Los artistas recaban el apoyo del mundo de la cultura al pueblo palestino
“Un alto al fuego inmediato”. Esa es una de las principales exigencias que se piden en el Manifiesto de artistas españoles contra la masacre de Gaza. Ha sido presentado este martes en la sede de la Embajada Palestina en Madrid junto al embajador Husni Abdel Wahed. El documento, impulsado por la Plataforma de Mujeres Artistas contra la Violencia de Género y la Asociación Hispano Palestina de Jerusalén está dirigido, sobre todo, al Gobierno de España y apela al artículo 1 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos: “Todos los seres humanos nacen libres”, así como al Derecho Internacional Humanitario por la detención y agresión de equipos médicos y al Protocolo I del Convenio de Ginebra por la inexistencia del ejército de Palestina.
En el manifiesto, los miembros de la cultura que lo firman, se exige una apertura urgente de los corredores humanitarios y se denuncian los asesinatos que se cometen cada día. “Este pueblo está siendo masacrado”, ha expresado el embajador palestino en el acto y ha criticado la postura de algunos países de occidente porque “miden el conflicto en diferentes varas” y condenan al pueblo palestino a ser “sometido a la ocupación”. Entre los firmantes se encuentran los cantantes Rozalén, Coque Malla o Ramoncín, el escritor Luis Landero, el poeta y compositor de descendencia palestina Marwán, Ismael Serrano, las actrices Emma Suárez, Itziar Castro y Marisa Paredes o el director y actor Juan Diego Botto entre más de 350 artistas.
Este manifiesto se suma a una carta a las instituciones culturales españolas, firmada por más de 1.600 personas del mundo de las artes, entre las que se encuentran Teresa Lanceta, Rogelio López Cuenca, Dora García, Paul B. Preciado, Yayo Herrero, Marina Garcés, así como Sandra Gamarra y Agustín Pérez Rubio, responsables del pabellón español en la próxima Bienal de Venecia. “Rechazamos la violencia contra toda población civil y pedimos el fin de la ocupación y el apartheid. Nos solidarizamos con el pueblo palestino y exigimos a nuestras instituciones culturales que se posicionen con nosotrxs de forma clara y pongan sus recursos a disposición de una firme petición de alto el fuego inmediato en Gaza, la entrada de ayuda humanitaria y boicot, desinversiones y sanciones (BDS) contra Israel”, dice el escrito.
Acto en la Embajada palestina
“Quiero pedir que veamos a Europa como el continente que ha emanado luz”, expresó, por su parte, Wahed durante el acto. Dirigiéndose a los medios públicamente clamó: “¿Hace falta otro genocidio como el del Holocausto? No hace falta otro genocidio”. Apeló también a la creencia en la humanidad, la justicia y la libertad. En la rueda de prensa, donde el manifiesto fue leído por primera vez en voz alta por algunos de los firmantes, Wahed insistió: “No nos dejen solos”. “No hagan de esto un conflicto religioso. Una confrontación entre oriente y occidente”, añadió. También aseguró que la solución era un asunto “meramente político”. La guerra entre Israel y Hamás según las últimas cifras, cuenta con casi diez mil fallecidos. Entre ellos, alrededor de cuatro mil niños.
Ana Fernández, actriz, ganadora de un Goya por su papel en Solas, y firmante de descendencia palestina, indica a este medio que la importancia de la cultura es “absolutamente básica”. “Matando la cultura se puede manipular mejor”, advierte. Considera que un “pueblo culto” que conoce la historia y el origen del otro es “muy difícil manipularlo”.
La cantante y activista Cristina del Valle, presidenta de la Plataforma de Mujeres Artistas contra la Violencia de Género, defiende que el manifiesto nace de la cercanía con la problemática: “Muchas de nosotras hemos vivido esto de primera mano yendo a los lugares del conflicto”. Añade además que el manifiesto se empezó a coordinar cuando estalló el ataque de Israel hacia Gaza. Para la presidenta resulta “incomprensible” el hecho de que no haya una reacción internacional por parte de las instituciones. Del Valle explica a elDiario.es que en la plataforma han sido “testigos de los territorios ocupados” por lo que una de sus peticiones es “presionar para que se reconozca a Palestina como un Estado”.
La cultura como puente
“Creemos que la cultura es el mejor puente y para nosotros es una lucha tratar de preservar nuestros valores culturales identitarios”, admite el embajador Husni Abdel Wahed. Asegura que la identidad nacional de Palestina está “siendo usurpada por la ocupación” y que “quieren borrarla”. “La cultura es un espacio de la lucha nacional de nuestro pueblo. Algo que valoramos y un elemento fundamental”, expresa.
Desde la Asociación Hispano Palestina de Jerusalén continúan esa postura y defienden que “la cultura en todos los pueblos lo que hace es construir puentes”. Aisa Alzueys, uno de los miembros de la asociación y partícipe en la rueda de prensa, considera que la cultura “permite conocer al otro fácilmente” y es un “método de unión” y “lenguaje” capaz de acercar al prójimo sin “necesidad de hablar la misma lengua”. La Asociación Hispano Palestina puntualiza que el manifiesto se apoya en la cultura porque el mundo cultural “construye puentes” y aquellos que pertenecen a la anticultura “construyen muros”, y recuerdan que lo que hace la cultura es “destruir esos muros”. “La sensibilidad del mundo de la cultura no se identifica con una política u otra, sino con la humanidad que es lo que nos hace personas”, cuenta Aisa Alzueys.
Por su parte, la presidenta de la Plataforma de mujeres artistas, Cristina del Valle expresa que “las artistas” no se van “a callar”. Hace hincapié en la lucha de las mujeres artistas palestinas que “están en la lucha política y social contra la violencia de género”. La rueda de prensa terminó con una invitación por parte del embajador palestino a “ver el arte como remedio” e instó a “crear un grupo de amigos de la cultura hispano-palestina”, ya que considera que la cultura es “el mejor entendimiento entre los pueblos”.
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