Alycia Rivard lleva una década en contacto con alumnos estadounidenses que vienen durante unos meses a estudiar a Madrid. Actualmente desempeña labores de administración en el campus que la universidad de Stanford tiene en nuestro país. Durante estos años ha ido experimentando cómo evoluciona la vinculación de alumnos inmigrantes de segunda generación con el origen latino de sus progenitores. “Cada vez veo más que estos alumnos hablan bien español y están orgullosos de hablarlo. Antes esto era diferente, para ellos la integración consistía en hablar inglés y solo inglés. Y sí que veo más orgullo en las raíces y en el bilingüismo”, explica esta filóloga que llegó a España hace quince años procedente de su natal Kentucky.
Aterrizó por primera vez en nuestro país sin tener ni idea de español y sorprendida porque Madrid “era una ciudad normal”. “Recuerdo bajar del avión en el aeropuerto de Barajas y ver edificios grandes y carreteras normales. Buscaba algo muy europeo, muy antiguo. Algo como toda la zona histórica de Sol”, reseña. Tras su primera visita enmarcada en un programa de intercambio universitario intentó hacer lo posible para volver. Lo consiguió, cursó un máster y desde entonces mantiene su vinculación con la educación y España.
Una vez consiguió superar el idioma, que se había convertido en el primer obstáculo que se encontró para sentirse inmersa en el día a día de la ciudad, reconoce que al dar a luz y criar a sus dos hijos a miles de kilómetros de su origen se produjo “un segundo shock cultural”. “Al ser madre me encontraba fuera de lo que conocía”. Asimismo, plantea: “Cuando tienes un hijo regresas a tu infancia, a lo que hacía tu madre y tu abuela. Me encontraba en otra cultura, sin mis referencias. Fue como empezar de nuevo”.
Tras años viviendo en Madrid, percibe que a su entorno le sorprende las preguntas que hace sobre los materiales que tiene que llevar su hijo mayor los primeros días de colegio. “Yo no tenía ni idea de que llevan un baby o que tenemos que mandarles con almohada y manta”. Más allá de estas dudas, se muestra acogida por la educación pública, en la que acaba de empezar a estudiar su pequeño. El hecho de que exista una enseñanza y una sanidad de acceso universal, que sea “igual para todos”, fue uno de los factores que destacó al llegar por primera vez a nuestro país.
Este perfil fue publicado en el número 22 de la revista trimestral de eldiario.es, el monográfico 'La España de los migrantes'. Hazte socia o socio ahora y recibe en casa nuestras revistas. Además, disfrutarás de todas las ventajas de nuestros socios, como recibir nuestro adelanto diario y navegar sin publicidad, y nos ayudarás a seguir haciendo posible un proyecto de periodismo independiente con valores sociales.
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