La Unión de Cineastas se reunió ayer, miércoles 29 de abril, en Madrid. A la cita asistieron profesionales del sector cinematográfico y representantes de los principales partidos políticos. Ambos grupos charlaron sobre instaurar unas bases sólidas que iniciaran un nuevo ciclo para el cine español. Desde la organización pidieron a los miembros del Congreso que pactaran una política de Estado que reforzara la producción cinematográfica del país.
El acto se celebró en el Círculo de Bellas Artes de la capital. Al inicio del mismo se ha leído un manifiesto que resaltaba el hecho de que las confrontaciones políticas existentes en la actualidad frenan cualquier posibilidad de desarrollo en este sector.
“Hemos estado en el centro de un debate que no nos corresponde y el cine ha dejado de ser percibido como un patrimonio de todos”, señaló el productor José Nolla, miembro de la Unión de Cineastas.
La propuesta que presentan desde el sector cinematográfico pasa por incorporar la alfabetización cinematográfica en los planes educativos, consagrar la proporcionalidad (que todas las películas tengan apoyo público), mejorar la transparencia administrativa y defender la excepción cultural del cine.
Los datos son cada vez más desfavorables para el cine
El acto ha estado cargado de reclamos y demandas por parte de productores, directores, guionistas y actores. José Antonio Félez, productor de La isla mínima ha afirmado que “el cine merece un tratamiento de Estado, por encima de los vaivenes de la política. Algo tan importante y tan frágil no puede utilizarse como arma arrojadiza”.
“La forma de ocio ha cambiado y hay que estar preparado para ello, el cine no se ve solo en las fotos”, ha defendido el presidente de la Asociación Estatal del Cine, quién, además, ha aportado el dato de que en 2014 se vendieron en total menos de 100 millones de entradas de cine con respecto al 2001.
Juan Carlos Tous, de la plataforma Filmin, ha dado el punto de vista de la nueva distribución digital y en este sentido ha reclamado una mayor inmediatez en el acceso a las películas después del estreno en cines. “No puede ser que después de tres o cuatro semanas de exhibición las películas queden en el olvido”, ha dicho.
Los partidos políticos “quieren” mejorar los datos del sector
En cuanto a los representantes políticos, al acto han acudido, entre otros, José María Lassalle, secretario de Estado de Cultura, quien ha declarado que “lamentablemente la política no puede recambiar la realidad completamente”. La realidad, ha añadido, “es que la media de lectura en España es de cinco libros al año y que a la gente no le interesa Dreyer y Renoir” sino “el cine del s.XXI”, estas declaraciones han despertado algún que otro abucheo ya que desde el sector cultural, y el cinematográfico más concretamente en este caso, consideran que la política debería intervenir de una forma más activa a la hora de promover e incentivar el consumo de cultura.
Lassalle ha defendido la gestión del PP y ha insistido en que la modificación de la ley del cine “va a ser inminente” y “va a dar seguridad jurídica”. Esta ley será “un modelo que contemple tanto las películas de la industria como las de pequeños productores”. En su opinión, ha proseguido, “el problema del cine no es sólo Montoro, sino cómo están montadas las propias estructuras del cine.”
Sobre las ayudas pendientes, ha asegurado que “hay un compromiso público” de afrontar el pago de las correspondientes a 2012, sobre las que se había aplicado, por primera vez, un prorrateo del 12 %.
En nombre del PSOE ha asistido Ibán García del Campo, quien ha avanzado que entre sus próximas propuestas está la de bajar el IVA cultural al 5%, aumentar los incentivos fiscales y un estatuto especial de las profesiones artísticas.
Por su parte, de Podemos ha asistido Jorge Lago quien ha apuntado que el objetivo del pacto por la cultura ha de ser crear, por primera vez, un verdadero modelo de política cultural en España, en lugar del “parcheo permanente” y la inestabilidad resultante de las continuas confrontaciones políticas que han reinado hasta ahora.
Milagros Hernández, de Izquierda Unida, ha apostado por “recuperar competencias locales y regionales que ayuden a tomar medidas efectivas de apoyo al sector”, mientras que Esther Ruiz, portavoz de Ciudadanos, que además es productora de cine, ha opinado que el problema es la ausencia “de un perfil industrial fuerte del cine.”
Un encuentro que ha reunido a distintas voces que expresan distintos puntos de vista con respecto al “problema” de financiación e impulso de lo cultural en España y que ha servido para tender puentes entre los dos actores principales en este “conflicto”, los trabajadores del sector y los distintos representantes políticos.