Después de una comida copiosa, si has comido de forma apresurada o si tienes tendencias a los gases es normal que te cueste más hacer la digestión y sientas molestias. De cualquier modo, durante el proceso de digestión es normal la presencia de gases intestinales en el sistema digestivo y la eliminación del exceso mediante flatulencias. Sin embargo, si el gas no se elimina y queda retenido, puede llegar a dar la sensación de pesadez de estómago o, incluso, producirse calambres o dolor agudo.
La solución para eliminar esta pesadez de estómago y combatir los gases, normalmente, requiere cambiar algunos hábitos, como comer despacio e incluir una infusión de determinadas plantas tras las comidas.
Aunque estas hierbas con agua caliente no son milagrosas, algunas de ellas pueden reducir los dolores de indigestiones y hacer desaparecer la sensación de pesadez. También pueden ayudar a luchar contra las infecciones de orina o la retención de líquidos.
Además, gran parte del poder de las infusiones digestivas reside en el agua caliente, pues ayuda a eliminar toxinas que no se digieren, a combatir el estreñimiento, a mejorar los movimientos intestinales, a controlar la presión sanguínea y a combatir el estrés y la ansiedad.
La acción antiinflamatoria de algunas de estas infusiones puede ayudar en gran medida a las personas que sufren de síndrome del intestino irritable (SII) o dispepsia funcional. Además, las infusiones son una excelente manera de mantenerse hidratado, lo que también es crucial para un sistema digestivo saludable.
Aquí te presentamos seis infusiones que te pueden ayudar con los problemas digestivos: la manzanilla, la infusión de hinojo, el té verde, la infusión de jengibre, el cardamomo y la menta.
Manzanilla
La planta de la Chamaemelum nobile ayuda a calmar el conocido reflujo gástrico que tanto malestar provoca. Su sabor es ligeramente amargo y se caracteriza principalmente por ser desinflamante, relajante y ligeramente sedante. Para tomarla, se puede preparar en infusión, con las flores secas, o combinada con otras plantas, como el anís.
Infusión de hinojo
El hinojo es una planta originaria del mediterráneo, muy consumida en Italia. Actualmente se encuentra distribuido prácticamente por todo el mundo. Se consume tanto el bulbo como las semillas, siendo las semillas las que se utilizan para preparar la infusión digestiva.
La infusión de hinojo ayuda a mejorar la digestión y favorecer al buen funcionamiento intestinal. Eso es gracias a sus propiedades diuréticas y antiespasmódicas que alivian el tubo digestivo y disminuyen la generación de flatulencias.
También funciona como tónico estomacal, gracias a su aceite etéreo (anetol) que ayuda a combatir y aliviar la sensación que provocan afecciones estomacales como los cólicos, diarrea o parásitos en el intestino.
Por otro lado, también ayuda a las mujeres que sufren dolores de la regla y también puede ayudar a aliviar los síntomas de la menopausia.
Té verde
El té verde también facilita las digestiones pesadas con dolor de barriga, normalmente provocado por estreñimiento. Esta bebida actúa como relajante muscular que calma espasmos de dolor e hinchazón, y es también útil para combatir gases que puedan tener el origen en la menstruación.
Aparte, el té verde es también una infusión diurética; es decir, es ideal para combatir la retención de líquidos y la pesadez que alguien pueda sentir de forma crónica.
Una de las variables más populares es el té verde que cuenta con un toque de menta o hierbabuena.
Infusión de jengibre
El jengibre tiene su origen en Asia y su raíz se ha utilizado durante siglos por sus propiedades medicinales. El té de jengibre es una de las mejores infusiones contra los gases que puedes tomar ya que además su consumo tiene muchas propiedades para la salud. Entre ellas, la estimulación del páncreas, lo que permite mejorar la producción de enzimas; estas favorecen a la digestión de los alimentos que se consumen. A mayor producción, menor es la probabilidad de indigestión y, por ende, la de gases y flatulencias.
Además, también tiene beneficios antibacterianos a largo plazo en la salud de las personas si se consume con regularidad, pues ayuda a aumentar las bacterias buenas de la flora intestinal y a combatir las malas que acaban provocando infecciones, como la H. Pylori.
Por otro lado, también refuerza el sistema inmunológico y evita resfriados, gripes, tos y dolor de garganta. Tiene propiedades antioxidantes, expectorantes, antiinflamatorias y antimicrobianas; además de gran contenido de hierro y vitamina. Al tiempo que mejora la salud cardiovascular al favorece la circulación, disminuye los calambres y ayuda a controlar el colesterol.
Cardamomo
El cardamomo contiene un aceite esencial muy activo, con una fuerte acción estimulante de la digestión, así como carminativa. Las semillas de esta hierba medicinal poseen un aceite esencial que estimula la digestión y facilita la evacuación de los gases. Esta infusión se puede combinar con anís estrellado y menta.
Otras propiedades del cardamomo son que estimula el apetito, combate el mal aliento y protege los dientes.
El cardamomo es rico en fibras, por lo que favorece el tránsito intestinal, regulando las funciones del sistema digestivo y previniendo ciertos trastornos como el estreñimiento y la inflamación intestinal. También es rico en compuestos que pueden combatir la inflamación, que puede causar ciertas enfermedades crónicas.
Menta
La menta, con un olor y sabor refrescante, es una especie herbácea originaria de Europa, pero que se puede encontrar en casi todo el mundo.
La infusión o té de menta es otra de las opciones de infusión digestiva que puedes tomar para el dolor de barriga. También actúa como digestivo justo después de comer porque ayuda a sintetizar mucho mejor las grasas consumidas. Si tienes gases, también sentirás alivio un tiempo después de beber una infusión o té de menta.