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Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Quejas por una recreación de la batalla de Waterloo “distante” para el público

EFE

Bruselas —

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Las celebraciones del bicentenario de la batalla de Waterloo, en la que Napoleón Bonaparte fue derrotado, han cosechado críticas entre el público de la mayor recreación del histórico enfrentamiento militar por considerarlo demasiado “distante” y difícil de seguir, informan hoy los medios belgas.

La organización ha escuchado estos comentarios y ha decidido hacer cambios en la sesión de hoy para tratar de mejorar la experiencia del público.

Unas 68.000 personas siguieron “in situ” el viernes en los campos de esta localidad belga las primeras recreaciones de la batalla, en la que más de 5.000 figurantes vestidos de época y unos 300 caballos lanzaron cargas, tiraron cañonazos, dispararon artillería e hicieron sonar tambores.

En cambio, muchos de los presentes salieron “decepcionados” del espectáculo porque el humo de los disparos de fogueo les tapaba en gran parte las vistas, indica la cadena RTBF.

“Evidentemente dependía del lugar en el que te colocaras. En las tribunas no se veía gran cosa”, dijo un espectador a ese medio.

La falta de visibilidad era una de las críticas más recurrentes entre el público, pero no la única: la descripción de los combates, que se realizaba de manera esporádica y en tres lenguas a través de altavoces, también fue motivo de decepción.

“No se cuenta demasiado, hay grandes espacios entre los diálogos. Tendrían que haber contado la historia, porque los cañonazos ya los oímos de todos modos”, consideró otro espectador, que echó en falta grandes pantallas para que los asistentes pudieran visualizar los diferentes puntos del campo de Waterloo en los que se desarrollaba la batalla.

No obstante, en el “inmenso espacio” escogido para la recreación, tanto en la escena de la batalla como en los vivaques, los organizadores habían dejado claro que querían evitar que en las fotos de los visitantes aparecieran anacronismos como tendidos eléctricos, destaca el diario francófono “Le Soir”.

Ese periódico reconoce la “belleza” de la puesta en escena, que a su juicio se vio en cambio afectada por “la amplitud” con que fue realizada.

Otra de las quejas de los espectadores fue lo “estático” de la escena y la lentitud del desplazamiento de las tropas entre el campo de batalla y lugares estratégicos como las granjas de Hougoumont y la Haie Sainte o el cementerio de Plancenoit -todos ellos lugares emblemáticos de la contienda-, así como la dificultad para “reconocer quién era quién” a distancia desde las tribunas.

Figurantes de 47 nacionalidades diferentes (principalmente venidos de Alemania, el Reino Unido y Francia) dan vida a las tropas francesas, prusianas, británicas, holandesas y alemanas.

Al término de la representación, había espectadores que se sentían “impresionados” por el despliegue en la escena, mientras que otros dijeron echar de menos “las pequeñas representaciones de antaño” -que tradicionalmente se hacen cada año en Waterloo-, que consideraban “más humanas”, apunta “Le Soir”.

La conmemoración del bicentenario de Waterloo continúa en la tarde del sábado con una segunda reconstrucción de la batalla, en la que el ejército del duque de Wellington y las tropas prusianas darán la réplica decisiva a los efectivos de Napoleón.

El espectáculo, llamado “La respuesta aliada”, prevé igualmente reunir a más de 60.000 espectadores.

Para tratar de acercar más la recreación al público, los organizadores han decidido reemplazar al comentarista en lengua francesa y hacer retoques en el guión de la narración del evento.

Por lo que se refiere a la presencia de las tropas sobre el terreno, han decidido situarlas más cerca del graderío.