cesto
Cuando no estés utilizando los cables, otra opción para mantener la casa armónica es guardarlos en un cesto de mimbre o ratán que, por otra parte, aporta belleza y sensación de calidez al hogar al tratarse de un material natural.
Los cargadores y cables se encontrarán allí fácilmente localizados y no nos molestarán, como cuando están desperdigados por otros espacios de la casa.
Tubo
Haces un corte longitudinal a un tubo de plástico de un color neutral, reúnes dentro de él todos los cables que se encuentran detrás del televisor y el router y luego lo adhieres a la parte trasera del mueble. El mar de cables del salón o la sala de estar desaparece y una estética mucho más simple y sencilla se apodera de este espacio de convivencia en la casa.
Destacar
Si no puedes con tu enemigo, únete a él. En el caso de que no haya manera de deshacerse de un cable porque se trata de un cable visto, la solución es hacer que destaque y, de este forma, que se convierta en un elemento decorativo más.
Hay que hacerse con un cable llamativo que no responda a la convención: por ejemplo, de color rojo. Otra opción es colocarle bombillas, figuritas o borlas de colores a lo largo, o crear bucles o formas reconocibles con el propio cable en la pared de casa.
Armarios empotrados
Un armario empotrado puede ser el mejor espacio para reunir los dispositivos electrónicos del salón, la habitación de juegos o el estudio. Hecho a medida. Ahí se quedan encerrados, sin necesidad de verlos o que molesten al paso. También se puede dejar un espacio dentro del mueble empotrado para integrar el televisor.