Mientras Juan Antonio Bayona celebraba que La sociedad de la nieve hubiera sido elegida para representar a España en los Oscar a mediados de septiembre, Francia tomó una decisión inesperada: prescindir de Anatomía de una caída. El drama judicial que convirtió a su directora, Justine Triet, en la tercera mujer en ganar la Palma de Oro de Cannes. Su victoria en el prestigioso festival invitó a dar por hecho que sería la elegida para competir por su país en la categoría de Mejor película internacional. Pero no. En su lugar se decantaron por el filme culinario A fuego lento, protagonizado por Juliette Binoche.
Su selección chocó no tanto por la calidad de este correcto filme que narra una historia de amor entre fogones ambientada en 1885, sino por anteponerla a un largometraje que, alcanzado otoño, ya contaba con un respaldo de crítica y público llamado a tener todo a su favor en la carrera por las codiciadas estatuillas. Y no solo por sus opciones en la citada categoría. Su protagonista, la alemana Sandra Hüller –que también lidera La zona de interés, candidata por Reino Unido–, partía como favorita para colarse en la lucha por el Oscar a Mejor actriz protagonista.
En España contamos con un precedente parecido, cuando se eligió Los lunes al sol de Fernando León de Aranoa para combatir en esta categoría en 2002. No pasó el corte final, pero la Academia de Hollywood sí nominó por partida doble a Pedro Almodóvar por Hable con ella, concediéndole la estatuilla a Mejor guion original.
“Estamos muy decepcionados, no lo voy a esconder”, reconoció a este periódico en el Festival de San Sebastián Justine Triet días después de conocerse la noticia. “La película ha gustado a muchísima gente en Estados Unidos”, reivindicó sobre el recibimiento que, claramente, podría haber ayudado en su camino para triunfar en los galardones.
Pero ha dado igual. A la Academia de Hollywood no le ha importado el ninguneo de Francia a la hora de tener en cuenta el largometraje. El drama judicial ha sumado hasta cinco nominaciones, y en categorías importantes: Mejor película, Mejor dirección, Mejor actriz protagonista para Hüller, Mejor guion original para la propia Triet y Mejor montaje para Laurent Sénéchal. De hecho, de los dos trabajos por los que podría haber sido candidata a la estatuilla su intérprete principal–Anatomía de una caída y La zona de interés–, la organización la ha incluido en la contienda por su papel en el largometraje vencedor de Cannes.
La que sí que se ha quedado fuera de la terna por el Oscar ha sido A fuego lento, que no se ha hecho hueco en la categoría que han terminado copando La sociedad de la nieve de Juan Antonio Bayona (España), Yo capitán de Matteo Garrone (Italia), Perfect Days de Win Wenders (Japón), La sala de profesores de Ilker Çatak (Alemania) y La zona de interés de Jonathan Glazer (Reino Unido).
Tampoco le importó la decisión gala a los Globos de Oro, concedidos por la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood. Aquí los países no tienen potestad para seleccionar sus títulos y las nominaciones dependen únicamente de la organización. La obra acabó la ceremonia, celebrada a principios de enero, con dos premios que la confirmaron como uno de los títulos más relevantes del año: Mejor película de habla no inglesa y Mejor guion original.
Las claves del filme
Ahora bien, ¿qué tiene de especial Anatomía de una caída? La película arranca con una escritora de éxito siendo entrevistada en su chalet 'perdido' en mitad de los Alpes franceses por una estudiante de periodismo. La charla, en la que la autora intercala sus respuestas con largos tragos de vino, se va volviendo tensa a medida que, desde la planta de arriba, se empieza a escuchar música a todo volumen. El ruido es ensordecedor. La conversación se termina. También se ve a un niño, ciego, paseando con un perro por la nieve, un coche que se aleja y un cuerpo desplomado en el jardín. Muerto.
A partir de ahí, arranca la investigación en torno a la que se arma el largometraje. Un drama judicial pulcro en su forma –aunque podría haberse narrado en menos de dos horas y media–, y que cuenta con una de las escenas más potentes del año (difícil de describir sin hacer spoiler). Su directora transforma el juicio en una disección de la pareja, que es la que realmente encarna la 'caída' a la que hace referencia el título del filme. La desmenuza, la coloca en el centro de un juzgado rodeada de miradas que la cuestionan y la muestra, sin por ello corromperla, con crudeza.
El jurado de Cannes, presidido por el sueco Ruben Östlund, le confió la Palma de Oro, concediendo el tercer reconocimiento en los últimos cinco años a películas distribuidas por Neon. Parásitos de Bong Joon-ho y El triángulo de la tristeza del propio Östlund hicieron lo propio en 2019 y 2022, respectivamente. Y ambas terminaron siendo aupadas en los posteriores Premios Oscar. La cinta surcoreana hizo historia en 2020 alzándose con cuatro premios, incluido doblete a Mejor película y Mejor película de habla no inglesa. La sátira del sueco se acabó quedando sin estatuilla, pero sumó tres nominaciones: Mejor película, Mejor director y Mejor guion original.
Las lágrimas de Triet
Justine Triet celebró este martes entre lágrimas las nominaciones cosechadas en los premios Oscar. “He llorado... La primera ha sido por el guion y estaba muy feliz. Pero ha sido después de ver el nombre de mi montador, Laurent Sénéchal, cuando he llorado. Ha sido una grandísima sorpresa”, reconoció minutos después del anuncio a The Hollywood Reporter.
La cineasta valoró igualmente su inclusión en la categoría a Mejor dirección. “Me sorprendió porque no había ninguna otra mujer nominada. Por lo que sí, me siento muy afortunada y orgullosa de ello”, aseguró. La ausencia sangrante es la de Greta Gerwig, a la que la Academia de Hollywood sí ha dado la espalda al dejarla fuera de la terna. Triet, por su parte, entra en la historia de los Oscar como la octava directora en optar a un galardón que solo ha recaído en manos de compañeras en tres ocasiones: Kathryn Bigelow por En tierra hostil en 2012, Chloé Zhao por Nomadland en 2020 y Jane Campion por El poder del perro en 2002.
La cineasta francesa mostró entusiasmo por los nombres con los que pujará por la estatuilla en esta categoría: Martin Scorsese por Los asesinos de la luna, Christopher Nolan por Oppenheimer, Yorgos Lanthimos por Pobres criaturas y Jonathan Glazer por La zona de interés. “Llevo admirando a varios de ellos desde que era una niña. Significa mucho para mi. Esto no era ni un sueño porque ni me lo había podido imaginar”, reveló. Y también se mojó sobre los largometrajes que más le han gustado de la temporada: Pobres criaturas de Lanthimos, Maestro de Bradley Cooper y Barbie.
En lo que deriven las cinco nominaciones concedidas por la Academia de Hollywood se sabrá el próximo 10 de marzo. Jornada en la que el Dolby Theatre de Los Ángeles acogerá la ceremonia en la que Anatomía de una caída apunta a tener más opciones para hacerse con el Oscar en las categorías de Mejor guion original y Mejor actriz protagonista.