Óscar Puente da por rotas las negociaciones con Valladolid Toma la Palabra y gobernará en solitario
El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha dado por rotas las negociaciones con Valladolid Toma la Palabra, sus socios desde 2015, y gobernará en solitario con 11 ediles. Una mayoría simple, suficiente para lograr la investidura, pero tan limitada que hará necesarios acuerdos puntuales con otras formaciones durante la legislatura. Puente ha sido muy crítico con sus hasta ahora compañeros de Gobierno a quienes acusa de “intransigencia” y de haber roto la confianza que existía entre ellos.
A lo largo de la semana pasada, la posibilidad de reeditar el acuerdo entre las dos únicas formaciones de izquierda de la ciudad iba acercándose y alejándose. La tensión comenzó cuando el PSOE propuso una reestructuración del ejecutivo local, que suponía la reducción de competencias y presupuesto de las carteras que hasta ahora había gestionado VTLP. Aunque los concejales de esta formación calificaron la proposición de “muy decepcionante”, en posteriores reuniones con los socialistas la situación se fue calmando.
Este lunes, Puente ha defendido la disminución del peso de Toma la Palabra en el gobierno municipal, lo que en la práctica ha supuesto la ruptura entre los dos partidos, al considerar que la formación de izquierdas había visto reducido su peso tras las elecciones. Valladolid Toma la Palabra pasó de 4 a 3 concejales, mientras que el PSOE subió de 8 a 11. “Por su complejo de superioridad, no asimilan que los votantes hayan reducido su apoyo”, ha sentenciado con dureza el alcalde en funciones.
Puente asegura que las relaciones habían empeorado estos últimos meses debido a la actitud de los concejales de VTLP, que según él, ha ido variando desde la colaboración inicial hacia la intransigencia. “Jamás han reconocido el trabajo del resto de concejales”, ha dicho el regidor socialista. Pero la gota que colmó el vaso fue que la formación de izquierdas aplazase sine die la consulta a sus bases sobre si debían formar parte de la coalición, prevista para este fin de semana. Una decisión que Puente considera “un órdago y una falta de madurez política”.
Desde el próximo sábado día 15, ha explicado Puente, el PSOE gobernará en solitario, aunque no se cierra en banda a llegar a acuerdos con otros grupos municipales, algo que será necesario porque la oposición podría tumbar iniciativas importantes. La suma de PP (9), Ciudadanos (3) y Vox (1) supera la mayoría simple del PSOE, por lo que la falta de un acuerdo entre PSOE y VTLP complica la gobernabilidad al alcalde socialista.