Los tres originales se pueden leer aquí
Son tres de las cinco historias cuya existencia ya conocíamos: El océano lleno de bolas de bolos, Paula y El chico del cumpleaños. Y además son auténticas: lo ha confirmado su biógrafo Kenneth Slawenski (J.D. Salinger: Una vida oculta, Galaxia Gutenberg 2011), que también ha dicho que J.D. Salinger hubiera preferido que no se publicaran jamás. Los tres originales se pueden leer aquí y aquí.
El origen era sospechoso: una edición en papel que apareció en eBay, presuntamente el número 6 en una serie de 25 publicada en Londres en 1999. Pero no era disparatado porque El océano lleno de bolas de bolos ya estaba disponible para investigadores y académicos en la biblioteca de Princeton y los otros dos relatos llevaban años en el Centro Harry Ramson de la Universidad de Texas.
El famoso ermitaño había dejado estipulado que se publicaran al menos cinco libros, algunos totalmente inéditos, en el 70 aniversario de su muerte. Como ocurrió con Laura de Nabokov y la producción completa de Kafka, sus deseos no han sido respetados. La última obra que Salinger publicó en vida fue Hapworth 16, 1924 (en la prestigiosa revista New Yorker, en 1965), antes de desaparecer en su búnker de Cornish durante medio siglo hasta su muerte en 2010. “Me gusta escribir –le dijo al New York Times en 1974– Adoro escribir. Pero escribo sólo para mí mismo y para mi propio disfrute”. Como se dice vulgarmente, si quieres que algo se haga bien, tienes que hacerlo tú.
Antes de El guardián entre el centeno
El guardián entre el centenoPara disgusto de algunos fans y delirio de otros, el material filtrado no pertenece a la adorada familia Glass sino a la saga Caulfield: El océano lleno de bolas de bolos es una precuela de El guardián entre el centeno que estaba pensada para publicarse en Harper's Bazaar, pero que no llegó a salir nunca. Es el recuerdo del último día de Kenneth Caulfield narrado por Vincent Caulfield (Salinger cambió sus nombres a Allie y D.B. en El guardián). De los tres, es el mejor cuento y el único terminado y, según el editor Knox Burger, contiene la mejor carta que haya enviado nunca un niño a casa desde el campamento.
Según el propio subastador, Paula es “más bien una serie de escenas todavía sin enlazar” y ni siquiera está claro que se titule Paula (que se consideraba perdida para siempre) o Mrs. Hincher. Aunque el médico les dice a ella y a su marido, Frank, que no podrán tener niños, Paula Hincher se queda embarazada y decide quedarse en la cama durante toda la gestación para evitar cualquier contratiempo.
Frank le cuenta a todo el mundo que ha ido a visitar a su hermana enferma y dedica todo un año a atender las necesidades de Paula. En una carta fechada en octubre de 1941, Salinger dice que es su primera y última historia de terror llamada Mrs. Hincher. El final parece la primera prueba-ensayo de Un día perfecto para Bananafish.
El chico del cumpleaños (que no tiene nada que ver con Una pequeña cosa buena de Raymond Carver, relato publicado 20 años más tarde) está en un hospital y recibe la visita de su novia. En el transcurso de su conversación descubrimos que su padre ha olvidado su cumpleaños y que tiene un problema con el alcohol. Cuando su novia se niega a traerle “una gotita”, pierde los estribos y le dice: Si vuelves, te mato. Ella, por supuesto, vuelve.
Quedan al menos dos cuentos por publicar
Los dos relatos que existen y que no han sido filtrados también pertenecen a El guardián, El último y el mejor de los Peter Pan (1942) y El escalón de los niños (1944). El primero tiene lugar después de la muerte de Kenneth/Allie Caulfiel y antes de la Segunda Guerra Mundial. Vincent Caulfield mantiene una conversación con su madre, Mary Moriarity, que ha escondido el cuestionario que le manda el ejército para alistarse.
El segundo son 18 entradas del diario de Bernice Herndon, una cabeza hueca de 18 años que se casa con un feo militar para darse aires de madurez. Slawenski cuenta en la biografía que Salinger recibió la crítica más dura de su vida por parte de su editor, que termina diciendo que “publicarla sería un gasto inútil de papel”. Salinger nunca la publicó, pero sí recicló algunas partes para Una chica joven en 1941, sin cintura ninguna, publicado en la revista Mademoiselle en mayo de 1947.
Aunque la identidad del subastador es desconocida, la filtración llega sólo un par de meses después del estreno del documental Salinger, en el festival de Toronto, escrito y dirigido por Shane Salerno, donde ya se habla de cinco obras inéditas que serían publicadas a partir de 2015.
El documental llega acompañado de un libro cargadito de rumores nunca confirmados que firman el propio Salerno y David Shields, un autor que se hizo famoso por la publicación de un libro compuesto exclusivamente con citas de otros (Reality Hunger: A Manifesto). El texto de la subasta incluye el pequeño momento publicitario (“¡Prepárense para una nueva película y un nuevo libro sobre Salinger!”).
Ni su hijo, Matt Salinger, ni su viuda, Colleen O'Neill, herederos de su legado, han querido pronunciarse sobre las filtraciones. También se negaron a colaborar con Salerno, tanto en el libro como en el documental.
Reality Hunger: A Manifesto (Knopf, 2010)