La portada de mañana
Acceder
Los jesuitas admiten por carta que tuvieron un cura abusador en Madrid
Radiografía y mapas de los ataques de Israel en Líbano: “Llevamos años esperando”
Opinión - La fiesta acaba de empezar. Por Esther Palomera

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Oscar Martínez busca fortalecer su vínculo con España

EFE

Venecia (Italia) —

0

Ganó la Concha de Plata de San Sebastián por “El nido vacío” en 2008 y este año la Biznaga de Plata de Málaga al mejor secundario por “Kóblic”, pero el gran actor argentino Oscar Martínez aún quiere fortalecer más su vínculo con España.

Martínez (Buenos Aires, 1949) habla con Efe en Venecia, donde presenta dos películas: la coproducción hispano argentina “El ciudadano ilustre” en la competición oficial, e “Inseparables”, en una sección paralela.

Se ha escapado de España, donde prepara el inminente rodaje de “Toc toc”, de Vicente Villanueva, junto a Paco León, Alexandra Jiménez y Rossy de Palma.

“El rodaje empieza el 12 de septiembre pero estoy desde el 20 de agosto en Madrid con pruebas y ensayos y me quedo hasta el 4 de noviembre”, explica Martínez, que el viernes estrena en España “El espejo de los otros”, mientras que “El ciudadano ilustre” llegará a las salas españolas el 28 de octubre y poco después “Inseparables”.

“Ojalá les vaya bien y así fortalezco el vínculo con España”, dice el actor, que recuerda la tradicional relación de los dos países en el campo de la interpretación.

Desde Alberto Closas hasta Pepe Sacristán, del que es íntimo amigo, o Ricardo Darín y Leonardo Sbaraglia entre los argentinos con más éxito de los últimos años en España.

Martínez hizo precisamente con Darín la obra de teatro “Arte”, hace más de una década, y con ella estuvo en Madrid y Barcelona.

Habla con cariño de su trabajo en España, como lo hace de las películas que presenta en Venecia.

“Inseparables”, explica, es “un remake a la argentina” de la francesa “Intouchables” (“Intocables”) en la que él retoma el papel de François Cluzet, el millonario parapléjico que contrata a un inmigrante (Omar Sy en la original francesa y Rodrigo de la Serna en la argentina) para que le cuide.

“La nuestra es más latina, más emocional y quizás un poco más divertida”, dice sobre un filme dirigido por Marcos Carnevale, también responsable de “El espejo de los otros”, en la que Martínez tiene un papel más pequeño.

Con “Inseparables” y “El ciudadano ilustre” tiene dos días continuos de promoción en Venecia, por lo que califica el festival como “una fiesta” pero al mismo tiempo es “bastante duro”.

Y no quiere pensar en la posibilidad de premio que le brinda “El ciudadano ilustre”, de Gastón Duprat y Mariano Cohn, que compite en la sección oficial de la Mostra.

“Trato de no pensar en eso, aunque en el bolillero está. Pero estar aquí ya es un premio. En estos festivales de primer orden como Cannes, Venecia o Berlín es muy codiciado estar para la industria de cualquier país del mundo. Son centenares las películas que se presentan y venir de tan lejos y estar seleccionada ya es muchísimo”, asegura.

En “El ciudadano ilustre” interpreta a un premio nobel de Literatura que regresa a su pequeño pueblo natal de Argentina tras cuarenta años de ausencia. Un personaje que le atrajo desde el primer momento, aunque asegura que para que decida trabajar en una película, todo empieza con el guión.

“Leo el guión como tú te sientas a ver una película. Si me interesa, me divierte, me conmueve, me entretiene, entonces ya me involucro. Hay que tener en cuenta quién dirige, con quiénes vas a trabajar, cómo es la producción, pero lo primero es el guión”, explica.

Es una primera lectura “más emocional y sensorial que intelectual”. “Si me atrapa me involucro, si no difícilmente. Es como cuando vas al cine y algo te agarra del cuello del principio al final y quieres más”, explica expresivo.