Erwin Olaf, el fotógrafo que reaccionaba a las noticias con autorretratos
“Su obra se deja mostrar y entender a partir de estos tres conceptos: emancipación, deseo e intimidad, que de alguna manera son los elementos que el ser humano busca”. Así es como resume Paco Barragán, comisario de la exposición, la esencia y el título de la exposición del fallecido fotógrafo neerlandés Erwin Olaf. Una muestra panorámica de su trabajo desde los años 80 hasta 2020 que refleja, a través una estética escenificada, varios de los problemas de la sociedad contemporánea.
La exhibición Narrativas de emancipación, deseo e intimidad abre sus puertas al público el 10 de mayo para dar el pistoletazo de salida del festival PHotoEspaña. Se trata de la primera que se realiza de este autor desde su fallecimiento en septiembre de 2023. Entre julio y octubre del pasado año, se pudo ver en España una similar, Erwin Olaf: Un mundo que desvanece, en el Centro Niemeyer de Avilés.
“La exposición iba a tener otro concepto al inicio, se iba a llamar Celebrating life para homenajear la recuperación pulmonar de Erwin y su 65º aniversario, pero desgraciadamente Erwin no se recuperó y tuvimos que modificar la idea inicial”, ha explicado Shirley den Hartog, amiga y directora de la Erwin Olaf Foundation, en la presentación de la muestra. “Queríamos un espacio grande para exponer la obra de Erwin y lo hemos conseguido. Él tendría que haber estado aquí”, afirma Den Hartog.
Más de 185 fotografías, 20 vídeos y diversas videoinstalaciones componen, en el Teatro Fernán Gómez-Centro Cultural de la Villa, una parte de la extensa obra del neerlandés. Una retrospectiva de uno de los grandes renovadores de la estética narrativa que aborda, desde una perspectiva atrevida y a veces controvertida, los problemas a los que se enfrenta la sociedad contemporánea en el nuevo siglo: soledad, incomunicación, hiperindividualismo o violencia.
Olaf, como cronista de estos problemas, divide esta exposición en tres etapas claras en relación con sus vivencias personales. La primera de ellas: emancipación, que recoge las obras clave que abordan el activismo social, político y ecológico; después, el deseo, que recoge la celebración del cuerpo a través del deseo sexual explícito; y por último, la intimidad, la etapa más introspectiva que concentra conceptos como el aislamiento, la falta de comunicación, la tristeza o la decepción.
La muestra expuesta se completa con una treintena de autorretratos que reflejan diversas sensaciones vitales. Frustración, deseo o incertidumbre son algunas de las experiencias personales que han llevado a Erwin a crear una muestra en base a distintos medios y técnicas utilizadas en su práctica artística multidisciplinar. “Erwin usaba sus autorretratos para reaccionar a lo que pasaba en el mundo. Veía las noticias y en lugar de pronunciarse, hacía un autorretrato”, explica Den Hartog.
La obra del fotógrafo neerlandés comenzó documentando la liberación gay de la noche amsterdamesa durante la década de los 80. Cuatro décadas después, su obra ha pasado por diversas tendencias creativas enfocadas en contextualizar las complejas relaciones raciales, la devastación de las divisiones económicas y la sexualidad. “Pienso que con esta exposición nos llegan claves de cómo ha evolucionado la sociedad, para entender la sociedad en la que estamos y entendernos a nosotros mismos. Él nos dice que ha pasado con una sociedad en pleno cambio, contradictoria, compleja y ambigua. Una sociedad donde las grandes narrativas han fracasado”, ha apuntado Paco Barragán.
La obra de Erwin Olaf no solo gira en torno al activismo, sino que también ha formado parte de la exclusiva lista de retratistas de la familia real holandesa. Fue, además, el encargado de diseñar la cara nacional de las monedas de euro para el rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos en 2013. Olaf habló de esa dualidad dos años antes de su muerte: “Uno puede fotografiar su sexualidad y a sus amigos de la noche de Ámsterdam de una manera muy explícita y al mismo tiempo retratar a la familia real. Creo que dice mucho de la mentalidad de nosotros, los holandeses. Esto es para mí la libertad”. Ante los comentarios que tachan de provocadora y explícita la obra de Olaf, él mismo decía, según Paco Barragán, que “en Occidente hay una gran tradición con el cuerpo desnudo en la pintura, pero al fotografiarlo se convierte en pornografía para la gente”.
Taco Dibbits, director del Rijksmuseum —el Museo Nacional de Ámsterdam— subraya a Olaf como uno de los mejores fotógrafos del último cuarto del siglo XX. “Erwin vio la belleza en cada persona. Fue una figura clave en la historia por su activismo y su papel en la comunidad LGTBIQ+, y un fotógrafo que definió su medio en los Países Bajos. Un artista de tremendo impulso con una atención al detalle incomparable”, escribió en el tributo que el museo le dedicó tras su muerte.
El festival de fotografía PHotoEspaña 2024, organizado por La Fábrica, que se celebra hasta el 29 de septiembre y que cuenta con casi 300 artistas repartidos en 84 exposiciones. Perpetuum mobile es el título que da nombre a esta edición, haciendo alusión al movimiento como eje central, el dinamismo en el medio fotográfico y en sus creadores, así como los cambios colectivos, históricos y sociales. Se trata de la primera edición con María Santoyo al frente del festival.
En relación con la temática de este año, Erwin aseguró: “Veo las exposiciones muy uniformes y quiero romper con eso. Siento la necesidad de añadir movimiento a las historias que estoy contando. Me encanta investigar dónde está la quietud o inmovilidad de la fotografía o dónde empieza el movimiento de la vida”.
Perpetuum mobile, además de dar nombre a la edición, también es el título de una exposición colectiva en el Círculo de Bellas Artes de Madrid que exhibirá el trabajo de 27 fotógrafos y fotógrafas españoles que han sido testigos del “cambio de paradigma analógico/digital” desde el inicio de la Democracia.
El festival contará con la participación de grandes nombres de la fotografía española como Gonzalo Juanes, Javier Campano, Pilar Aymerich o Paloma Navares. También acogerá las muestras de grandes artistas internacionales: el ucraniano Boris Savelez, el japonés Masashisa Fukase, los estadounidenses Elliott Erwitt y Consuelo Kanaga, el sudafricano David Goldblatt o el holandés Iwan Baan serán algunas de las estrellas internacionales que pasen por las distintas salas del festival.
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