Georgios Kyriacos Panayiotou nació el 25 de junio de 1963. Su padre tenía un restaurante y su madre era bailarina. Vivían en Finchley, una ciudad dormitorio al norte de Londres que era popular entre los inmigrantes griegos y que fue distrito electoral de Margaret Thatcher de 1959 a 1992. Cuando se mudaron a la más próspera Radlett, en el condado de Hertfordshire, matricularon al pequeño George en el Bushey Meads school, donde conoció a Andrew Ridgeley. Empezaron montando un grupo de ska llamado The Executive con David (Austin) Mortimer, Harry Tadayon y Andrew Leaver en 1979. Dos años después se reconfiguraron como dúo. Lo llamaron Wham! y firmaron un contrato con Innervision Records.
1. Wham! debutó en junio del 82 con un Wham Rap! pero el pelotazo vino con Young Guns (Go for It) y el lúcido playback que protagonizaron en el Top of the Pops y que les catapultó al 3 de las listas. George llevaba un chaleco de cuero sin mangas y unos jeans enroscados, y bailaba una coreografía burbujeante con las cantantes Dee C. Lee y Holliman Shirlie. Al calor de aquel primer éxito, Wham Rap! fue reeditado como Wham Rap! (Enjoy What You Do) y subió al 10. Después de un tercer single llamado Bad Boys and Club Tropicana, salió su primer disco, Fantastic (1983). Fue el más vendido en Inglaterra durante las primeras dos semanas. Wham! se convirtió en la estrella de la nueva ola británica junto con Duran Duran y Culture Club.
2. Estrellato. Ocurre a menudo que un grupo que tiene éxito con el primer disco saca un segundo disco decepcionante, lleno de caras B, escrito a trompicones en el autobús de la gira, acabado de mala manera y producido a todo correr. El segundo disco de Wham!, editado con Epic, fue exactamente todo lo contrario. Make It Big (1984) tiene las mejores canciones del grupo, desde la pegajosa Wake Me Up Before You Go-Go al baladón Careless Whisper pasando por las irresistibles Everything She Wants y Freedom, todas escritas por George. Un año después se adelantaron a Queen, siendo el primer grupo occidental que toca en la República Popular China. Dicen que su manager Simon Napier-Bell le pasó un dossier al gobierno chico con fotos de los dos grupos: George y Andrew con su pelazo y sus camisitas y Freddie Mercury en sus momentos más rimbombantes. Los Chinos prefirieron a Wham!
3. La ruptura. Wham! cerró con un épico concierto de 8 horas en el estadio de Wembley al que fueron 72.000 personas histéricas. En el momento, George dijo que estaba siendo la ruptura más amistosa de la historia, aunque más adelante dijo que se había sentido muy presionado y que las canciones del primer disco eran “como un albatros apretándome el cuello”, obligándole a ser alguien que no era. Su single de despedida fue The Edge of Heaven, seguido del disco Music from the Edge of Heaven en 1986. Andrew se fue a Mónaco a probar suerte con la Fórmula 3 y Michael hizo un dúo con Aretha Franklin antes de sacar su primer álbum en solitario. Si había algo que reivindicar, todo se aclaró de golpe. Faith (1987) estaba producido, escrito y orquestado por Michael y vendió 25 millones de copias.
4. El Rey del mundo. George Michael vendió más de 100 millones de discos en toda su vida. De todos ellos, Faith es el mejor. Las revistas especializadas lo metieron en su selección de los mejores de la historia. Fue el primer álbum en solitario de un artista blanco en alcanzar el número 1 en las listas de Rythm & Blues. Le dieron el Grammy al disco del año. Y los vídeos eran puro fuego. I want your sex era tan exuberante que muchas radios y televisiones se negaron a emitirlo. Faith se convirtió en el single más vendido del 88 y el vídeo en el que solo sale Michael bailando, en un icono de la MTV. One more try, Father Figure y Kissing a Fool fueron todos derechos a las listas de éxitos. También fue el año del Faith World Tour, que empezó en Tokio en febrero y en julio del año siguiente, en el Estadio de Sarrià. Dio 137 conciertos en cuatro continentes. Regresó hecho fosfatina. No volvió a sacar un disco hasta Listen Without Prejudice Vol 1, en 1990.
5. Fuera del armario. Aunque el baladón Praying for time llegó al Top 1, el disco “sólo” vendió 8 millones de copias, lo que supuso una gran decepción. Hoy este disco se cuerda sobre todo por su segunda Freedom, y su fabuloso vídeo protagonizado por las modelos que mitificaron la profesión: Linda Evangelista, Cindy Crawford, Naomi Campbell, Christy Turlington y Tatiana Patitz. Es tan icónico que Vogue lo acaba de homenajear. Él mismo repitió jugada con Too Funky, reuniendo a Linda Evangelista con Eva Herzigova, Tyra Banks y la mismísima Rossy de Palma.
