La Comisión de Cultura del Congreso ha rechazado hoy una proposición no de ley que pedía la retirada del anteproyecto de Ley de Propiedad Intelectual con los votos del grupo popular cuya portavoz, María Ascensión Figueres, ha considerado que se trata de una buena norma, aunque ha reconocido que es mejorable.
La iniciativa ha sido presentada por Izquierda Plural, cuyo portavoz, Chesús Yuste, ha asegurado que el Gobierno ha conseguido “la unanimidad de todos los sectores en contra” con los que, ha indicado, el Gobierno no ha negociado.
Yuste ha calificado de “chapuza” la compensación por copia privada con cargo a los Presupuestos Generales del Estado, “un disparate que solo se entiende por una falta de respeto a la cultura o exceso de respeto a las industrias tecnológicas” y ha apostado por un tributo que grave las descargas de las grandes empresas tecnológicas.
Pero lo más grave, en opinión del portavoz de Izquierda Plural, “está en el golpe” que el anteproyecto asesta a las entidades de gestión de derechos, no en lo que se refiere a medidas de control sobre estas sociedades sino al hecho de que “menoscaba” su papel y desregulariza la actividad de gestión de los derechos de autor, ha dicho.
“Retiren el proyecto, pongan el contador a cero y no negocien con el Ministerio de Industria sino con el sector de la cultura”, ha pedido Yuste al PP.
La portavoz popular ha insistido en que el anteproyecto está siendo “tremendamente participativo” y ha recordado que se ha dado audiencia a los sectores interesados, se ha sometido a informes de los órganos consultivos y a información pública durante un mes.
Figueres ha recordado que hay intereses enfrentados en esta materia y que el Gobierno está intentando encontrar un equilibrio entre los diferentes sectores.
Respecto a la compensación por copia privada, que sustituye al antiguo canon digital, la diputada popular ha señalado que el hecho de que sea a cargo de los Presupuestos Generales continúa siendo una medida transitoria, ya que todavía este asunto se debate en la Unión Europea.
“Es un buen anteproyecto, mejorable pero no se merece su retirada”, ha manifestado Figueres, que ha afirmado que durante su trámite parlamentario escucharán las propuestas de los diferentes grupos.
El portavoz socialista, José Andrés Torres Mora, ha considerado que el anteproyecto de ley tiene un “vicio de origen”, ya que en la norma “sobra la influencia de determinados sectores de la industria y la economía” que proyectan en la cultura “una serie de prejuicios ideológicos”.
“Industria, Economía y Hacienda han impuesto su visión sobre la cultura. Se cargan una gran riqueza económica”, ha recalcado el portavoz socialista