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Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Bruselas critica la falta de acción de los 28 en la crisis migratoria del Mediterráneo

EFE

Bruselas —

El recrudecimiento de la crisis migratoria en el Mediterráneo y la presión en el paso de Calais ha llevado a la Comisión Europea a llamar al orden a los Veintiocho para que cumplan sus promesas de solidaridad y aporten más medios para las operaciones de vigilancia marítima de Frontex.

Los países de la Unión Europea (UE) presenciaron esta semana una nueva tragedia frente a las costas de Libia, en la que murieron al menos 25 personas y centenares desaparecieron, sin dar nuevos pasos para llevar a la práctica la batería de propuestas acordadas a escala europea para hacer frente al fenómeno migratorio.

La Agencia Europea de Fronteras Exteriores (Frontex) reclamó a los gobiernos que aporten más medios, sobre todo personal, patrulleras y equipos técnicos, para las operaciones de vigilancia marítima, en especial en Grecia, a cuyas costas han llegado 50.000 personas solo durante el pasado mes de julio, una cifra récord, superior a la de todo 2014.

Los líderes de la UE se comprometieron en su cumbre del pasado 23 de abril a triplicar los fondos y aumentar los medios de las operaciones de Frontex, “Tritón” y “Poseidón”, después de una oleada migratoria anterior en la que fallecieron más de mil personas en el Mediterráneo.

“Pese a los fondos adicionales, puede que no podamos ayudar a los países que necesitan asistencia a menos que recibamos el equipo necesario. Urjo a los Estados miembros a que consideren aportar más medios”, dijo el director adjunto de Frontex, el español Gil Arias.

El Ejecutivo comunitario se sumó a este llamamiento y pidió a los países que sus palabras “vengan seguidas de acciones concretas”. “Es muy fácil llorar delante de la televisión cuando se ven estas tragedias, pero es más difícil levantarse y asumir responsabilidades”, señalaron el vicepresidente primero de la CE, Frans Timmermans; la alta representante de la UE, Federica Mogherini, y el comisario europeo de Inmigración, Dimitris Avramopulos esta semana en un comunicado conjunto.

“Lo que necesitamos ahora es la valentía colectiva para completar con acciones concretas palabras que si no sonarían a vacías”, subrayaron.

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) reveló este jueves que más de 225.000 inmigrantes y refugiados han llegado este año a Europa por el Mediterráneo, de los que más de la mitad, unos 124.000, desembarcaron en Grecia.

La CE dijo ser consciente de que la situación en Grecia es urgente y adelantó que la próxima semana prevé aprobar el desembolso de un primer tramo de ayuda al país heleno del Fondo de Asilo, Inmigración e Integración (AMIF), que podría ascender a unos 8 millones de euros.

En paralelo, el primer ministro griego, Alexis Tsipras, anunció un plan gubernamental para abordar la crisis migratoria que registra el país en los últimos meses, utilizando instrumentos y partidas europeos.

La situación de desgobierno en Libia, que había sido en los últimos años el principal punto de partida de las barcazas rumbo a Italia, y los constantes naufragios en esta ruta han convertido el trayecto entre las costas de Turquía y algunas islas griegas en la alternativa “más segura y barata”, explicó este viernes el director para Europa del ACNUR, Vincent Cohetel.

Sólo en el mes de julio se registraron 50.000 llegadas a Grecia, lo que significó 20.000 más que el mes anterior. Pero las condiciones que se encuentran los refugiados y migrantes al llegar a Grecia son “caóticas”, prácticamente no existen lugares de acogida apropiados y, cuando los hay, “se parecen más a centros de detención”, advirtió Cohetel.

“Pedimos al Gobierno de Grecia que asuma el liderazgo y la coordinación de la respuesta a esta emergencia”, resaltó el representante del ACNUR, quien aseguró que esto permitiría a las organizaciones internacionales prestar la ayuda con la que cuentan de forma efectiva.

“Somos conscientes de las limitaciones del Gobierno griego, pero le pedimos que asigne lugares para los refugiados. Hay muchos cuarteles militares sin utilizar o tierras no cultivadas...Cualquier cosa es mejor que nada”, declaró Cohetel.

Bruselas intentó dar una respuesta europea a la crisis migratoria en mayo, cuando presentó una estrategia que incluía el refuerzo de la presencia en el mar y un sistema de cuotas obligatorio para el reparto de refugiados. Abogaba también por impulsar medidas como la lucha contra las mafias que trafican con inmigrantes, la cooperación con los países de origen y tránsito y la solidaridad entre naciones.

Pero, los Veintiocho se mostraron muy reticentes a aceptar medidas como el reparto de cuotas obligatorio, y finalmente optaron por acciones voluntarias menos ambiciosas.

Calais, un foco más de la crisis migratoria

Esta falta de compromiso de los países también fue subrayada esta semana por la Comisión Europea, con motivo del aumento de la presión en el paso de Calais que conecta a través de un túnel Francia con el Reino Unido. La CE anunció el desembolso inmediato de 20 millones de euros del AMIF a Francia y delineó la asistencia técnica que puede ofrecer a París y Londres a la hora de hacer frente a la situación.

Sin embargo, aprovechó la ocasión para recordar al Reino Unido, uno de los países que se negaron a participar en el sistema de cuotas de reparto de refugiados, que para hacer frente a estas crisis a nivel europeo hace falta solidaridad entre países.

Sobre la situación en Calais, el ACNUR reclamó que París presente un plan global de emergencia para atender la terrible situación de al menos 3.000 inmigrantes y refugiados varados en esa ciudad del noroeste de Francia. La situación en la que están viviendo, alertó el ACNUR, es tan degradante que requiere que se movilicen los medios que, en circunstancias normales, serían utilizados en caso de un desastre natural.

Está por ver si el llamamiento de Frontex y Bruselas y la gravedad de la situación sirven de acicate para movilizar la buena voluntad de los Estados miembros en pleno periodo vacacional en Europa.