- Según los datos de Acnur, solo las personas de origen árabe pueden pedir protección internacional en estos puestos, la mayoría sirios
El Ministro del Interior ha afirmado que, tras la inauguración de las salas de asilo en los puestos fronetrizos de Ceuta y Melilla, “quedará muy claro” que las personas que intenten entrar en España saltando las vallas de las ciudades autónomas no tendrán derecho a pedir asilo “en principio” porque, según dice, podrán hacerlo en las futuras oficinas. Sin embargo, la Ley de Asilo española y la normativa europea protegen el derecho al asilo para todas las personas, siempre que lo necesiten.
“'A sensu contrario' quedará muy claro que los que intenten entrar ilegalmente a España, a la UE y al espacio Schengen a través de los perímetros fronterizos de Ceuta y Melilla no son personas que en principio tengan derecho a esa petición de asilo y de protección internacional, porque lo podrán ejercer a través de esas oficinas en los pasos fronterizos”, ha advertido.
Aunque las oficinas de asilo serán inauguradas en marzo, comenzaron a funcionar en septiembre a modo de prueba. Al menos por el momento, solo pueden solicitar protección internacional las personas de origen árabe, en su mayoría sirios. Los subsaharianos no están teniendo acceso a las oficinas de asilo según los datos del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y como denunció en su visita a España el comisario de Derechos Humanos del Consejo de Europa. A día de hoy, los potenciales demantantes de asilo de raza negra solo pueden acceder a este derecho a través de la entrada irregular, siempre que no sean devueltos de forma ilegal tras pisar suelo español.
La Ley de Asilo y la normativa europea establecen que toda persona tiene derecho a pedir asilo, independientemente de su modo de entrada en el país, siempre que exista un “miedo fundado de persecución” en su lugar de origen. Según Acnur, el 60% de las personas que saltan las vallas de ceuta y Melilla son potenciales refugiados.
El PP ultima la enmienda para “rechazar en frontera”
En declaraciones a los periodistas, Fernández Díaz ha explicado que la creación de estas oficinas de petición de asilo y protección internacional se añadirá en la enmienda que el PP presentará en las próximas horas en el Senado -que por el momento incluye la regularización de las devoluciones en caliente- para reformar la Ley de Extranjería, vigente desde el año 2000, a través de la nueva Ley de Seguridad Ciudadana.
El ministro ha hecho estas declaraciones en una jornada sobre la trata de personas que se celebra en Barcelona y a la que ha asistido también el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, y la delegada del Gobierno en Cataluña, Llanos de Luna.
Según Fernández Díaz, a estas oficinas que se prevé crear en los puestos fronterizos de Ceuta y Melilla se podrán dirigir los inmigrantes que consideren que estén subjetivamente en condiciones de pedir el derecho de asilo y protección internacional.
El ministro ha explicado que el Gobierno y el PP llevan estudiando desde hace semanas la posibilidad de incorporar alguna enmienda relativa al control de los perímetros fronterizos de Ceuta y Melilla, a raíz del “crecimiento exponencial” de las peticiones, procedentes especialmente de Siria.
Esta enmienda es complementaria a la que el PP ya introdujo para “dar absoluta y plena seguridad jurídica al concepto operativo de rechazo en frontera” para dejar claro que las negativas en frontera “se efectúan de conformidad con toda la normativa comunitaria e internacional en materia de derechos humanos”, según Fernández Díaz.
A tal efecto, Fernández Díaz ha indicado que su ministerio elaborará próximamente un protocolo de actuación al que deberán someterse los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado en los puestos fronterizos de Ceuta y Melilla.
Paralelamente, se constituirán las oficinas de asilo y protección internacional en la frontera de Ceuta y Melilla, “para todas aquellas personas que quieran ejercer ese derecho porque consideren que están subjetivamente en condiciones de tener este derecho”.