There is the sunLef Spincemaille (BE)
There is the sunSint-Maartensdal, el mayor complejo residencial de Bélgica, se construyó en los 60 en la localidad de Leuven con la intención de crear una serie de apartamentos idénticos para una comunidad de ambiciones creativas. Lamentablemente, no todos los hijos del idealista arquitecto Renaat Braem salieron iguales a los ojos de Dios: las que están orientadas al norte no recibe ninguna luz natural. Para redistribuir el riego de vitamina D, el astuto Lef Spincemaille ha instalado unos espejos motorizados que reflejan la luz y la introducen en las casas.
Naturalmente, hay muchas más casas que espejos. Es por eso que los vecinos tienen que reservar las horas de luz en este simpático formulario online. La pieza tiene algo de experimento en la gestión de un recurso común muy valioso y para ellos muy limitado, sin perder un exquisito valor simbólico.
CaptivesQuayola (IT)
Partiendo de una serie de esculturas de Miguel Angel llamada Prigioni (cautivos) y su formato inacabado, el artista italiano afincado en Londres Davide Quayola explora cómo las nuevas técnicas de fabricación digital pueden crear una forma de “escultura digital” que reconozca cómo ven los ordenadores la realidad en tres dimensiones: con polígonos. La otra estrella es el robot industrial controlado por ordenador que realiza las esculturas en progresión circular y descendiente con resultados exquisitos. Es muy formalista pero tiene mucha miga.
Loophole for AllPaolo Cirio (IT)
Lo mejor que ha hecho el fantástico Paolo Cirio hasta ahora, este arriesgado y complejo proyecto se ha llevado el Golden Nica en la categoría de Arte Interactivo de este año, posiblemente el más codiciado del certamen. Loophole consitió en una acción que le permitió revelar los nombres de todas las compañías con sede fiscal en las islas Cayman y vender certiificados falsos de propiedad en su web que permitirían en teoría facturar a través de ellas a quien los comprase.
Disarming CorruptorMatthew Plummer-Fernandez (UK)
La paradoja de Teseo es un experimento mental que se pregunta cuánto deben cambiar las partes que componen un objeto antes de que se convierta en uno nuevo o distinto. Este interesante proyecto de Matthew Plummer-Fernandez remezcla a Teseo con tácticas de criptografía para trampear los problemas de la propiedad intelectual en el medio de la impresión 3D.
La pieza es un software que permite alterar una forma física registrada comercialmente -alterando de manera reversible el archivo STL que guarda la información pertinente a la forma espacial del objeto- y deformarla hasta el punto exacto en el que deja de ser reconocible y, por tanto, sujeta a copyright. Una vez convertida en un objeto distinto, se distribuye legalmente junto a un código de cifrado que la restituirá a su forma original. Una trampa inteligentísima que su inteligente autor vende como un modelo criptográfico para evitar el espionaje industrial. Chico listo.
TransfigurationsAgi Haines (GB)
El cuerpo humano consiste en elementos viables que pueden ser fácilmente manipulados y rediseñados. ¿Qué nos impide entonces aumentar sus capacidades para mejorar nuestra capacidad de supervivencia? La obra más inquietante del festival lleva este mensaje a su lógico extremo con cinco bebés animatrónicos “aumentados” con mutaciones inducidas de manera quirúrgica. A medio camino entre la eugenesia y la Patrulla X, Transfigurations publicita las ventajas competitivas de estas alteraciones en un entorno cada vez más hostil, desde la capacidad de absorber más cafeina hasta disipar más calor a traves de la cabeza, en casos de clima extremo inducido por el cambio climático. Casi más desasosegante que los bebes son los nombres de las intervenciones: Epidermal Myostomy, Extension Osteogenesis, Bibuccalplasty. Despierta, David Cronenberg.
Balance From WithinJacob Tonski (US)
Un sofa de 170 años se balanceaba sobre una pata indefinidamente. La pieza, que ganó uno de los premios de consolación de este año, es una escultura cinética de nuestro tiempo que incide en la dimensión más mágica de la tecnología (viene a la mente la tercera y muy cacareada Ley de Clarke). Un prodigio de actuadores y motores escondido en un artefacto del siglo XIX.
Skelotonics
SkelotonicsQue levante la mano quien no le gustan los robots. ¿Y si además podemos meternos dentro? La estrella más rutilantes de esta semana en Linz es un exoesqueleto que los visitantes se pueden calzar como si fuera un traje. Para los aficionados pudientes que no hayan podido ir a Austria, estos fardones exoesqueletos para toda la familia se encargan a medida en esta santa casa japonesa. Videos impagables. El acabose.