Dónde está el avión: cinco teorías sobre el MH370

Los datos que han sido confirmados por las autoridades son escasos: estaba programado para aterrizar en Pekín a las 6:30am pero 40 minutos después de salir de Kuala Lumpur el avión hace un giro inesperado de 90 grados, cambia de altitud y el transpondedor que envía señales de localización deja de funcionar. El ACARS que envía información sobre el estado de los motores y otros aspectos del vuelo también deja de funcionar.

Satélites del Ejército malasio y de las fuerzas aéreas tailandesas confirman que el MH370 fue detectado por última vez por un satélite Inmarsat (que sobrevuela el Índico) siete horas más tarde, y que la señal procede, bien de un corredor aéreo al norte de Tailandia que conecta con Kazajstán y Turkmenistán, bien al sur del océano Indico.

Valorando el mapa de radares militares de la zona, los expertos oficiales apuestan por la segunda. La CNN ha publicado un análisis con los datos recopilados por los gobiernos norteamericano y malasio que indica que el avión se estrelló en el Océano Índico, donde se concentra gran parte de la búsqueda. Pero los días pasan y el avión no aparece. De momento, estas son las cinco teorías más plausibles.

1. La teoría del fuego: un fallo mecánico

El avión tiene tres sistemas de comunicación y recopilación de datos: una radio, que usan los pilotos para hablar con la torre, el transpondedor, que envía “pings” electrónicos continuamente con el número de vuelo del avión, la altitud, la velocidad y el rumbo y el Sistema de Dirección y Reporte de Comunicaciones Aéreas (ACARS), que manda un informe con los datos de maniobra y comportamiento del avión y del piloto cada media hora. Se ha hablado mucho de que los dos sistemas de radar se desactivaron con 14 minutos de diferencia, indicando una manipulación deliberada de los sistemas, pero esta información no es correcta. El ACARS envió su último informe a la 1:07am y no se esperaba otro hasta la 1:37am, media hora más tarde. El sistema pudo ser desactivado en cualquier momento de esa media hora, incluyendo a la 1:21am, cuando se desconectó el transpondedor.

Es raro que un piloto apague el transpondedor, pero no imposible. En el 11S, los cuatro transpondedores de los cuatro aviones fueron desactivados por los terroristas, pero a veces también se apagan porque el aparato está haciendo una lectura defectuosa o hay un cortocircuito que pone en peligro la cabina.

De haber sido sorprendidos por un incendio, los pilotos podrían haber apagado todos los sistemas para no sobrecalentar la cabina. “En esos casos, la primera respuesta es cortar todos los circuitos y tratar de restablecerlos uno por uno hasta hallar el que tiene problemas -explica Chris Goodfellow, el piloto retirado que encabeza esta teoría- Cuando eso ocurre, el avión queda incomunicado”. Recordemos que cuando el jet de Air France con destino a Brasil se cayó al Atlántico en 2009, los pilotos tampoco dieron señales de auxilio.

Según Goodfellow, el piloto pudo haber intentado una vía de escape al aeropuerto más cercano, en este caso el de Langkawi, en el Mar de Andamán. ¿Por qué no avisó a torre? El protocolo de prioridades en estos casos es: Aviate Arrange & Communicate (en cristiano: pilotar, solucionar el problema y comunicarse, en ese orden). Los pilotos habrían puesto rumbo a Pulau antes de desmayarse por el humo. El avión siguió volando en piloto automático hasta quedarse sin combustible y estrellarse en algún punto de océano.

El problema: aunque es bonita, los expertos calculan que, de ser así, el avión habría acabado en el desierto de Taklamakan (China) o la frontera de Kyrgyzstan, pero no está allí. Además, el primer ministro malasio ha confirmado que el último mensaje que dio el piloto por radio a la torre de control en Kuala Lumpur -dijo: “All right, good night”All right, good night“- tuvo lugar después de que el ACARS fuera desconectado y no antes. Es poco probable que dos pilotos no se percaten de que su principal sistema de seguimiento del avión haya sido desconectado. Lo que nos lleva a...

2. La teoría del secuestro: el piloto/un complot

Esta teoría se bifurca en dos: a) el avión fue secuestrado por terroristas y la última llamada por radio se hizo a punta de pistola b) el secuestrador es uno de los pilotos o los dos. Los radares de la Armada malasia han registrado que, momentos después de que el transpondedor fuese desactivado, el avión subió 45.000 pies y bajó otros 23.000 antes de recuperar la normalidad. Los defensores del fuego lo reclaman como la prueba de que hubo una pérdida de control técnico cuando se apagaron todos los sistemas. Los del secuestro piensan que este vaivén podría indicar un forcejeo y los defensores del complot argumentan que las maniobras podrían estar diseñadas para confundir a los sistemas de control aéreo.

