¿Reciclas bien? Estos son algunos de los residuos que requieren un reciclaje específico

Según el informe anual de Ecoembes de 2021, un 29,8% de los residuos que aparecieron dicho año en los contenedores amarillos no deberían haberse depositado ahí, principalmente debido a algunos errores que cometemos a la hora de reciclar. “Cada residuo tiene nombre y apellidos”, recalcan desde la Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje (FER). Así lo explica su presidente, Ion Olaeta, a este medio: “Cada flujo de residuos tiene sus especificidades a la hora de su tratamiento para el reciclado”. Sin embargo, todos ellos tienen algo en común: es fundamental una óptima separación de los residuos en origen para que la calidad del material reciclado sea lo más elevada posible y así cumplir con los estándares de las distintas industrias. 

En el caso de no hacerlo adecuadamente nos arriesgamos a que el medioambiente y, por tanto también nuestra salud, sufra las consecuencias: “Al desaprovechar los materiales que podrían reutilizarse, aumentamos la fabricación de nuevos productos, lo que genera contaminación ambiental y contribuye al calentamiento global”, dice Olaeta.

Además, la enorme exposición a las partículas de plástico supone efectos nocivos para nuestra salud, como indica el informe Plastic & Health del Center for International Environmental Law, en el que se relaciona dicha exposición con un mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y autoinmunes, entre otras.

Existen ciertos objetos, materiales o sustancias que requieren un reciclaje específico y que nos despiertan las dudas al no saber con exactitud dónde debemos depositarlos y cuáles son las consecuencias si no lo hacemos correctamente. Aquí resolvemos estas dudas respecto a varios de ellos.

Pilas 

“Si no las reciclamos adecuadamente pueden terminar en un vertedero, con el paso del tiempo perderán su 'carcasa' protectora (normalmente de plástico) y los metales que las componen se filtrarán al suelo, contaminarán las aguas subterráneas y se introducirán en la cadena alimentaria del ser humano”, explica Vanessa Collado, coordinadora de la Fundación para el Desarrollo Sostenible Canarias Recicla. 

Por eso, las pilas han de depositarse en los puntos limpios o en los contenedores específicos para ellas, que suelen estar ubicados en los establecimientos que las comercializan o en algunos municipios en las vías públicas. Por ejemplo, en el caso de Madrid existe un mapa de la ciudad que refleja los contenedores específicos para depositarlas.

Como explica Olaeta, “las pilas y baterías se dividen en diferentes tipos, los cuales determinarán el procedimiento de reciclaje en función de su composición y peligrosidad”, proceso regulado por el Reglamento (UE) 2023/1542 relativo a las pilas y baterías y sus residuos.

Aceite usado

“En España se estima que dos tercios del aceite usado acaban en el mar, lo que supone unos 120.000.000 de litros”, explica el presidente de FER. La vía más común por la que llega hasta ahí es a través de los fregaderos de los hogares, ya que al tirarlo se adhiere a las paredes de las tuberías y llega hasta él junto con otros alimentos y suciedad.

Entonces contamina las aguas creando una película que impide el intercambio de oxígeno y causa daños a la fauna y flora. Además, “el aceite que no se gestiona correctamente genera contaminación de los acuíferos, y si se quema emite sustancias muy tóxicas a la atmósfera”, explica Vanessa.

¿Su destino adecuado? El punto limpio o los contenedores específicos situados en la vía pública, en mercados o en instalaciones municipales que existen en algunas comunidades españolas. También puedes poner en práctica ideas muy originales para reutilizar tu aceite de cocina. 

Como explica Olaeta, “también existen empresas especializadas encargadas de retirarlo y darle una segunda vida, principalmente en forma de biodiésel o para crear jabón, tanto para la piel como para la ropa”.

Cuchillas de afeitar

Este tipo de residuos cuentan con dos materiales principales: el acero inoxidable de la cuchilla y el plástico del mango. “A pesar de su composición, esta herramienta no es un envase, por lo que nunca debemos depositarlas en el contenedor amarillo”, explica Olaeta.

Por eso, “lo idóneo es llevarlas a un punto limpio, ya que no deshacerse de ellas de forma adecuada implica, además de riesgos para el medioambiente, riesgos para la salud de terceras personas, ya que están catalogadas como residuos domésticos peligrosos”, explica Collado.

Bombillas

Las bombillas, al igual que las maquinillas de afeitar eléctricas, están consideradas aparatos eléctricos o electrónicos, por lo que deben depositarse en el punto limpio.

Aunque, en ocasiones, existen otras opciones, como las que recopila en un mapa la asociación Ambilamp, enfocada en la recogida y tratamiento de este tipo de residuos. Se trata de puntos de recogida concretos que se encuentran, por regla general, en algunos distribuidores eléctricos, comercios como ferreterías o tiendas de iluminación e incluso en supermercados. 

La importancia de reciclarlas adecuadamente se debe a que contienen algunas sustancias altamente contaminantes y peligrosas para la salud: “Hablamos del mercurio y el polvo fluorescente, que se separan siguiendo un proceso de destilación, para posteriormente almacenarlas de forma segura y continuar con el proceso de reciclado de los demás materiales que la componen”, explica la coordinadora de Canarias Recicla.

Otros objetos

Además de los mencionados, existen otros objetos que deben depositarse en puntos limpios, como “pinturas y acumuladores, cápsulas de café, cartuchos de tinta y toners, cables, neumáticos, ropa y calzado, aerosoles y sprays, cosméticos, muebles y espejos, etc.

En el caso de los desechos de aparatos eléctricos o electrónicos (también conocidos como RAEE), es importante recalcar que “de forma alternativa a los puntos limpios, hay toda una red capilar de empresas de gestión de este tipo de residuos que están autorizadas para hacerse cargo de ellos y que pueden resultar beneficiosas para el ciudadano, por cercanía o por comodidad”, anota Ion Olaeta.