Buenos Aires, 12 dic (EFE).- Argentina, conocida por su riqueza natural y diversidad cultural, se presenta como un destino ideal para disfrutar del verano en el hemisferio sur. Desde los glaciares de la Patagonia hasta las Cataratas del Iguazú, pasando por viñedos al pie de la Cordillera de los Andes, el país ofrece paisajes imponentes y una destacada oferta gastronómica.
A diferencia de otros destinos, el país suramericano tiene mucho más para ofrecer durante los meses de verano que playas y mar, y se distingue por su combinación de naturaleza, turismo aventura, vinos de excelencia y por beneficiar a los visitantes extranjeros con la devolución del 21% de impuestos en alojamiento y compras de productos nacionales.
Iguazú: maravilla natural
Las Cataratas del Iguazú, declaradas una de las siete maravillas naturales del mundo, son el principal atractivo de la provincia de Misiones, en el norte del país y fronteriza con Brasil y Paraguay.
El Parque Nacional Iguazú ofrece distintos paseos a pie y en bote y cuenta incluso con un hotel de lujo a metros de las cascadas, el Hotel Meliá.
En la ciudad de Puerto Iguazú, la calle Brasil y el hito de la Triple Frontera complementan la visita, junto con la oferta gastronómica de la región, que incluye pescados locales como el pacú y el surubí.
Mendoza: entre viñedos y la montaña
A los pies de la Cordillera de los Andes, Mendoza combina paisajes montañosos con una destacada propuesta enoturística. Las regiones de Luján de Cuyo, Maipú y el Valle de Uco son reconocidas internacionalmente por la calidad de sus vinos, así como la pintoresca San Rafael.
La obtención de estrellas Michelin por parte de cuatro restaurantes mendocinos ha posicionado aún más a la provincia como un destino para los amantes de la gastronomía, con propuestas que van desde platos tradicionales hasta creaciones de autor que se maridan con vinos de excelencia.
Bariloche: un verano en los lagos
Conocida por ser un centro de esquí en invierno, Bariloche destaca también durante los meses de verano por sus temperaturas agradables y paisajes lacustres. Los paseos por el lago Nahuel Huapi, el Bosque de Arrayanes y el Camino de los Siete Lagos hacia San Martín de los Andes son algunos de sus atractivos más destacados.
Además, actividades como senderismo, kayak y tirolesa atraen a los amantes del turismo aventura, mientras que la ciudad sigue deleitando con sus chocolates artesanales y cervezas locales, opciones tradicionales de la región.
El Calafate: glaciares y aventura
En el sur del país, El Calafate es la puerta de entrada al Parque Nacional Los Glaciares. Su principal atracción, el glaciar Perito Moreno, cautiva a los visitantes con su majestuosidad y sus desprendimientos de hielo. Navegar por el lago Argentino permite descubrir otros glaciares destacados como el Upsala y el Spegazzini.
A poca distancia, El Chaltén, considerado la capital nacional del senderismo, ofrece circuitos como el sendero a Laguna Capri y la exigente ruta a Laguna de los Tres. Los paseos por el Lago del Desierto o las vistas del amanecer desde el Mirador de los Cóndores completan la experiencia.
Ushuaia: naturaleza al límite
Ubicada en el extremo sur de Argentina y conocida como la ciudad del 'Fin del Mundo', Ushuaia mezcla paisajes únicos y días largos -16 horas de sol- en verano, ideales para recorrer el Parque Nacional Tierra del Fuego. Este destino es también la puerta de entrada a la Antártida, con una temporada de cruceros que se extiende desde octubre hasta marzo.
La cocina local se destaca con platos como la centolla, la trucha y el cordero, acompañados por vinos de la región, que complementan la experiencia en esta ciudad austral.