Los 17 becarios del musical Malinche han enviado una carta a la magistrada del juzgado de Instrucción número 19 de Madrid, Inmaculada Iglesias, para solicitar prestar declaración y “contar su verdad”. La petición se produce tras la suspensión de la comparecencia de la denunciante y exbecaria de la producción musical, Lesly Ochoa, prevista para el pasado 4 de octubre, al alegar un cuadro de ansiedad.
El juez Antonio Serrano-Arnal, quien cubrió la ausencia por vacaciones de la juez titular del Juzgado de Instrucción número 19 de Madrid, Inmaculada Iglesias, suspendió el pasado 28 de agosto la declaración de los 17 becarios. Esta comparecencia estaba prevista para el día siguiente, 29 de agosto. Los becarios regresaron a México el 1 de septiembre, tras finalizar su periodo de formación en España, sin haber podido declarar ante la Justicia.
En la carta, según han informado a Europa Press fuentes de la productora del musical de Nacho Cano, los becados mexicanos afirman estar “preocupados” ante la posibilidad de que “el retraso (en la declaración), sumado a otros intentos previos de prolongar el proceso, siga generando un perjuicio grave” a su “imagen, trabajo y estabilidad emocional”.
“Nos parece paradójico que, siendo nosotros quienes hemos sufrido un ataque directo a nuestra reputación, tanto individual como colectiva, la denunciante continúe dilatando este procedimiento, evitando aclarar los hechos en el juzgado”, han escrito en la carta enviada al juzgado.
Por ello, los estudiantes piden a la juez que “se conceda una fecha y hora para rendir legal declaración”. Además, creen “que es fundamental que se brinde la oportunidad de ejercer” su “legítimo derecho a defenderse” y ofrecer su “versión de los hechos”.
“Víctimas de una persecución política”
Los becarios de Malinche denunciaron a la Policía de la Comisaría de Leganitos el día 8 de julio. En esta denuncia, que investiga el juzgado número 38 de Madrid, manifestaron que “la Policía obtuvo sus declaraciones ilegalmente bajo amenazas y coacción”, según la productora.
“Por tanto, los becarios no son víctimas de Nacho Cano, son víctimas de Lesly Ochoa y de una persecución política. La Policía de la Comisaría de Leganitos ha vulnerado sus derechos fundamentales y han obtenido WhatsApp e información privada de forma ilícita. Estos agentes de Policía trataron de conseguir datos de forma ilegal y delictiva”, ha añadido la productora musical.
Según se insiste desde Malinche, “a las chicas trataban de dirigirlas para obtener una acusación contra Nacho Cano por delitos contra la libertad sexual y a los chicos trataban de obtener datos para acusar a Nacho Cano de tratos vejatorios (como por ejemplo, someterles a dietas rigurosas)”. En ambos casos, añaden desde la compañía, “no pudiendo obtener esas declaraciones, fabricaron los delitos de inmigración ilegal y contra los derechos de los trabajadores extranjeros”.