En las etiquetas de botes de mayonesas, cremas, hummus, diferentes snacks y hasta en productos de repostería que se venden en supermercados han aparecido unos parches que hace referencia a su composición nutricional, donde se explica que el aceite de girasol ha sido sustituido.
Los sustitutos suelen ser “oleína de palma”; “Nabina sustituye”, “aceite de soja”... Donde tradicionalmente había aceite de girasol, que se usa como suavizante, espesante, estabilizante o emulsionante, ahora hay navina (aceite de colza), aceite de soja o de palma.
La culpa es de la guerra
Son tan sanos y seguros como el aceite de girasol, pero ¿por qué este cambio que parece más un apaño de última hora? Pues en realidad porque lo es: se trata de una contingencia forzada por la guerra de Ucrania.
Ucrania es conocida como “el granero de Europa” por sus inacabables y fértiles llanuras plagadas de cultivos, donde mandan también los girasoles.
La guerra ha provocado que la oferta de este aceite, al no plantarse ni recogerse las cosechas, haya caído dramáticamente y por tanto su precio se haya disparado. En consecuencia, tanto por lo difícil que es encontrar aceite de girasol para la producción industrial alimentaria como por su elevado precio, los fabricantes han decidido sustituirlo en sus procesados por otros aditivos que hagan su función.
¿Por qué no cambian la etiqueta entera?
Son aceites válidos para tal función, pero cualquier cambio en la composición debe, por ley, reflejarse en el etiquetado. Como se trata de una contingencia que no va a durar siempre, por el momento han puesto estas pegatinas indicando la sustitución.
“Es una autorización temporal por la falta de suministro debido a la guerra de Ucrania. Deben notificarlo de forma clara y visual”, explica la tecnóloga y farmacéutica Gemma del Caño.
De hecho, una nota informativa del Gobierno de marzo de este año explicaba la necesidad de estas medidas de etiquetado extraordinario y las autorizaba, aunque también con ciertas condiciones:
- Se debe informar de este cambio.
- La información no deberá inducir a error a las personas consumidoras.
- En caso de tener que utilizar envases de productos anteriores con declaraciones que sugieran que se trata de un producto de mayor calidad o con valor añadido, el operador debe añadir una etiqueta adhesiva, chorro de tinta o sistema equivalente que anule esta declaración.
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