Ese año llevó a Sony a los tribunales por no haber promocionado su disco lo suficiente y perdió. Años después dijo que lo hizo porque estaba destrozado de dolor. Acababa de morir su pareja, el diseñador brasileño Anselmo Feleppa, víctima de una hemorragia complicada por el sida. Era su primera pareja en serio y llevaban tres años juntos. Michael no le había dicho a sus padres que era homosexual hasta que conoció a Feleppa en 91.
Antes había habido chicas. Cuando grabó Faith, Michael mantenía una relación muy publicitada con la modelo Kathy Jeung, protagonista del video I want your sex. Brooke Shields, que también fue su novia, dijo que George “había sido siempre un caballero” con ella. Tania Coleridge, la modelo que sale en Father Figure, dijo que estaba saliendo del armario, que era evidente para todos que era gay y que las escenas de besos con chicas le ponían malo. En los años siguientes le dedicó Jesus to a Child, que se estrenó en enero de 1996 y llegó al Número 1 de las listas británicas. También le dedicó Older, su tercer disco en solitario, que fue platino y el primero en la historia de las listas británicas en llegar al Top 1 con tres canciones distintas.
6. El escándalo de los urinarios.6 Después de tres años de duelo, empezó a salir con el texano Kenny Goss y a consumir muchos estupefacientes. Un año después su madre murió de cáncer. En 1998 le arrestaron por “cometer actos lascivos” en los lavabos públicos de Beverly Hills en California. Le sentenciaron a 80 horas de servicios públicos y sacaron el arresto en todos los medios del planeta. Michael aprovechó el escándalo para decir que hacía 10 años que no tocaba a una mujer, y para entrar en las filas del camp con su propia reconstrucción de los hechos. “Haría servicio comunitario pero creo que ya cumplí”, canta en Outside, su homenaje a los encuentros fortuitos con extraños en los urinarios públicos y a los atractivos policías que le entramparon allí, con bolas de espejo y alegre coreografía. Llegó al Número 2 de las listas. Apareció en la recopilación Ladies & Gentlemen: The Best of George Michael, que vendió 15 millones de copias.
7. Living la vida loca. Unos dicen que Goss fue el amor de su vida, otros que fue la persona que le arrastró hacia la autodestrucción. De padres alcohólicos que nunca admitieron su homosexualidad y un historial de rehabilitaciones, Goss mantuvo con Michael una relación llena de escándalos, detenciones por abuso de drogas, rupturas y acusaciones de maltrato en los medios de comunicación. Tenían cuatro casas, un condominio de dos millones de dólares en Texas y otras tres casas en el Reino Unido, incluyendo su residencia habitual de Highgate, frente al Snappy Snaps. También tebían una colección de arte, con la que Goss llegó a abrir su propia galería en Texas. Durante un tiempo vivieron con Geri Halliwell, la pelirroja de las Spice Girls, y mejor amiga de la pareja. Según dijo Michael en una de sus raras entrevistas, los dos frecuentaban, juntos y por separado, el bellísimo parque de Hampstead Heath, a seis kilómetros de Trafalgar Square, para encontrarse con desconocidos.
Estuvieron juntos 14 años, aunque sus familiares dicen que en los últimos meses se habían vuelto a reconciliar. Su séptimo y último disco, Symphonica, salió en 2014 y tuvo un éxito moderado, acompañado de un “tour orquestral”. En el momento de su muerte trabajaba en su próximo disco con el productor Naughty Boy y en la película Freedom: George Michael, pensada para acompañar la reedición de Listen Without Prejudice Vol 1.
8. La otra vida. Ya es mítico o, al menos, significativo que el autor de la inolvidable Last Christmas tenga que morir el día de Navidad. Pero además se muere justo a tiempo para entrar en la ilustrísima lista negra de 2016, que empieza con David Bowie y sigue con Prince, Glenn Frey, Leon Russel, Maurice White, Manolo Tena, Keith Emerson y Greg Lake, Leonard Cohen, Rick Parfitt y Juan Gabriel, el ídolo de Ciudad Juarez. Como la cultura es cíclica y funciona en espiral, sus cajas conmemorativas llegan también a tiempo para cabalgar la ola del revival de los 90, cuando vivió sus mejores momentos y publicó sus mejores canciones.