Aecid cumple 25 años de ayuda al desarrollo ahogada por los recortes

La Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo cumple esta semana 25 años con una última etapa muy marcada por los recortes presupuestarios que han supuesto una merma en la ejecución de proyectos. Como ejemplo, este año cuenta con un 14% menos de recursos para atender a los 23 países prioritarios en sus planes. “Si a ello le sumamos los recortes acontecidos en lo que llevamos de legislatura, la Aecid ha visto reducido su presupuesto en casi un 74% desde 2011”, señalan desde la Coordinadora de ONG para el Desarrollo (Congde).

¿Para qué ha servido la Aecid en estos 25 años? Voces críticas como la de Carlos Gómez Gil, doctor en Sociología y director del Máster Interuniversitario en Cooperación al Desarrollo de la Universidad de Alicante, señalan que la institución es “completamente disfuncional”. “Es un lastre para modernizar un modelo de cooperación avanzado. Sus orígenes, como residuo postfranquista, junto una evolución anquilosada, no han estado a la altura de las exigencias estratégicas que tenemos como donantes. Buen ejemplo de lo que señalo es que, durante los últimos años, el volumen de recursos que la AECID ha venido gestionando del total de la cooperación española apenas ha llegado al 20% del total”, critica este profesor, que pone un ejemplo de las “insuficiencias” de la Aecid: “Ni siquiera cuenta con un inventario de infraestructuras financiadas por la cooperación española en su historia en los países del Sur, que en muchos casos están infrautilizadas, cerradas o en desuso”.

David Álvarez, profesor de Periodismo de la Universidad Complutense de Madrid y secretario del Instituto Universitario de Desarrollo y Cooperación, alerta sobre el hecho de que la Aecid ahora mismo tiene “un presupuesto tan exiguo que sólo da para mantener la estructura”. “Eso se nota en todo, en aportaciones que hacíamos a organismos multilaterales como Naciones Unidas, en capacidades técnicas, humanas. En financiación de proyectos, programas de los diferentes actores de la cooperación. En el ámbito de la investigación se había conseguido una herramienta propia para financiar el desarrollo que ha sido laminada. En cooperación universitaria, lo mismo, han desaparecido los programas interuniversitarios con países del Sur. O sea que se nota y mucho: no hay un sólo duro para instrumentos”.

Otros expertos valoran el papel de la Agencia a la hora de posicionar a España en el terreno internacional. “Sin la existencia de la Aecid la cooperación española no hubiera llegado al reconocimiento que ha llegado a alcanzar”, coinciden en su análisis tanto Mercedes Ruiz-Giménez, presidenta de la Congde, como Xavier Palau, director de Cooperación Internacional de Intermón Oxfam. Este último destaca además “los instrumentos de financiación de los últimos años, que permiten el trabajo a largo plazo y promueven una adecuada rendición de cuentas y un mejor aprendizaje a través de auditorías y evaluaciones”.

Las ONG coinciden en que los presupuestos están ahogados y no pueden sufrir más recortes. Si antes la Aecid trabajaba en 49 países, ahora solo lo hace en 23, con especial incidencia en América Latina. “Este brutal recorte está teniendo ya consecuencias que afectan directamente a miles de personas con quienes trabajamos las ONG en distintos países. La propia Agencia está preparando ya planes de salida de algunos lugares. Además, esta situación afectará negativamente a la imagen internacional de España y su rol como socio global a favor del fomento de los derechos humanos”, denuncia Mercedes Ruiz-Gimenez desde la CONGDE.

Para Gómez Gil “los diplomáticos han cortocircuitado la Aecid impidiendo su oxigenación y han despedido a decenas de trabajadores especializados con años de experiencia. La falta de información y publicidad sobre su trabajo es clamorosa, facilitando el amiguismo y el clientelismo, mientras que la rendición de cuentas es una caricatura”.

Gracias al dinero que sigue entrando, se sigue ayudando, por ejemplo, a la erradicación de la pobreza en América Latina o se dedican proyectos a la cultura de la paz, como el que mantiene Manos Unidas en Filipinas. Desde esta organización consideran que Aecid “facilita llegar a más población beneficiaria gracias a sus aportaciones, mejora la cooperación al desarrollo y de la educación para el desarrollo en general”.

Oxfam Intermón resalta el trabajo llevado a cabo con la Aecid en Colombia y que contribuye a la lucha contra la impunidad. “Está orientado a que los crímenes de guerra, de lesa humanidad y el genocidio sean investigados, juzgados y sancionados”, afirma la ONG.

Mercedes Ruiz-Giménez se queda con los logros conseguidos “en el fomento de la equidad de género y los derechos humanos de las mujeres”. “La promoción de la igualdad entre hombres y mujeres, ha supuesto un destacable valor agregado de la Cooperación Española con respecto a otras cooperaciones europeas, un estandarte que ha abierto camino en muchos sentidos y ámbitos”, concluye.