Una niña y un hombre mueren cerca de Canarias en el naufragio de una patera que pidió auxilio a España más de 12 horas antes
Una treintena de personas, entre ellas dos mujeres y una niña de unos cinco años, han desaparecido en el naufragio de una barca neumática a 88 millas de Gran Canaria y 40 millas del Sáhara Occidental ocupado, según ha denunciado la ONG Caminando Fronteras, que llevaba horas en contacto con los pasajeros a través de su servicio de alertas telefónicas. Salvamento Marítimo ha recuperado el cuerpo del niño, mientras que un buque mercante ha localizado el cadáver de un hombre adulto. La institución española de rescate, dependiente del Ministerio de Transportes, conocía la posición de la barca en riesgo 12 horas antes de su hundimiento pero solo intervino cuando la lancha se hundió y recuperó el cuerpo sin vida del menor, que ha sido trasladado a Canarias, según confirman fuentes oficiales de los servicios de rescate españoles a elDiario.es.
De las 61 personas que viajaban en la embarcación, que zarpó de Cabo Bojador (Sáhara Occidental ocupado) rumbo a Canarias, Marruecos ha rescatado este miércoles a 24 personas con vida -22 hombres y dos mujeres- y ha localizado un cadáver, según informa la activista e investigadora Helena Maleno en contacto con los servicios de rescate alauíes. Estas cifras apuntan a que alrededor de 35 personas han desaparecido en el mar. Marruecos aún no ha dado datos oficiales del naufragio.
Caminando Fronteras avisó a las 16:15 horas a Salvamento Marítimo de la neumática en peligro con 61 personas a bordo. A las 19 horas, tras recibir una posición de la patera, la ONG envía las coordenadas a la institución española. 15 minutos después, Salvamento Marítimo activó la búsqueda, según las fuentes oficiales.
En un primer momento, la institución dependiente de Transportes envió el avión Sasemar a la zona, que avistó la patera en riesgo a las 19:53 horas, apunta la información oficial. Entonces, los servicios de rescate españoles pidieron la aproximación a la zona a un mercante, el Navios Azure, un portacontenedores con bandera de Islas Marshall. Este buque permaneció cerca de la lancha en peligro “a la espera de recibir órdenes”, indican las mismas fuentes. Tres horas después de la primera alerta, a las 22:30 horas, Marruecos “confirmó la coordinación del rescate” y los equipos de salvamento españoles dejaron de intervenir hasta el día siguiente, cuando ya se había producido el naufragio.
“Cuando un avión de Salvamento localizó la patera, se solicitó que se desviase un mercante, pero luego se supo que Marruecos asumió la coordinación del rescate y envió una patrullera”, dicen fuentes de Salvamento Marítimo que aseguran no tener información del número total de muertos y desaparecidos. La fundadora de Caminando Fronteras, Helena Maleno, en contacto directo con los pasajeros de la embarcación, confirma que ninguna embarcación marroquí apareció en la zona hasta el día siguiente.
“Es tortura tener a sesenta personas, entre ellas seis mujeres y un niño de unos cuatro años, más de doce horas esperando un rescate en una neumática endeble que puede hundirse en cualquier momento”, advirtió Maleno a primera hora de este miércoles. La barca finalmente naufragó durante esa misma mañana.
A las 6:20 horas, una patrullera marroquí estaba “al costado de la patera” y “algunas personas se encontraban en el agua”, según Salvamento. La institución dependiente de Transportes envió un helicóptero y “recuperó el cuerpo sin vida de un menor” que ha sido trasladado a Gran Canaria, dicen las mismas fuentes a elDiario.es. “No había rastro de supervivientes”.
En la búsqueda de la neumática naufragada, el avión de Salvamento Marítimo encontró otra barca similar en una posición cercana. Esa embarcación sí fue auxiliada por los equipos españoles, cuya embarcación regresó a Gran Canaria durante la noche de este martes con 63 migrantes. Sin embargo, el rescate de la otra lancha se dejó en manos de las autoridades marroquíes porque “Marruecos confirmó su coordinación y el envío de una patrullera” y “ya había un mercante a su lado”, explican fuentes de la institución dependiente de Transportes.
Transcurrieron dos horas y media desde que los equipos españoles avistaron la patera hasta que Marruecos confirmó la coordinación del rescate pasaron, según la información facilitada por Salvamento Marítimo a elDiario.es. Sin embargo, la investigadora Helena Maleno denuncia que las autoridades marroquíes tampoco movilizaron entonces ninguna embarcación: “Tuvieron horas esta gente sin ninguna coordinación de rescate activa”.
Desde Caminando Fronteras llevan años denunciando el uso de Salvamento Marítimo como un “mecanismo de control migratorio”. Según han documentado, los equipos españoles en ocasiones retrasan durante demasiado tiempo el rescate de embarcaciones en riesgo en su intento de que sea Marruecos quienes se encarguen y, así, evitar que sus pasajeros lleguen a las costas españolas. “Lo llevamos denunciando mucho tiempo. Salvamento se ha convertido en un instrumento de control migratorio que vulnera el derecho del mar. Esto está provocando muertes en aguas de responsabilidad españolas”, ha denunciado la fundadora del colectivo.
“Cuando España sabe de la situación de riesgo de estas personas en la zona Canaria, presiona a Marruecos para hacer rescate, pero Marruecos, aunque acepta porque tiene interés en esas aguas, muchas veces no acude . Hoy está muy claro: el responsable de estas muertes es el Estado español”, incide Maleno. La activista ha denunciado que el área marítima donde se ha producido el naufragio forma parte de la zona de búsqueda y rescate (SAR) bajo responsabilidad española, según la legislación internacional, pero Marruecos se atribuye la titularidad de las aguas del Sahara Occidental. Salvamento Marítimo defiende que se tratan de zona de responsabilidad compartida de búsqueda y rescate.
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