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Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

El cierre de la Puerta Santa pone el broche final al Año de la Misericordia

EFE

Santiago de Compostela —

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El cierre de la Puerta Santa de la Catedral de Santiago ha puesto hoy el broche final a los actos de celebración del Año de la Misericordia, justo una semana antes de que el Papa Francisco repita el mismo gesto en la Puerta Santa de la basílica de San Pedro en el Vaticano.

Tras una procesión litúrgica desde la Puerta de Platerías y a través de la plaza de la Quintana, los sacerdotes que participaron en el acto religioso accedieron a la catedral de Santiago, que preside la Plaza del Obradoiro, por la Puerta de la Misericordia, siendo el Arzobispo, Julián Barrio, el último en atravesarla y el encargado de cerrarla.

Desde fuera del templo eran numerosos los turistas que inmortalizaban un momento tan poco usual como el cierre de la Puerta en un año declarado no jubilar.

Una vez en el interior de la Catedral, el Arzobispo ha presidido en el Altar Mayor la solemne celebración eucarística de Acción de Gracias, que finalizó con el canto mariano del Magnificat y el funcionamiento del Botafumeiro.

De este modo el arzobispo compostelano, Julián Barrio, ha cerrado la Puerta once meses después de que de manera extraordinaria, para celebrar el Jubileo de la Misericordia convocado por el Papa Francisco, se abriese el pasado diciembre.

Ahora, la Puerta Santa del templo compostelano no se volverá a abrir hasta la celebración del próximo año Xacobeo, que corresponde año 2021.

Cerrada la Puerta de la Misericordia, la procesión se dirigió al altar, donde los acólitos entregaron al arzobispo la bandeja con la llave de la Puerta de la Misericordia.

Un aspecto diferencial respecto al cierre que tiene lugar en Año Santo, ya que una de las peculiaridades del evento de la apertura de este año es que la Puerta Santa se abrió con una llave de gran tamaño y no fue golpeada tres veces con un martillo de plata como marca la tradición en el Año Santo.

“La Puerta de la Misericordia como símbolo se ha cerrado pero queda siempre abierta la Puerta que es Cristo que nos llama a vivir en santidad y justicia todos los días de nuestra vida”, ha señalado Barrio en la Eucaristía solemne con la que se clausuró en la Diócesis el Año Jubilar Extraordinario de la Misericordia, y que abarrotó el templo compostelano.

A la celebración de la Eucaristía asistieron centenares de personas de diferentes nacionalidades y diversas edades y también participaron el conselleiro de Educación y Cultura, Román Rodríguez, la Valedora do Pobo, Milagros Otero o el portavoz del PP en el Ayuntamiento de la capital gallega, Agustín Hernández.

En su intervención el arzobispo ha incidido en las “muchas” personas que han pasado por la Puerta de la Misericordia, con el fin de vivir “la experiencia de su misericordia”, en un año en que el Camino de Santiago ha batido su propio récord de peregrinos alcanzado en el último Año Santo, al superar los 272.412 llegados entonces y a falta de más de un mes y medio para concluir el año.

Asimismo, en su discurso, realizado en castellano y en gallego, el arzobispo ha hecho hincapié en que “el mensaje cristiano no aparta a los hombres de la edificación del mundo ni los lleva a despreocuparse del bien ajeno”.

Con este acto concluye en la capital gallega el Jubileo de la Misericordia que comenzó el 8 de diciembre del pasado año y que en Compostela se inauguró el 13 de diciembre con la apertura de la Puerta Santa, que había permanecido clausurada desde el Año Santo Compostelano 2010, y que no se volverá a abrir hasta el 31 de diciembre de 2020, para celebrar el Xacobeo 2021.