La investigación a los pilotos indica vidas perfectamente normales: el capitán Zaharie Ahmad Shah es un piloto veterano aficionado a los simuladores de vuelo y su joven copiloto Fariq Abdul Hamid estaba a punto de casarse con su novia de toda la vida. La CBS los describe como modestos y cautelosos. Pero cualquiera de los dos podría ser parte del complot sin que sea por voluntad propia. Y se ha mencionado la posibilidad de que el capitán sufriera problemas mentales y se hubiera embarcado en un enrevesado proyecto suicida.

Para hacer honor a la verdad, no hay datos que justifiquen esta posibilidad pero hay un reactivado interés en que el comandante sea un ninja de la aeronáutica. Ahora mismo la narrativa preferida por los equipos de búsqueda es que el avión volvió por el Mar de China -una área limitada por la costa oriental asiática, desde Singapur al estrecho de Taiwan, y las islas de Borneo y el archipiélago de las Filipinas -y sobrevoló el norte de Malasia en dirección a la India. ¿Cómo es posible que el birreactor más grande del mundo desaparezca de los radares comerciales y militares en una zona de alto voltaje sociopolítico?

Según expertos consultados esta zona es, precisamente, el lugar perfecto para empezar a desaparecer. Con un mapa que muestre los puntos ciegos de los radares en esa ruta aérea, un genio de la aviación podría haberse escurrido por esa ruta. “Un piloto experimentado, cualquiera que quiera coger esa ruta, podría perfectamente mapear toda la configuración de radares conocidos y calcular sus puntos ciegos –explica Jeffrey Beatty, consultor de seguridad y exagente especial del FBI–. Es lo que hicieron los norteamericanos cuando entraron en Pakistán para capturar a Osama bin Laden”.

Es más, los puntos ciegos son más grandes de lo que nos imaginamos: “Muchos países podrían avergonzarse de lo fácil que es traspasar su espacio aéreo –aseguró a Reuters el piloto retirado de las fuerzas aéreas británicas Michael Harwood, que trabaja en Washington–. Tantas películas y tantos informes del Predator (un drone militar) en Afganistán han convencido a la gente de que sabemos todo y lo vemos todo. Uno tiene lo que paga. Y la mayor parte del mundo no paga”. El jefe de las fuerzas aéreas Sudhir Pillai de Andamans y Nicobar ha admitido que “es posible que esa noche tuvieran los radares apagados”.

3. La teoría del avión sombra: escondido detrás de otro 777

Es la favorita de los geeks: el piloto aficionado Keith Ledgerwood explica en su Tumblr que el 777 podría haber volado sobre India y Pakistán escondido en la cola del vuelo SIA68 de Singapore Airlines, un avión idéntico con una ruta preconfigurada destino a Barcelona. Manteniéndose lo bastante cerca y en el ángulo correcto, con las luces apagadas y los sistemas de comunicación deshabilitados, los dos aviones podrían haber pasado delante de los radares como uno sólo. “Una vez el MH370 hubiera superado los espacios aéreos más complicados y estuviera a salvo de los radares militares en la India, Pakistán y Afganistán, se habría descolgado de la sombra del SIA68 y se habría encaminado a su destino de aterrizaje final”, dice Ledgerwood.

Aunque muy poco probable, los dos pilotos entrevistados por Slate han concedido que la teoría es “plausible” aunque requeriría habilidades prácticamente sobrenaturales por parte del piloto para “fundirse” con otro avión sin provocar un accidente. Tampoco explica cómo fue capaz de alcanzar el avión de Singapore Airlines cuando los dos van a velocidad de crucero. En cualquier caso, estos itinerarios revelan una intencionalidad y, por lo tanto, un motivo. Las autoridades chinas y malasias han descartado el ataque terrorista y están investigando la posibilidad de un secuestro. Si fuera así, los responsables ya habrían hecho sus demandas, salvo que algo haya salido mal.

4. La teoría de las drogas: una mula gigante

Porque sin reivindicaciones terroristas ni rescate ni explosiones, cabe la posibilidad de que el avión fuera utilizado como medio de transporte para mover material lo bastante peligroso para hacerlo de tapadillo y lo bastante valioso para justificar un plan tan desorbitado. La opción evidente son drogas, pero no se descarta el valor de las 227 personas que iban a bordo, incluidos varios niños.

Dicen que después de desaparecer de los radares y dar un giro brusco hacia el oeste, el MH370 siguió unas rutas aéreas (Vampi, Gival, Igrex) que se usan en los vuelos comerciales a Oriente Medio y Europa. Teóricamente, la máquina tiene un alcance máximo de 9.450 millas náuticas (17.500 km). En noviembre de 2005, un 777-200LR entró en el Guinness después de volar 11. 664 millas (21.602 km) de Hong Kong a Londres en una travesía ininterrumpida de 22 horas y 42 minutos. El avión podría estar mucho más lejos de lo que pensamos y los pasajeros podrían estar encerrados o haber sido ya descartados junto con el avión.

5. La teoría de Courtney Love