Si no ves este contenido puede deberse a la carga en tu dispositivo móvil. Haz clic aquí para recargar la página.
Tanto si has cambiado el suelo de la cocina como si te has propuesto azulejar de nuevo el cuarto de baño, hay muchas posibilidades de que aún tengas un montón de baldosas sobrantes dando vueltas por casa. Pues bien: estos proyectos sencillos y bonitos te darán ideas para aprovecharlas, y darles buen uso.
Puedes hacer algo sencillo, como construirte unos posavasos nuevos, y más que bonitos. O transformar una bandeja sosa. Pero si te vienes arriba, los azulejos sobrantes sirven también para proyectos más ambiciosos, como decorar mesas baratas y hasta para darle una nueva vida a tu librería tristona.
1. Usa las baldosas sobrantes como posavasos
Si tienes un puñado de baldosas con un patrón o dibujo bonito, como unas baldosas hidráulicas, puedes aprovecharlas para hacerte unos posavasos muy bonitos. Además, resultan especialmente sencillos de fabricar.
Solo necesitas tu baldosa y un trozo o una lámina de corcho, para pegarlo a la parte posterior del azulejo (el lado rugoso), y poder utilizar tu posavasos sin arañar la mesa.
Primero: hay que cortar (y un cúter o una cuchilla te hará muy sencilla esta tarea) la lámina de corcho con el tamaño y la forma de tu baldosa. Después, pega el corcho a tu baldosa con un poco de cola: si escoges un rollo de corcho adhesivo puedes saltarte este paso. ¡Ya tienes listos tus posavasos!
2. Hazte una bonita bandeja con las baldosas
Esos azulejos que guardas pueden transformar una bandeja barata, de unos cinco euros, en algo bastante más estiloso y colorido. Basta con ajustar las baldosas a la base de tu bandeja, y pegarlas con cola.
Si quieres un resultado más fino, puedes utilizar un poco de masilla de azulejo para las juntas. Y también puedes pintar antes la bandeja del color que escojas, para que el acabado te resulte más homogéneo.
3. ¿Tienes cinco azulejos? Fabrícate una maceta preciosa
Este proyecto es tan sencillo como parece: solo necesitas cinco baldosas del mismo tamaño (el patrón o dibujo puede cambiar) para hacerte un macetero bonito; cuatro conformarán los lados de la maceta y la quinta te servirá de base.
Se trata de pegar los bordes de las baldosas entre sí con cola adhesiva, uno a uno, de forma que creen un prisma cuadrado, es decir, una caja. Para que peguen mejor, puedes ayudarte de un poco de cinta aislante.
Así mantendrás las baldosas en su sitio mientras que la cola termina de secar. Ahora bien: no olvides hacer un agujero con un taladro en la baldosa que coloques en la base. Este orificio te servirá de drenaje, y permitirá que el agua de riego sobrante salga, y no ahogue la planta (de hecho, las plantas se nos mueren más por exceso de agua que por defecto). [Y aquí te contamos otras ideas para fabricarte maceteros bonitos con objetos que ya tienes en casa.]
4. Renueva una mesa fea con baldosas
Si tu proyecto de reforma en casa te da dejado con un paquete completo de baldosas sin utilizar, este proyecto puede interesarte de forma especial. El motivo es que puedes renovar una mesa fea o vieja con unas baldosas que tengan un patrón estiloso y colorido. Y hacerlo, además, por muy poco dinero adicional.
Una mesa con el borde elevado te hará la tarea aún más sencilla, ya que las baldosas se ajustarán a la perfección a la tabla de la mesa, y obtendrás una superficie igualada. Pero si no es el caso, el resultado puede quedarte igual de bonito, o siempre puedes rematar los bordes con alguna baldosa más pequeña.
Por lo demás, necesitas cola de azulejos y algo de masilla para las juntas. Eso, y un poco de paciencia: azulejar una mesa con una baldosa que tenga un patrón se parece mucho a realizar un puzle; pero el resultado casi seguro que merecerá la pena.
5. Dale un nuevo aspecto a una estantería o librería
Además de pintar y cambiar de color una estantería de la que ya te has aburrido, ¿has pensado en el efecto que puede tener cubrir el fondo de la librería con esas baldosas tan bonitas que guardas? Es más: el patrón de los azulejos dará un aspecto nuevo a tu salón.
6. Decora un jarrón con baldosas adhesivas de la ducha
Cuando te ha sobrado una malla de azulejo de tipo gresite o pequeñas baldosas decorativas (normalmente, se utilizan en las reformas del cuarto de baño), puedes aprovechar este material para decorar un jarrón soso que tengas en casa; e incluso para darle un nuevo aspecto a una maceta barata. [Aquí tienes más ideas para transformar tus macetas de terracota.]
Si no te quieres perder ninguno de nuestros artículos, suscríbete a nuestros boletines