El hombre que susurra al balonmano
El hombre tranquilo. Así es Carlos Viver, el nuevo entrenador que se pone al mando de las ‘Guerreras’, la selección española de balonmano femenino que tantos corazones ha cautivado por su garra y ambición. Un hombre que vive por y para el balonmano y que a partir de ahora compaginará su cargo en el combinado nacional con su trabajo como entrenador del Fraikin BM Granollers, equipo que compite en la Liga Asobal y la EHF Cup.
El entrenador catalán, elegido por la Real Federación Española de Balonmano, tiene la complicada tarea de sustituir a Dueñas, el técnico que llevó al balonmano femenino español hasta lo más alto: un bronce olímpico (2012), dos platas en Campeonatos de Europa (2008 y 2014) y un bronce en un Campeonato del Mundo (2011).
Un reto que va a vivir de frente y con experiencia. Viver ya ha dirigido equipos femeninos: tras alejarse de las pistas como jugador, en 2008, pasó a dirigir el KH-7 BM Granollers, con el que hizo historia logrando dos ascensos consecutivos a División de Honor Plata (2012) y a División de Honor Femenina (2013), la élite estatal. Por primera vez en la historia del club, el conjunto femenino estaba —y sigue— entre los 14 mejores equipos de España.
“Carlos trajo la magia al equipo femenino del Balonmano Granollers: nos convirtió en lo que hemos acabado siendo”, asegura Andrea de la Torre, una de las jugadoras que estuvo a las órdenes del ‘mister’ catalán. “Fue el gran mesías, porque éramos un grupo muy joven e íbamos un poco perdidas, pero supo dirigirnos para hacer historia”, añade su exjugadora.
Trabajo en equipo
En el sistema de Viver, la labor colectiva siempre ha sido un pilar fundamental. “Cuando nos entrenó siempre incidía en que todas las jugadoras debían ser partícipes del juego: este importante trabajo de equipo era lo que ganaba partidos”, subraya De la Torre.
Esta visión de grupo contrasta con otro de los aspectos que destaca en su pizarra: la libertad individual de cada componente del equipo. Antonio Rama, segundo entrenador del Fraikin BM Granollers, insiste en que “dentro de unas pautas tácticas y un sistema claro, Viver da libertad a cada jugador para que pueda decidir por él mismo cómo seguirá la jugada”. Este aspecto, según Rama, aporta una riqueza muy amplia al equipo, además de hacer que los jugadores “se sientan partícipes del juego y no máquinas de ejecución de sistemas”.
El paso previo a salir a la pista es el análisis del rival, y este es el arma más poderosa del nuevo seleccionador. “Le gusta ver partidos y analizarlos minuciosamente”, confirma su segundo entrenador en el conjunto vallesano. Esto lo que le permite es que sus equipos vayan “diez pasos por delante del rival”, ratifica De la Torre. Tanto Rama como la exjugadora coinciden en que para Viver la defensa tiene un papel vital en el esquema de su juego.
Sereno y maduro
“Siempre pensaba que cuando fuese mayor me gustaría entender el balonmano como lo hace Carlos’”, confiesa De la Torre. Para ella la manera de dirigir de Viver es “tranquila, sosegada y meditada”. Su sangre fría le permite transmitir serenidad y madurez, dos aspectos que le identifican. Esto hace que tenga “un muy buen discurso que te anima a seguir creciendo y mejorando”, explica. En este sentido, tanto Rama como ella comparten la idea de que el técnico catalán sabe gestionar “muy bien” el vestuario. “Cuando ve que algo va mal, lo detecta rápidamente y se pone a trabajar en ello”, asegura el segundo entrenador del Fraikin BM Granollers. Además, destacan que su experiencia previa como jugador le da una visión global del vestuario que ayuda a mejorar su gestión.
Viver luchará por mantener el balonmano femenino español en la élite mundial lidiando con el temido relevo generacional. Las principales artífices de esas grandes conquistas van dejando, poco a poco, la práctica del balonmano, por lo que incorporar a nuevas jugadoras es ahora una prioridad.
Con la vista puesta en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, su primer gran reto será el Mundial de Alemania de diciembre de este año. Antes, llegará la primera concentración de las ‘Guerreras’: del 12 al 19 de marzo. Será la primera toma de contacto. La primera experiencia para que ellas conozcan a esta persona que hace que el balonmano se juegue mejor.
