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El Gobierno cede y acepta acoger a una parte de los rescatados del Open Arms
Varios miembros de la Guardia di Finanza, de la Guardia Costera italiana y un equipo médico oficial han subido a bordo del Open Arms durante la mañana de este jueves con el objetivo de revisar la documentación del buque y los informes sanitarios en los que la ONG se ha apoyado para solicitar a Italia su desembarco. La organización ha exigido la evacuación médica de los 145 náufragos después de la resolución judicial que obliga al Gobierno de Italia a “prestar asistencia inmediata a las personas más necesitadas rescatadas”.
La tripulación ve cada vez más cerca el desembarco, pero continúa sin permiso para acceder a puerto. “Han estado a bordo guardacostas, la Guardia di Finanza y un equipo médico. Han revisado los papeles y los informes sanitarios”, ha explicado a eldiario.es Riccardo Gati, jefe de misión del buque Astral, el segundo barco de la ONG Open Arms. En estos momentos, las autoridades italianas han regresado a sus propias embarcaciones, pero se encuentran escoltando al buque humanitario.
“Estamos esperando. No pueden oponerse al desembarco de todos los rescatados, porque estarían incumpliendo una orden judicial”, ha enfatizado Gati. “Los ánimos están mejor. Ver tierra renueva la energía de todos”, describe desde el Open Arms el voluntario Francisco Gentico.
Tras la resolución del Tribunal Administrativo de Lacio que anula la prohibición de entrada del Open Arms a aguas italianas, el buque humanitario se encuentra frente a la costa de Lampedusa a la espera de conseguir autorización para desembarcar. La orden judicial insta al Estado italiano a “prestar asistencia inmediata a las personas más necesitadas rescatadas”. Apoyándose en las medidas cautelares dictadas por el juzgado, la ONG ha solicitado a Italia y Malta la evacuación médica urgente de todos los rescatados para lo que ha enviado varios informes médicos y psicológicos que desarrollan la situación de necesidad de las personas a bordo.
El ministro del Interior italiano se mantiene férreo en su posición de negar la entrada del buque, pero se está chocando con el sector del Gobierno gestionado por el Movimiento 5 Estrellas. Durante la madrugada de este jueves, el ultraderechista Matteo Salvini ha firmado una nueva prohibición al acceso del Open Arms a sus aguas territoriales.
No obstante, este trámite requiere el respaldo de los ministros de Transporte y de Defensa, dirigidos por el partido Movimiento Cinco Estrellas, que se han negado a rubricar el documento.
Elisabetta Trenta, ministra de Defensa italiana, dio la instrucción de enviar dos buques de la Armada para escoltar al Open Arms y para proceder al traslado de los 32 menores que viajan a bordo del barco de la ONG. Según publicaron este miércoles los diarios locales La Reppublica y Corriere della Sera, Trenta se puso en contacto con el tribunal de menores de Palermo para saber en qué condiciones viajaban los menores a bordo y ordenó entonces la movilización de la Armada a las proximidades del Open Arms. En estos momentos, un buque de la Guardia di Finanzas custodia el barco de rescate.
Desde el Open Arms, desconocen si la llegada de las autoridades italianas busca proceder al desembarco únicamente de los menores a bordo o a todas las personas rescatadas. “Al final, sabemos que vamos a acabar desembarcando. Pero en todo este tiempo han provocado mucho sufrimiento porque no ponen en el centro la vida de las personas, sino que las utiliza con desprecio y en función de sus intereses”, ha criticado Gati.
El informe sobre la salud mental de los rescatados, uno de los documentos en los que se apoya el Open Arms para solicitar su acceso a puerto, concluye que la situación de los náufragos es “muy crítica y requiere una intervención oportuna”.
El estudio, al que ha accedido eldiario.es, evidencia la aparición de conductas “autodestructivas” entre algunos pacientes a bordo y el surgimiento de “ideas suicidas” debido a “la experiencia aguda de frustración y dolor”.
“La falta de esperanza acerca del futuro puede ir acompañado de una tendencia a ver el suicidio como una forma de salir de las dificultades por las que has pasado”, contextualizan los psicólogos a bordo. “Los migrantes informan de que, hasta la fecha, no han podido sentirse seguros y continúan viviendo con angustia la posibilidad de ser devuelto a Libia”.